Espíritu de la noche

Capítulo V - Trampa

El día estaba tan extraño.

Abraham Van Helsing no podía descifrar por qué, pero lo estaba, y en su alma sentía una inquietud que no se aquietaba con nada.

Tal vez presentía que Drácula vendría a por él, pronto.

Encendió un tabaco y se acomodó el sombrero, toda la gente pasaba frente a él como si fuera él un simple espectador, nunca involucrado con ellos. Y nunca lo estaba, de hecho.

Sabía que vendría por él, tenían muchas cuentas pendientes.

Ahora... ¿Cómo obraría Alexander Grayson? ¿Era él o era Mina primero? No lo sabía, de ahí la inquietud.

Suspiró, y la neblina lo cubrió todo.

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-Profesor Van Helsing- Jonathan Harker lo esperaba. Llevaba un abrigo gris que lo cubría casi todo.

-¡Joven Harker, no debe dejar sola a la señorita Murray!- se perturbó el hombre.

-Quiero hacerle una pregunta- al ver que el profesor no se detenía, empezó a perseguirlo –Algo que Mina aún no sabe-

Van Helsing detuvo su paso, a pocos metros de la entrada al zoológico de Londres.

-Anoche estoy seguro que no estábamos solos-

-¿Qué dice?- Van Helsing pareció sorprendido.

-Lucy Westenra, profesor, debe decirme ¿Fue él quien la mató, profesor?- Jonathan tenía una expresión honesta en el rostro -¿Es ella una de sus criaturas ahora?-

-No lo sé, ¿Qué le hace pensar eso, joven?- el profesor clavó sus ojos sobre Harker.

-Porque anoche no estábamos solos, había alguien siguiéndome y estoy seguro de que no era Alexander Grayson-

Van Helsing no debía de estar tan sorprendido de que hubiera más, más aún de lo que ya sabían. Y no le gustó nada saber eso.

Apagó el tabaco inexpresivo, observando a Jonathan Harker minuciosamente.

-Esto no ha terminado, me temo que apenas comienza. Esta noche aparecerá, señor Harker- dijo al fin- Aparecerá Drácula. No sé dónde, y no sé si vendrá por nosotros o por Mina Murray primero-

-¿Ella corre peligro?-

-No lo sé- el hombre pensaba que tal vez no era buena idea el estar todos juntos. Eran como el banquete completo para el vampiro.

El frío de apoderó de ambos hombres mientras la gente transitaba tranquilamente a su alrededor, como si existieran en otra dimensión.

-Actuará rápido, antes de que otros se inmiscuyan. Las muertes no permanecerán en la oscuridad por mucho tiempo. Sé que anoche hubo más...- tomó un respiro - Le conviene actuar rápido, pero ahora no sé qué pretende-

Y Van Helsing calló, no quería involucrar ahora el asunto de Lucy, pero miró hacia Jonathan Harker con extrema preocupación:

-Lo necesito, señor Harker, necesitamos trabajar juntos contra él. Por favor cuídese-

Harker abrió mucho los ojos sin captar del todo la indirecta del profesor.

-Eh... lo haré profesor- dijo Jonathan con inseguridad –Lo haré- y sin esperar más se aleja por la calle hasta perderse de vista.

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La verdad es que él todavía no estaba preparado para eso, y si La Orden se enteraba de eso, podría ocurrirle lo mismo que a Lord Laurent. Jonathan Harker estaba metido en un gran embrollo.