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La noche anterior ambos habíamos hecho el amor mientras el bebé dormía. Jungkook y yo nos demostrabamos lo que era el cariño real y es algo que me hacía sentir muy contenta.
—¿Dormiste bien, amor?— pregunto con mucha alegría.
— Si y ¿tú como dormiste?
— Con todo lo que hicimos anoche sinceramente dormí como un bebé — el reía — ¿A propósito el bb sigue dormido?
— Despertó y ahora esta en el parque junto a Mariana — le sonreí
Esta mañana yo había preparado el desayuno para Jungkook, porque definitivamente hoy va hacer un día muy ajetreado y quería que se alimente bastante bien y no solo con una taza de café ya que eso no te ayuda en nada al menos para mantenerte despierto pero no es un alimento.
Mientras conversaba con él me dirigí a la cocina en busca de cubiertos, pero de un momento a otro un tenedor se me cayó al suelo lo que provocó una pequeña risa de mi parte y al tratar de agacharme un leve mareo llegó a mi.
— ¿Estás bien?
— Si, estoy bien — sonreí.
— ¿Todavía sigue en pie lo de anoche cierto?
— Si Jungkook — suspiré — le daré mi apellido al bb así que come, porque debemos salir.
Mientras él tomaba su desayuno el cual consistía en tostadas con palta y huevo un poco de fruta un café con una cucharada de azúcar y algo dulce que sí o sí te voy a comer yo simplemente observaba lo hermoso y perfecto qué es aquel hombre ya que sinceramente no parece real mientras lo observaba un toque en la puerta nos sacó de nuestra burbuja a ambos.
— Volvió rápido Mariana.
— Ella tiene llaves— dije.
Me dirigí rápidamente a abrir la puerta y salir de la duda de quién era ya que cuándo son mis padres los que vienen a visitarme avisan y cuando son los amigos de jungkook también lo hacen.
Al abrir la puerta pude ver a un hombre de aproximadamente unos 60 años de edad o eso es lo que puedo ver aquí al hombre vestía con un traje totalmente negro y con dos anillos en sus manos, su mirada era muy seria y puedo decir que causó un poco de escalofríos en mi cuerpo, pero no le di mucha importancia.
— Hola ¿A quien busca?— pregunté.
— Al idiota de jungkook — soltó el— soy el abuelo de su hijo.
Por un momento pensé lo peor y eso significa que por mi mente pasaron las más locas ideas de que él quisiera llevarse al pequeño y crearlo para convertirlo en un pequeño títere del.
—¿Que mierda haces en mi casa? — respondió enojado — ¿Cómo sabes dónde vivo?
