Al salir de clases ambas chicas se habían dirigido a sus casas a arreglarse para su cena, ambas se pusieron muy hermosas querían sorprenderse la una a la otra, querían impresionarse y que no pudieran apartar sus miradas de ellas aunque sabían que igual lo harían era como si sus ojos no pudieran dejar de verse, como si esos ojos marrones estuvieran destinados a observar aquellos ojos verdes que tantos suspiros le arrancaban. Quinn se puso un bonito vestido y unos zapatos con tacón, peino su cabello aplico un poco de maquillaje y partió hacia Breadstix Rachel también se coloco un vestido pero con unas zapatillas bajas y tras acomodar su cabello y maquillarse un poco salio a Breadstix. la primera en llegar fue Quinn que entro al restaurante y se sentó en una agradable mesa para dos personas mientras esperaba a la morocha que llego minutos después pero para su sorpresa en la entrada del restaurante se encontraba un chico alto que reconocía como su novio, su desconcierto se mostró en su rostro mientras se acercaba al chico que por su parte la miraba con una tonta sonrisa y se acerco a ella besándola, Rachel se separo rápidamente de aquel beso.
R: F-Finn ¿Que haces tu aquí?
F: Sabia que vendrías hoy por lo de que ganaste y quería sorprenderte ya que no hemos pasado tiempo juntos
R: no deberías estar aquí, la cena es para Quinn y para mi nosotras fuimos quienes ganamos no tu, dios, Quinn ya debe estar aquí.
F: Ralajate Rach, no tienes por que seguir soportando a Quinn, ya acabaron lo del dueto y dudo que le moleste compartir la cena conmigo.
Finn tomo la mano de Rachel que solo se mostraba con el ceño fruncido y entro al restaurante con el donde comenzaron a buscar a Quinn. La rubia estaba con una amplia sonrisa imaginando como pasaría aquella velada junto a la morocha, seguramente entre bromas y coqueteos, aquella sonrisa y aquel pensamiento quedo disuelto cuando vio como la morocha se acercaba a ella tomada de la mano de Quinn, los celos comenzaron a aparecer en Quinn pero intento disimularlo con una muy mala sonrisa.
Q: Hola, Rachel... y Finn no te espera por aquí, que bueno verte.como no te esperaba pedí una mesa para dos pero puedes cambiarla, yo-yo iré al tocador...
R: Quinn...
F: ¿Ves? te dije que no se enojaría,
Tras Finn decir eso comenzó a besar a su novia cosa que fue suficiente para que cQuinn se levantara de su asiento y se encaminara rápidamente al baño. Por su lado Rachel se separaba de aquel beso sin haberlo correspondido siquiera
R: ¿puedes comportarte Finn? ve a pedir otra mesa, yo iré al baño.
Dicho esto se separo de su novio dejándolo con desconcierto y se dirigió al baño donde encontró a Quinn cabizbaja frente a los lavamanos.
R: ¿Quinnie, estas bien?
Q: ¿por que no habría de estarlo, Berry?
R: yo-yo no sabia que el vendría, no lo invite el solo se apareció.
Q: llegaron perfectamente juntos como la hermosa pareja que son..
R: no es como crees Quinnie..
Q: no tienes que explicarme nada, Berry. es obvio que querías compartir esa victoria con tu novio. lo entiendo, yo debo irme, estoy sobrando.
R: no estas sobrando, tu nunca sobras en mi vida
Rachel comento esto mientras se acercaba a Quinn y la tomaba con una mano de la cintura y con la otra levantaba su mentón para que la mirara y tras pasar algunos segundos así observando sus ojos mostróo una sonrisa.
R: ¿Acaso Quinn Fabray esta celosa?
Q: No, que dices, claro que no.
R: yo creo que si.
Q: no.
Rachel se divertía con aquella escena Quinn celosa, la tomo de la cintura con ambas manos comenzando a dejar suaves caricias mientras deposito un beso en la mejilla de la rubia.
R: no tienes que ponerte celosa cuando sabes que cada segundo quiero besar son tus labios.
Q: yo también quiero besarte cada segundo... pero tus labios son compartidos...
R: Quinn... quedamos en que esto solo era atracción y deseo, no puedo apartar a Finn de mi vida...
Q: no era la respuesta que buscaba...
R: no pensemos en eso ahora... solo quiero besarte. ¿puedo?
Q: ya te he dicho que para ello no necesitas mi permiso.
Rachel mostró una ligera sonrisa y junto sus labios con los de la rubia besándola al inicio con suavidad pero cada segundo el beso se torno mas pasional e intenso, las manos de Quinn se colaron bajo el vestido de Rachel apretando suavemente su trasero mientras Rachel caminaba tambaleante hasta pegar a Quinn de la pared mas cercana, dejo una mordida sobre el labio inferior de Quinn y bajo sus besos al cuello de esta dejando continuos besos en esa área.
Q: no te lo había dicho pero hoy estas hermosa.
R: tu también lo estas.
Q: vamos antes de que tu novio mande a todo un equipo de seguridad a buscarnos. Yo si me iré a casa, no quiero estar aquí y compartir con el.
La morocha bajo la mirada y asintió ligeramente a sus palabras
R: esta bien, Quinnie. pero nos veremos mañana ¿te parece?
Pregunto con una sonrisa llevando su mirada a los ojos verdes de la rubia y mostrando un brillo tan especial que Quinn no pudo negarse
Q: esta bien, nos veremos mañana.
Quinn sonrió y tomo a Rachel de la cintura mientras le proporcionaba un ultimo beso pausado disfrutando de sus labios. luego ambas chicas salieron del baño dirigiéndose donde estaba Finn, la rubia se disculpo diciendo que no se encontraba bien y debía ir a casa mientras la morocha la miraba con una amplia sonrisa y se despedía de ella. Quinn partió a su casa con una suave sonrisa en sus labios, si por un lado era mal tener que tener a Rachel solo escondida, tener que soportar que ella estuviera con Finn pero por otra parte sabia que al estar apenas un par de minutos con Rachel eso quedaba en el pasado, esa mezcla de emociones que sentía al verla, eso que ella sabia que iba mas allá del deseo, sabia que sentía algo mas pero sabia que no debía y que no pasaría nada mas. Rachel por su parte quedo en Breadstix asintiendo por inercia a las palabras de Finn sin prestarle realmente atención ya que por su mente solo pasaba Quinn, no sabia como ni cuando pero Quinn se había convertido en la dueña de sus pensamientos y eso lle agradaba a Rachel, pensar en ella le provocaba una especie de felicidad que lograba encontrar con nadie mas, ni siquiera con Finn.
Al llegar a su casa Quinn solo subió a su habitación sin siquiera cenar, se cambio de atuendo, se quito el poco maquillaje que lleva y se acostó, se coloco los audífonos y se dejo lleva por la música cerrando los ojos y pensando en lo único que había pensado durante ese tiempo en Rachel Berry. Rachel solo soporto una hora en Breadstix con Finn luego le pidió que la llevara a casa, se coloco la pijama y se acostó con una sonrisa que no fue producida por el haber cenado junto a su novio sino provocada por el simple hecho de recordar a Quinn, de recordar el sabor de sus labios, la suavidad de su piel, todo aquello que provocaba en ella aunque intentara negarlo y así se dejo llevar en los brazos de Morfeo mientras soñaba con Quinn.