Descargo de responsabilidad: No soy dueño de Naruto
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Capítulo 11
Naruto partió de un tren que lo llevó a Harugakure y comenzó a dirigirse al castillo de Koyuki para discutir una posible amenaza a la que se enfrentaba su tierra. Tras llegar al castillo, fue recibido por la propia princesa y conducido a su sala del trono.
"Hace años, cuando luchaste contra Dotō, ¿recuerdas cómo Harugakure le ayudaba en sus retorcidos planes?". Preguntó Koyuki.
"Sí, siempre me había preguntado por qué te traicionarían a ti y a su propia patria como lo hicieron".
"Bueno, yo también tenía mis sospechas sobre los motivos de Harugakure para trabajar con Dotō, pero nada podía prepararme para el shock de lo que encontré después de la muerte de Dotō. Resulta que poner sus manos en el tesoro de mi padre no era su único objetivo." Dijo Koyuki mientras sacaba restos de la armadura de Dotō.
"¿Esto te resulta familiar?". Preguntó.
"Sí, es la armadura que llevaba Dotō cuando luché contra él". Naruto dijo
"Por lo que hemos averiguado, resulta que solo era un prototipo, Después de que Dotō obtuviera el tesoro de mi padre y se deshiciera de mí, planeaba tomar el control de Harugakure como su nuevo líder y mecanizar sus fuerzas antes de llevarlas a una guerra con las Cinco Grandes Naciones." explicó Koyuki.
"Eso es una locura; sólo a él se le ocurriría hacer algo así". Dijo Naruto.
"Después de que mataras a Dotō y yo descubriera esto, envié a algunos de mis espías a Harugakure para infiltrarme en sus fuerzas. Esperaba que la rebelión desde dentro fuera suficiente para sofocar la Iniciativa Mecha, pero no fue así. La retorcida visión de mi tío se había hecho realidad, Haruigakure ha sido totalmente mecanizada". Dijo Koyuki y Naruto no podía creer lo que oía.
"Desde entonces, he prometido matar al resto de los seguidores de mi tío, acabar con la Iniciativa Mecha y reformar Harugakure. Naruto-kun, ¿podrías ayudarme a enterrar al último de los demonios de mi tío de una vez por todas?". Preguntó Koyuki.
"No te preocupes, Koyuki, acabaré con esto de una vez por todas". Prometió Naruto.
En otro lugar
En un área subterránea bajo el antiguo escondite de Dotō, múltiples shinobi marchaban vistiendo una armadura de chakra negra parecida a la suya con la diferencia clave de que era un traje de cuerpo completo con un casco que ocultaba la cabeza y un shinobi apareció en una plataforma alta. Los demás se inclinaron ante el shinobi, el líder Kōridoku, levantó la suya y obtuvo toda su atención mientras un silencio se apoderaba de ellos.
"Mis hermanos y hermanas, durante años hemos perfeccionado nuestras habilidades y continuado haciéndonos más fuertes después de la muerte de Dotō-sama a manos de ese mocoso de la Hoja Oculta, Naruto. Pero, ¡hoy nuestros objetivos finalmente cobrarán vida al tomar las cabezas tanto de Naruto como de esa usurpadora Koyuki y reclamar esta tierra para siempre!" Proclamó Kōridoku con sus secuaces, Hyōnoarashi y Shimokama, de pie detrás de él mientras todo el ejército Mecha se levantaba con gritos de listos para la batalla y sonreía mientras comenzaban a prepararse para la guerra.
