A la mañana siguiente Quackity se sentía descansando, como si un gran peso y angustia se hubiese disipado con tan sólo haber llorado, su cabeza dolía igualmente, así que decidió quedarse quieto en medio de las sábanas, que cada vez se ponían más cómodas y suaves, entonces volvió a caer dormido, no haría daño una pequeña siesta, no es como si tuviera que esperar por alguien.
Esa pequeña siesta se convirtió en 7 horas completas, la mañana ya había acabado y el sol se estaba comenzando a ocultar, en invierno oscurecía más temprano. El híbrido de pato escuchó cómo se abría de repente la puerta del apartamento, no podía ser nadie más que Luzu, unos minutos pasaron en los que Quackity escuchaba a Luzu yendo de un lado a otro, cuando se detuvo, la casa se quedó en un silencio inquietante, pero al cabo de unos segundos se volvieron a escuchar los pasos, ahora enojados caminar hacia su habitación, eso extrañó al híbrido, Luzu jamás se había acercado a su dormitorio, hasta llegó a dudar de que se tratara del ojirrojo, pero se confirmó su identidad cuando un azote hizo que la puerta por la cantidad de fuerza ejercida se abriera y golpeara con ferocidad la pared.
Luzu estaba furioso, se veía intimidante e intratable.
- ¿Qué mierda es esto Quackity? -preguntó el castaño con un tono agresivo que se trataba de disfrazar en tranquilidad.
Quackity no respondió, no sabía a qué se refería, no había visto el papel que su esposo sostenía en sus manos.
- ¿No responderás? ¿Acaso este tal "S" te folló tanto que te quedaste sin voz eh?
- No sé de qué hablas, no entiendo yo- antes de que terminara de hablar, Luzu se acercó rápidamente y lleno de ira, presionando el papel en la cara del híbrido, sentía que su nariz iba a romperse.
- ¿Ah si? ¿No recuerdas? Entonces debió ser una noche maravillosa para ti, no perdiste el tiempo, por eso los híbridos son animales sin escrúpulos y fáciles- tomó con fuerza la parte de atrás de la cabellera de Quackity, estirando su cabeza hacia arriba y mostrarle el papel, enmudeció- ¿Ahora recuerdas?
La fuerza ejercida por Luzu hacia Quackity hacía que el híbrido de pato sólo tratara de buscar una forma de que no doliese tanto, estaba muy débil físicamente como para apartarse o golpearlo, gritarle o armar un gran escándalo. Sólo podía quedarse allí, en punta de pie, casi colgando mirando lo que tenía tan enojado a su esposo. Una carta de Shadoune. Las imágenes del día de ayer llegaron a su mente, él siendo genuinamente amado, pero el destino odiaba ver un ápice de luz en su vida, un día alguien limpiaba su cabello gentilmente y al otro la persona que alguna vez amó y casi dio su vida por él lo tenía colgando. Y soltó una risa, riéndose de él mismo, su mediocridad y falta de amor propio, su ingenuidad y estupidez, todo lo que él era como ser humano... ¿podía él considerarse siquiera humano?
- ¿De qué te ríes? ¿Te doy gracia?- Luzu no se contuvo y arremetió contra el débil cuerpo de Quackity, un golpe de puño que lo tumbó enseguida, siguiendo la golpiza con tres patadas en sus piernas y uno en el vientre. El joven golpeado no paraba de reír y poco a poco su sonrisa se convertía en una mueca de total rabia hacia él mismo, no pudo negarse cuando sus ojos comenzaron a aguarse. Luzu lo miró con enojo y según Quackity, asco, para después girarse y hablarle con un tono condescendiente.- Se ve que tu capricho de pasar conmigo el resto de tu vida acabó, si ya tienes a un nuevo estúpido que soporte mirarte y sostenerte, dile a mis padres que quieres el divorcio, si no, este edificio tiene cámaras en los pasillos, haré pública tu infidelidad y toda tu vida quedará marcada -el ojirrojo caminó hasta la puerta del departamento y antes de abrir la puerta elevó la voz y dejó un último mensaje- ¡en una semana Auron se mudará aquí, tienes ese plazo para tomar tu elección! -y por fin se marchó.
Quackity quedó tirado en el suelo, mirando el techo de la habitación, recordó entonces que él quería una casa de colores claros y detalles de madera, pero su realidad era un insípido techo de concreto gris y una habitación sin alma, le pareció una broma del destino que su realidad fuera comparada con un techo gris. El chico pasó los siguientes tres días viviendo como lo hacía antes de que tuviera la recaida, se levantaba, se bañaba, hacía las compras y regresaba al departamento, no tenía la valentía de ir a fijarse si Shadoune estaba en la azotea trabajando, perdió todo su valor cuando sacó fotos a su cuerpo golpeado el día siguiente a la golpiza. Aún estaba recobrando poco a poco las energías para enfrentarse a los Vlogs y pedir el divorcio, además de pensar en cómo pedirle a su padre dinero para contratar un abogado para los tramites, tendrá mucho trabajo que hacer y muchas explicaciones que dar, seguramente soportar un bombardeo de amor por parte de la familia de su esposo para tratar de convencerlo de no dejar a Luzu, escuchar las mismas historias de siempre del pasado y a su padre decir que sólo debía "soportar un poco más", que pronto independizaría la empresa y mil palabras más de personas que lo utilizan para iluminar sus propias vidas, sin darse cuenta que su sol hace ya tiempo dejó de brillar, que ahora está en el fondo de un abismo envuelto en una bruma espesa y asfixiante.
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Actualicé porque sentía que si seguía con este capitulo en borradores me iban a crucificar. No es mi mejor capitulo, pero espero que se me ocurra algo para darle un final bueno (para mi) y cerrar esta etapa.
Posdata: esto cumplió ya un año de publicado, es mi historia más leida, aprecio mucho a las que leen este ship a pesar de que la serie karmaland tuvo su último cap en 2022. Besitos.
-sel
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Damasquina [luckity angst AU]
Fiksi PenggemarQuackity se casó hace cinco años con el empresario más prestigioso de toda Karmaland, se conocen desde niños y Luzu nunca volteó su mirada hacia él, ni siquiera el día de su boda. Aviso: me gusta dar contextos, en mi universo Tortillaland, DreamSMP...