DON'T BLAME ME

NO ES ASUNTO MÍO

Para mi suerte, Charles vino en el mismo coche que Pierre y yo y aparte, tocó un poco de tráfico. Después de casi 40 minutos de trayecto, llegamos y nos bajamos. Max se acercó con el cadenero y nos pasaron de inmediato al área VIP.
Lando desapareció por unos minutos y regresó con shots para todos, nos tomamos varios y la noche comenzó.

-Lamento que no pudieras continuar la carrera. -le dije a Carlos, tomando de mi bebida.

-Ya pasó, fue frustrante pero no había nada que hacer. -dijo mirando al suelo.

-¿Me permites hablar con Alba? -preguntó Charles interrumpiendo.

-Claro. -me guiñó el ojo y se alejó.

-Carlos, no...-era muy tarde, ya no podía escucharme.

-Te ves muy bien de rojo, rojo como Ferrari. -dijo poniéndose en frente de mi.

-Sabes que Ferrari no es dueño del color rojo, ¿Cierto?

-¿Qué tan serio es lo tuyo con Pierre? -preguntó, lo miré confundida. Parecía interesarle últimamente si Pierre y yo éramos novios o no.

-No es asunto tuyo.

-Es sólo una pregunta, ¿Tanto te cuesta responderme y ya?

-Sólo es sexo. -dije desinteresada.

-Ha de ser muy buen sexo para que lleven así 5 años. -dijo examinándome con la mirada. -Así que sólo es sexo, no hay sentimientos y ¿Pueden estar con otras personas?

Las reglas estuvieron claras desde el principio, no éramos exclusivos, podíamos estar con otras personas pero siempre nos avisábamos si había pasado algo con alguien más. Cuando no era sexo, sí parecíamos novios pero no lo éramos.

-Si. -rodé los ojos.

-¿Él sabe que no es nada serio?

-¿Cómo que si él lo sabe? Obviamente lo sabe, Leclerc.

-Por lo que me ha dicho, creo que tú puedes estar equivocada pero como dijiste, no es asunto mío.

-¿Qué te ha dicho? -pregunté, sentía curiosidad, ¿De qué estaba hablando Charles?
Pasó una mano alrededor de mi cintura y me acercó hacia él. Sentí mi cara caliente.

-No puedo esparcir los secretos de mi mejor amigo. -susurró en mi oído, me soltó y se fue con Carlos. Miré alrededor y mi mirada se encontró con la de Pierre, fruncía el ceño y lo miré confundida. Caminé hacia él que estaba sentado en uno de los sillones, me paré en frente de él y alzó la mirada.

-¿Qué hacías con Charles? -preguntó en tono molesto.

-Nada, estaba molestando como de costumbre. -dije con el corazón acelerado, no entendía lo que acababa de pasar, Charles nunca me había tocado en la vida y estaba nerviosa por su contacto.
Pierre subió una mano por mi pierna, se me erizó la piel. Coloqué mis manos en sus hombros y él siguió acariciando mi pierna, subiendo la mano cada vez más.

-Estamos en público. -dijo Max sentándose a un lado de Pierre. -Saca tu mano del vestido de Alba. -dijo casi indignado, a lo que reí.

-¿Qué planes hay para el summer break? -pregunté mirando a Max.

-Estaba hablando con los chicos y decidimos rentar una casa en Cerdeña.

-Sólo falta que nos digas si quieres ir con nosotros y estaremos completos. -Pierre dijo jalándome hacia él, haciendo que me sentara sobre su regazo.

-Claro que quiero ir, ¿Cuándo nos vamos?

-Probablemente la próxima semana. -dijo Max con una sonrisa y un brillo en los ojos. Max podía parecer no tener alma en las carreras pero en realidad es un ser muy lindo, que se preocupa por sus amigos y los quiere un montón.
Carlos se sentó del otro lado de Pierre y me paré para poder verlos a todos de frente, se unieron los demás poniéndose a mi lado, dejándome en medio de Lando y Charles.

-Mañana mismo hago un grupo. -Carlos mencionó. -Para que todos estemos enterados de todo, vuelos, fechas.

-Me parece excelente. -dije. -¿Quieren más shots? -pregunté a lo que todos me contestaron que sí. Me dirigí a la barra y pedí shots dobles, para doble diversión obviamente. Regresé con una charola en la mano y se los repartí al resto. Tomamos los shots y seguimos la noche. -¿Alguien quiere bailar conmigo? -hice puchero. Todos me voltearon a ver mal y rodé los ojos. Salí de la zona VIP y caminé a la pista de baile.
Ya con el alcohol encima no me daba vergüenza estar sola en la pista de baile, en realidad me la estaba pasando muy bien, moviéndome al ritmo de la música. Sentí unas manos acariciar mi cintura, al principio me espanté pero ya sabía quién era. Sonreí y me volteé.

-¿Qué haces, imbécil? -quité sus manos de mi cintura.

-Al final si me apetecía bailar. -sonrió a medias.

No lo soportaba, era tan arrogante, se creía dueño de todo y de todos y se volvió aún más insoportable cuando le empezaron a llamar "Il predestinato", de esa nube no sé quién iba a bajar a Charles. Era como el hijo consentido de Ferrari, siempre dejando a Carlos de un lado, toda la atención para él y lo peor es que lo disfrutaba, no le importaba lo que la gente decía de su propio compañero de equipo con el que de hecho, no se llevaba mal.

-Me voy. -dije intentando caminar por el mar de gente. Me jaló de la muñeca. -Leclerc, suéltame.

-Te estoy haciendo un favor para que no te pierdas com tanta gente. -se puso en frente de mí y me dio la mano. Mi estómago se retorció. Caminamos a la zona VIP, aún tomados de la mano, Pierre me miró y su mirada se desvió a nuestras manos juntas. Lo solté bruscamente y agarré mi bolso.

-Pierre, ¿Vienes?

-Vamos. -se paró, nos despedimos de todos y fuimos al hotel.
Pierre fue a su habitación y yo a la mía, dejé la puerta entre abierta para que pudiera entrar sin tener que pararme a abrirle, estaba cansada.
Entró a mi habitación y se metió a la cama junto a mi, estábamos recargados en la cabecera, en silencio hasta que decidí hablar.

-¿Qué le has dicho a Charles?

-¿A qué te refieres?

-De nosotros. -pausé. -¿Hablas con él de nosotros?

-Alba, es mi mejor amigo. -rozó mi mano.

-No me agrada que sepa mucho de mí o lo que tenemos, es un dolor de huevos de por sí.

-Confío en él, sé que siempre hace cualquier cosa para molestarte porque sabe que puede hacerlo pero es mi mejor amigo.

Quería preguntarle si sentía algo por mí, si sentía o quería algo más que lo que ya teníamos pero no era el momento, no quería arruinar nada y ya era muy tarde para hablar de eso.
Sólo podía hablar por mí, la idea de oficializar lo que teníamos siempre se cruzaba en mi mente pero no estaba segura si quería eso. Nos llevábamos bien, a veces había celos, más por su parte que por la mía pero al final no éramos novios y al formalizar la relación, se vienen más problemas que prefería evitar.
Pierre fue mi primera vez en muchas cosas y claro que le tengo mucho cariño, hemos pasado por mucho, nos apoyábamos en todo y sobre todo había mucha confianza y cariño de por medio.

No dije nada después de que él habló, la habitación estaba oscura. Le di la espalda, cerré los ojos y me dejé llevar por el sueño.

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hola a todos!! aquí el 2do capítulo, si les gusta, voten y dejen un comentario, me ayudaría muchísimo

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