Viernes

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La invitación era a las 8pm, pero el timbre sonó media hora antes...

Abrió la puerta y a vista de Kirari, era de las cosas más tiernas que había visto en su vida, como ver un gatito. Esa camiseta semi holgada le daba un encanto desigual.

A vista de Sayaka... se sintió algo extraño y... ¿reconfortable?. Ver a su presidenta con esa ropa casual y el pelo suelto causaba cierta intriga en ella, como si quiera saber algo más sobre ella, pero... ¿qué podría ser?

Kirari: Era de esperarse que llegaras un poco antes Sayaka, es tan propio de ti, menos mal comenzé a ordenar mi habitación unas horas antes, me la haces difícil restándome algo de tiempo.

Sayaka: No sabía que podía ordenar un lugar sin mí. -soltó una pequeña risa-

Kirari la miró algo sorprendida... y ahí se dió cuenta.

¡Mierda! ¡¿Por qué dije eso?! ¡¿Y ahora qué hago?!

Hasta que llegó su "salvador"

Ririka: Te dejó sin palabras ¿eh? -puso una mano en su hombro, rodeando su espalda- vaya que tienes valor Sayaka, aunque yo le digo eso con almohadazos. -le sonrió a Sayaka-

La menor de las gemelas dió una gran carcajada, similar a cuando cayó de su torre de puertas.

Kirari: Te ves muy tierna para tener el humor pesado -rió- pasa, no voy a dejarte en la puerta.

Sayaka la siguió, intentando calmar el casi infarto que tuvo hace un par de segundos. Agradecida de que Kirari le haya hecho gracia lo que dijo, aunque realmente ese "chiste" nunca quiso que saliera de su boca.

Kirari: ¿Gustas algo de tomar mientras llegan los demás?

Sayaka: No, estoy bien.

Hay que admitir que la presidenta también se ve linda con el pelo suelto, pero ahora ¿cómo sabré quién es quién? de momento es fácil saberlo, pero quién sabe después...

Sayaka mantenía las manos en sus rodillas, en una postura tímida, mirando a su alrededor con tal de ignorar la figura de Kirari que estaba sentada en el sillón del frente. De pronto anhelaba que Ririka irrumpiese nuevamente en el lugar, pero esta había subido al segundo piso a hacer quién sabe qué.

Kirari: ¿Y qué tal tu semana? ¿ser mascota ha sido muy difícil?

Sayaka: E-en realidad no... de hecho se siente más como si las personas se alejaran de mi.

Kirari: Vaya... ¿y a qué crees que se deba?

Sayaka: Supongo que el ser mascota de la presidenta del consejo estudiantil repele a cualquier clase de abusador... de hecho una vez Kiwatari intentó tomarme, pero se detuvo cuando uno de sus amigos le comentó "la gran novedad".

Kirari: -soltó una carcajada- así que de esa forma te ven... bueno, supongo que podría ser algo de esperarse, quizás que cosas piensen de nuestra relación...

La menor se sonrojó al escuchar la última palabra, sabía que se refería a una relación amo-mascota, pero considerando su historia previa se sentía confuso.

Sayaka: ¿Y su semana?

Kirari: Aburrida... lo mismo de siempre -titubeó-

Se sintió algo doloroso para Sayaka.

Entonces nunca fuí importante...

Kirari: Bueno en realidad no, el trabajo se siente el doble sin tí, ya me había acostumbrado a mis comidas programadas y a dejar todo el papeleo por ahí, quizás pronto debas volver a tu cargo. -a esto último le añadió un guiño-

Tú no la amasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora