𝐃𝐀𝐈𝐒𝐘━━━ 𝐓𝐀𝐒𝐊 𝐅𝐎𝐑𝐂𝐄 141

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Aeris, Kamli y Jim descansaron lo justo y necesario para comenzar el día de manera aceptable. A pesar de que los dos híbridos estaban dormidos, seguían alerta por si algo sucedía. Cuando el reloj marcó las 4 de la mañana, los tres se levantaron sin necesidad de una alarma, ya que habían ajustado sus cuerpos a un horario establecido. Kamli fue el único que se cambió al uniforme táctico, mientras que Aeris y Jim optaron por el uniforme sanitario para mayor comodidad.

Aeris y el híbrido de liebre ayudaron al más alto, aunque apenas lo necesitara. Al salir de la habitación, sintieron el frío de la mañana, por lo que Kamli regresó para tomar un chal blanco, unos guantes de tela y un tapabocas para Aeris.

Después de acomodarle el tapabocas, los tres salieron cerrando la puerta con cuidado. Ambos híbridos llevaban una alforja de cuero y una brida del mismo material.

Cuando llegaron a la zona abierta donde habían aterrizado, fue sorprendente para Aeris ver a la manada de Price allí también, incluyendo a los dos hombres que habían faltado el día anterior.

—No esperaba verlos tan temprano —mencionó la fémina. Sabía que los habían sentido y olfateado desde hacía un momento, al igual que Kamli y Jim.

—Lo mismo puedo decir —la cola escamosa de Price se balanceó ligeramente al ver lo que traían, además de ver al más alto listo para una misión— ¿algo que deba saber a último momento?

La manada también se sorprendió al ver a los tres tan temprano y equipados. Ghost no quitaba la mirada de la brida. ¿Por qué tenía una brida para caballo?

—Kamli debe irse, tiene una misión, capitán. —Aeris respondió con calma—. En realidad, solo nos quedaremos Jim y yo en la base, y Kamli vendrá de vez en cuando a darme informes. —el mencionado asintió—. Iba a hablar del tema más tarde, pero ya que estamos aquí me ahorro eso.

La manada miró extrañada al trío. Si Kamli tenía que irse, ¿por qué no programó o avisó para que un helicóptero lo llevara a donde fuera que tuviera que ir?

—Usted es la dama de la que habló Laswell —Alejandro se acercó seguido del otro mexicano, quien interrumpió el silencio—. Alejandro Vargas.

—Rodolfo Parra.

Ambos estrecharon la mano con la fémina, los dos híbridos también se presentaron con sus acompañantes. Cuando terminaron las presentaciones, Gaz fue el primero en preguntar lo que rondaba por la cabeza de la 141.

—Hay algo que no entiendo... ¿Cómo se irá Sharma, si de antemano no avisó para que vinieran por él?

—Hay una manera más fácil y rápida de viajar que en helicóptero —respondió Jim. Cuando Rodolfo y Soap quisieron preguntar, una serie de relinchos los detuvo.

De entre las sombras y de una esquina, apareció una enorme niebla que avanzó hacia ellos mientras tomaba forma. La manada se puso alerta al ver tan raro suceso, y fue más impactante ver cómo la niebla tomaba la forma de un imponente caballo azabache de ojos color sangre.

—Atticus —la fémina sonrió a través de su tapabocas mientras veía al caballo galopar hacia ella.

Los cascos resonaron contra el suelo de forma rítmica cuando se acercó más. Ya no galopaba, ahora trotaba de una forma fina, elegante y precisa hasta que llegó y le hizo una reverencia.

—Presumido —Kamli rodó los ojos al ver la demostración de orgullo del gran caballo.

La fémina solo negó y acarició al animal con amor.

—Hace tiempo que no te veía, muchacho —siguió acariciando al animal antes de mirar a la manada de Price—. Este muchacho es Atticus, es un percherón fantasma.