santa

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Yoongi

—¡No! —Me envuelvo alrededor de Jungkook, no queriendo que se vaya a ninguna parte. ¿Por qué Cinnamon Stick intenta arruinarme todo? —Ignoralo. —Mi voz no suena como la mía en este momento. Acerco la boca de Jungkook a la mía antes de que pueda decir algo. Me besa, ignorando el sonido de las campanas. Cuando encuentre al nuevo Santa, voy a despedir a ese molesto elfo!

Gimo en la boca de Jungkook cuando comienza a hacer embestidas superficiales contra mí, su polla apenas se desliza dentro. Mi cuerpo todavía está zumbando por todos los orgasmos que ya me ha dado. No tenía idea de que este tipo de placer existiera en el mundo.

Esto finalmente va a suceder. ¿Cuántas veces he soñado con este momento? Jungkook me quiere. No estoy seguro de cómo no lo vi antes. Cuanto más tiempo pasaba con él en público, más podía ver lo diferente que miraba a los demás en comparación con cuando esos ojos estaban sobre mí.

El timbre comienza de nuevo, pero esta vez más fuerte. Juro que voy a aplastar ese teléfono jingle, y Cinnamon Stick también está presionando su suerte. Jungkook aparta su boca de la mía. Su respiración es pesada y puedo decir que está luchando contra su autocontrol.

—No lo estaremos haciendo así. —Se mueve, haciendo que su polla se escape de mí. Gimo por la pérdida.

—No, está bien. Ignoremos el teléfono y seguirás haciendo lo que estabas haciendo. —Empujo, pero él niega con la cabeza. Sé que su control es muy poco en este momento. Todo lo que haría falta sería darle un pequeño empujón. Luego se rompería y me daría lo que quiero.

—Cuando te tome no voy a tener prisa, Pedacito. Me voy a tomar mi tiempo. Voy a saborear cada centímetro de ti. Te dije que esto es para siempre. No tenemos que apresurarnos.

Maldición. Él tiene razón. También creo que estoy enamorado de este hombre.

—Está bien. —Estoy de acuerdo. Presiona su boca contra la mía para un último beso antes de levantarse de la cama. Dejo escapar un suspiro mientras lo veo vestirse. Sus ojos permanecen en mí todo el tiempo. Todavía no puedo creer que me haya querido todo este tiempo. Podríamos haber estado haciendo esto hace mucho tiempo. Me río para mí mismo pensando en cómo desperdicié todo ese tiempo pensando en esos elaborados planes para poder pasar tiempo con él. Al menos ahora estamos en la misma página.

Por un momento pensé que podríamos estar moviéndonos demasiado rápido, pero en realidad hemos estado bailando alrededor del otro durante demasiado tiempo. Se inclina y agarra mi ropa, del suelo para mí. No me sorprende cuando Jungkook me ayuda a vestirme.

Descanso mi cabeza en su pecho por un momento, olvidándome de las campanas que siguen sonando y parando. Es bueno tener a alguien aquí conmigo. No me di cuenta de lo solo que me había sentido hasta ahora.

—Ya que eres, como mi novio, ¿patearías el trasero de Cinnamon Stick por mí? 

—No creo que haya mucho que no haría si me lo pidieras.

Lo miro. Las palabras te amo cuelgan de la punta de mi lengua. Antes de que pueda debatir sobre soltarlas, las campanas comienzan de nuevo. Jungkook besa la parte superior de mi cabeza, luego camina hacia mi tocador.

—Viene de aquí.

Me encojo de hombros.

Abre el cajón superior y saca un teléfono brillante, los bordes están iluminados con mini bombillas verdes, rojas y blancas, la pantalla muestra una foto de un árbol de Navidad.

—Definitivamente es un teléfono Jingle.

Respira hondo antes de contestar, luego lo pongo en altavoz.