Capítulo #7

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-Pues aquí estoy -dije sonriendo -¿De qué querías hablar?.

-De lo de la mañana -dijo.

-¿Qué con ello? -dije con una sonrisa que mas bien parecía una mueca.

-No se porque me enojé contigo, es por eso que no contesté, apenas nos conocemos, no debería estar enojado contigo -soltó un poco apenado.

-No hay problema, así déjalo, como has dicho apenas nos conocemos -dije.

-Perdón.

-No hay que perdonar, buenas noches -sonreí.

-Igualmente -asintió a mi gesto.

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Estaba en el laboratorio de Bruce, tenía que hacerme otras pruebas, para tomarlas en cuenta para el suero en el que estaba trabajando, era muy temprano las 7:00 para ser exactos, el entrenamiento lo tendría hasta las 9:30, estaba con una bata color azul, mi espalda estaba descubierta lo cual se me hacía incómodo, me recosté en la camilla de metal, al sentir el frío del mueble recorrer mi espalda mi piel se erizó. Al acostumbrarme a la temperatura del material Bruce comenzó a hacer las pruebas necesarias. Conectó unos cables a mi cabeza, los cuales eran para percibir mejor la potencia de la telequinesis, otros mas estaban pegados a mis piernas y brazos, éstos no sabía para que eran, otra aguja se posó en mi antebrazo extrayendo el líquido que corre por mis venas, dejo la inyección sobre una mesita. En este momento me sentía cual conejillo de indias, lo cual no es muy divertido que digamos. Seguí así por unos minutos hasta que las pruebas habían finalizado. Me levanté de la camilla y me dispuse a ponerme mi la ropa que traía antes de llegar al laboratorio.

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9:30.

Ahora me tocaba el entrenamiento, Steve traía puestas unas manoplas de boxeo, si esos famosos cojines que usan los entrenadores de box.

-Empezaremos con golpes básicos -dijo Rogers con las piernas abiertas -primero será puño izquierdo a la manopla derecha y después puño derecho a la manopla izquierda ¿Quedó claro?.

Asentí y comencé con los golpes, izquierda, derecha, izquierda, derecha, y así seguí un rato, cada vez que golpeaba aumentaba la fuerza en mis golpes.

-Excelente, ahora, patada izquierda hacia la manopla derecha y después patada derecha a la manopla izquierda, lo mismo, solo que ahora con tus piernas -dijo haciéndolo sonar tan sencillo.

Comencé a hacer lo mismo pero ahora con mis pies, era fácil, pero sentía que en cualquier momento caería de espaldas, seguí hasta que paso lo que temía, caí de espaldas, Steve río, yo solo lo fulminé con la mirada.

Seguimos así como unos 30 minutos, ya era hora de comenzar con las asesorías de defensa con un arma, mi arma seleccionada sería un cuchillo, suena fácil, pero tengo miedo de lastimar alguien.

Caminé hacia Clint y Natasha, ellos al verme sonrieron.

-Hoy será distinto -dijo Clint.

-¿Distinto? -pregunté.

-Si ahora no usarás medios físicos para atacar, ya sabes a que me refiero -dijo Natasha.

Claro que sabía a que me refería, usaría mis poderes, frente a mi, habían 10 costales, a lo largo, los cuales tienen un círculo de color rojo dibujado en el centro, a mi derecha habían 10 cuchillos y al lado de éstos había un pañuelo color azul marino.

-Tendrás que darle al centro del círculo con las cuchillas y tendrás que tener los ojos vendados -explicó Natasha.

Clint tomó el pañuelo entre sus manos, se puso detrás mío y me vendo los ojos con el pañuelo. Es casi imposible mover algo con mis ojos vendados, pero tengo que intentarlo, los entrenamientos los programa Fury y como el es mi jefe, debo cumplir sus órdenes. Había memorizado donde estaba la mesa con los cuchillos y donde tenía los costales, creo que esto facilitará la actividad. Moví mi cabeza hacia la derecha, y comencé a hacer flotar la hoja de metal, la lancé lejos, hice lo mismo con las 9 restantes. Me quité la venda, solo 3 cuchillos habían dado en el costal mas no en el círculo rojo. Lo intenté dos veces más, las dos veces fallé, con el mismo resultado de la primera ronda, pero como dicen "la práctica hace al maestro" y no me queda otra opción más que seguir practicando.

The new avengerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora