"El nuevo mundo"_ Apocalipsis [MYG & KTH]

Capítulo 10

El mayor no insistió más y cerró sus ojos para descansar, le abrumaba la extraña sensación que tenía en su pecho clavada y que a pesar de que intentó olvidar, no pudo. Y esa sensación se intensificó aún más cuando estuvo tan cerca del menor hace unos minutos, le molestaba pensarlo constantemente, debía concentrarse en cosas más importantes; en lo que realmente le impulsaba a seguir sobreviviendo cada día, en lugar de estar pensando tanto en aquel chico bonito... quizás solo era eso, un chico demasiado bonito que llamó su atención de alguna manera, nada más. Le restaría importancia a la situación y listo.

Así es que el de piel lechosa cayó en un profundo sueño, mientras yacía en posición fetal en aquel sofá de esa fría y oscura sala, la cual era iluminada ligeramente por la luna a través de la ventana.

Desde donde se encontraba TaeHyung, tenía un plano perfecto de la puerta principal, la cual observó asustado toda la noche, esperando que los tipos con los que tuvieron el percance la derribaran en cualquier momento. De vez en cuando miraba la silueta inmóvil en el sofá y su cabeza repasaba todo lo sucedido aquel día. ¿Qué demonios le pasaba con Min YoonGi?... ¿Realmente solo le interesaba que fuera su modelo?

-Baff, no tengo que andarme preocupando, ¿verdad?... solo estoy cuidándole porque me salvó la vida... solo es eso... además, no creo que le interese algo más que él mismo. Estoy pensando que solo ayudas a los demás para darle de comer a tu ego, Min YoonGi.

El castaño se susurró a sí mismo, solía hablarse cuando tenía que decidir algo importante o cuando algo le molestaba o le gustaba. El punto era, ¿qué le estaba pasando con YoonGi?

Estaba a punto de amanecer y en cuanto el mayor despertara le preguntaría qué deberían hacer, si permanecer más tiempo allí o moverse ya al refugio.

Justo al amanecer, YoonGi abrió sus ojos poco a poco al sentir la molesta claridad de los rayos del sol atravesando la ventana de la sala, su brazo estaba mínimamente mejor, o al menos ya no dolía como el infierno. Rápidamente buscó con la mirada a aquel chico de ojos lindos que ahora andaba con él y le vio despierto.

-Espero que hayas dormido al menos un poco, debemos regresar al refugio y necesito que estés activo si queremos llegar con vida.

Le dijo al menor en un tono serio mientras se ponía de pie y caminaba hasta su mochila para buscar algo que pudieran desayunar, tomó una bolsa con galletas dulces junto con dos cajitas de jugo que aún no estaban vencidos, pues apenas habían pasado seis meses de aquella pandemia global, también el clima fresco del país ayudaba a conservar la poca comida que aún quedaba por ahí. Se acercó al castaño con el desayuno en sus manos y se sentó junto a él, entregándole una de las cajitas de jugo, el cual era de manzana y abrió la bolsa con galletas dejándola en medio de ambos, siempre teniendo mucho cuidado de no lastimarse o de usar mucho su brazo herido. Sin decir una palabra comenzó a beber su jugo mientras comía una galleta de vez en cuando.

-Estoy bien.

Fue la única respuesta de TaeHyung hacia YoonGi. Hizo un gesto de agradecimiento cuando recibió el jugo y comenzó a tomarlo despacio, serio y con la mirada algo perdida, no había pegado ojo en toda la noche y después de pensar tanto se sentía aún más desorientado que antes.

-¿Tu brazo está mejor?, bueno... no espero milagros, pero al menos hoy debería doler menos. Descuida, yo cargaré tu mochila hoy, espero y no tengamos ningún inconveniente en el camino.

El castaño volvió a sorber de su caja de jugo poniéndose de pie.

-No debemos perder tiempo... es lo que creo.

-Tienes razón, no debemos perder tiempo.

Respondió seriamente el peliverde mientras terminaba su jugo y se ponía de pie igual.

-No te preocupes, puedo llevar mi mochila, tampoco es que haya perdido mi brazo, y si es necesario lucharé igual. Ya no duele tanto, y solo fue una pequeña herida.

Min intentó restarle importancia a ese asunto y caminó hasta su mochila nuevamente para colocársela con cuidado y luego tomar su katana. Si le dolía aún su brazo, no como el día anterior, pero igual dolía, aunque lo menos que quería era ser una carga para las personas y su orgullo a veces le vencía demasiado.

-Listo... es hora de irnos.

Le habló nuevamente a TaeHyung y se movió hasta la puerta para salir.

El menor lanzó un suspiro molesto cuando vió al mayor prepararse cargando la mochila, tan testarudo.

-No... no pienso dejarte ir con ese peso en tu espalda, tendrás dificultades para moverte y siendo sincero, tenemos más probabilidades de vencer en un enfrentamiento si utilizas tu katana, obviamente si nuestros oponentes comen cerebros.

El castaño se acercó dispuesto a quitarle la mochila.

-Aún no sé cómo escapamos de esos tipos ayer... fue todo un milagro. Así que venga, la mochila no es tu caparazón, dámela ya.

YoonGi vió al más alto acercarse con intenciones de quitarle su mochila y abrió un poco sus ojos con estupor, haciéndose a un lado y esquivándolo.

-Estoy bien, no te preocupes... ni siquiera pesa.

Habló intentando hacer entender al castaño de que podía perfectamente llevar su no pesada mochila, pero Kim seguía acercándose, puesto que estaba preocupado, en un momento Min seguía retrocediendo y tropezó con una alfombra que estaba un poco levantada, lo que le hizo caer de espaldas, pero por instinto de sujetarse a algo para no caer se agarró rápidamente de la camisa de TaeHyung haciendo que cayeran ambos al suelo. Cerró sus ojos por el impacto y sintiendo un enorme peso encima de él, abrió sus ojos lentamente intentando no pensar en el dolor de su brazo a la vez y maldiciéndose por lo torpe que había sido. Justo al abrir sus ojos se encontró demasiado cerca del perfecto rostro del menor, haciendo que el mayor se sintiera nervioso nuevamente por lo cerca que se encontraban sus rostros.

Una cadena de infortunios seguía a TaeHyung, ¿es posible que además de los zombies debiera preocuparse de sortilegios y maldiciones?. No tenía otra explicación para su torpe actuar. Justo mientras caían, Kim pensó en cómo cuidar la herida de Min, pero nada se puede hacer en contra de la gravedad y en cuestión de segundos el castaño se vio sobre aquel chico que ya no le resultaba tan extraño. Ambas respiraciones chocaban y un rubor no tan sutil había invadido el rostro del menor, sentía vergüenza y puede que algo más, algo que le hizo quedarse sobre el peliverde, mirándole sin poder decir palabra alguna, petrificado y asustado como un niño que espera un regaño. Quería hablar, quería saber si YoonGi estaba bien, pero sus labios se despegaron solo para hacerle quedar como un idiota nervioso y tartamudo.

-Yo... y-yo... YoonGi...

TaeHyung se mordió el labio inferior antes de decir una tontería y se quedó viéndole a los ojos y sintiéndose el sobreviviente más torpe del planeta.

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