En donde Marc Guiu ejerce el papel de adulto.
¿Que de malo puede pasar?🌻💛
—¿Estás seguro de que es buena idea? —Héctor preguntó mientras se acomodaba la gran tela blanca sobre su ropa.
—¿Se me nota mucho que no soy árabe? —Lamine preguntó mientras se miraba al espejo.
—En la cara. —respondió Guiu quien hace horas -exageradamente- estaba listo.
—¡Pero ayúdame! —protestó Héctor, el mayor lo ayudó a colocar bien su traje árabe.
Ya los tres estaban vestidos tradicionalmente como los nativos del lugar.—Deberíamos quitarnos una foto. —La idea fue propuesta por Lamine, todos estuvieron de acuerdo. Se tomaron varias fotos y después vino la mejor parte.
Escapar.
Aunque les fue muy sencillo, nadie logró reconocerlos gracias a los enormes bigotes disimulados que se pusieron. Al salir del hotel miraron a la multitud de fans que esperaban a por el equipo, menos mal ellos eran unos árabes.
—¿Esto es buena idea? —Héctor preguntó una vez que se subieron al Taxi que habían detenido.
—Relájate y disfruta, estás con un adulto. —Marc le respondió, los dos menores se miraron un poco preocupados pero al final continuaron su camino.
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—Definitivamente no fue buena idea.
Y Lamine no pudo estar más de acuerdo con Héctor, los tres habían parado en una prisión de la capital. Por unos que otros impertinentes.
—¡Dios mío, hay que llamar a un adulto! —Marc dijo asustado, no estaba en planes de ninguno ser detenidos por la policía si estaban disfrutando nada más de su estadía en Arabia. Actualmente llevaban cuatro horas dentro de la celda de la comisaría, e iban pasando las tres de la madrugada.
—Tú eres un adulto. --Héctor dijo enojado.
—Un adulto, más adulto. —aclaró Guiu. Lamine tuvo que interponerse entre ambos antes de que Fort le arranque la cabeza a Marc.
—El míster se dará cuenta de que no estamos. —dijo Yamal, seguro de que en el entrenamiento de la mañana Xavi se iba a enterar de sus ausencias. Y por ende podrían buscarlos y si está en cabales de la ley sacarlos sin inconvenientes.
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—Faltan cuatro horas para la final. Y estamos cuatro días aquí. —Marc estaba parado observando la pared. Una pared donde había marcado cuatro rayas, contando los días que le faltaban para salir de prisión antes de volverse loco.
Héctor se había encargado de pedir un libro árabe-español para mínimo apelar por su libertad. Aunque también fracasó.
Lamine solo estaba preocupado de que el míster no los hubiera buscado, en lo absoluto. Estaba por llorar cuando el estruendo se escuchó.
—¡Ustedes tres pequeños insolentes!
Xavi entró hecho furia, y los tres chicos empezaron a llorar, jamás se alegraron tanto de ver al abuelo plagueon como le decían. Xavi fue atraído en un abrazo por rejas de por medio. El mayor tuvo que aguantar la rabia ante lo que se avecinaba.
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—¿Cómo me van a explicar todos estos cargos en su contra?
—Te juro que hay una explicación para todo. —Marc dijo con ojitos de gatito, el mayor tuvo que suspirar.
—Terrorismo... —dijo Xavi.
—Llevamos nuestra mochila y adentro un dron. —explicó Héctor.
—Usurpación de identidades....
—Solo dijimos que éramos descendientes directos de Suleyman el sultán. —respondió Lamine.
—Perturbaciones a La Paz pública.
—Nos metimos a jugar en un parque para niños y nos peleamos con una señora. —Marc admitió apenado.
—Secuestro...
—¡El gatito quería venir con nosotros! —los tres gritaron al mismo tiempo.
—Secuestraron al Puma del príncipe. —Xavi dijo enfadado. Los tres agacharon la cabeza nuevamente apenados.
—Un gatito de un metro... —Marc trató de sonar divertido.
—Daño a la propiedad privada.
—El señor no nos quiso dejar salir. —Lamine explicó. Xavi suspiró.
—Robo a mano armada.
Los tres se miraron confundidos.
—No hicimos tal cosa, solo pagamos un helado con lápices que sacamos de una librería gratuita... —Marc dijo confundido, pero después los tres se miraron entre sí. Puede que no haya sido tan gratis.
—Actos de racismo.
—Marc me dijo negro frente a un grupo de gente. —Lamine admitió. Xavi suspiro más de una vez.
—Trata de menores...
Marc agachó la mirada, ese cargo iba para él. El único adulto entre los tres.
—Delitos menores... chicos... no sé si ustedes se dan cuenta que se están enfrentando a mínimo 40 años de prisión o multa de diez millones de euros cada uno.
Los tres niños se miraron entre sí. Esperando lo peor.
Pero Laporta entró por la puerta. Y una vez más empezaron a llorar.
—Cálmense chicos... vamos a casa. —el mayor tuvo que ingeniarse para caminar con los tres pegados a él. Xavi miró con desaprobación. Y eso que hace media hora se enteró que los tres no estaban.
Era muy viejo para estos sustos.
<3
AJAJAJSJS BASTA
PATO🌻
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Barça Kids: Las aventuras de la Masía.
FanficLos chicos de la masía en diferentes situaciones de adolescentes. 🌻💛