Kirito El Hechicero Supremo

|-|-|-|-|-|Capitulo 40: La historia de dos hermanas|-|-|-|-|-|

|-|-|-|-|-|Capitulo 40: La historia de dos hermanas|-|-|-|-|-|

Después de aquella pelea pelea contra Suguo, los héroes se vieron obligados a huir debido a que no querían poner en riesgo la vida de las dos chicas que el rey de las hadas había secuestrado.

Pero al momento de huir, llegaron a un pasillo de aquel hospital, en el cual se escuchaban sollozos provenientes de una habitación, los héroes pensando que tal vez podría ser una trampa se pudieron en alerta mientras se acercaban aquel cuarto.

Asuna fue la persona encargada de tocar el pestillo y segundos después abrir la puerta solo, para encontrase con una cama de hospital con una persona postrada en ella y una chica sentada al lado de esa cama con la cabeza reposando en aquella cama, Asuna al ver la apariencia de aquella chica se acordó de la espadachína a la que se habían enfrentado momentos atrás.

Sinon le dio unos leves golpecitos a la hechicera, señalando que al lado de la chica que estaba sentada, se hallaba una espada. Asuna al ver eso, en silencio y con ayuda de sus poderes alejo la espada de la espadachína.

Cuando los héroes se aseguraron que, la chica estaba desarmada, Asuna se acerco levemente a ella.

Asuna: Rain.

Rápidamente la pelirroja quiso tomar su espada mientras giraba detrás suya, pero únicamente paso lo ultimo debido a que la espada ya estaba lejos de ella.

Rain: Maldición...

Dijo para después ver a todos los héroes que se encontraban en aquella sala.

Asuna: De verdad no queremos que esto escale a mas, no queremos pelear mas contigo...

Rain: ¡No lo entiendes! — Grito mientras sus ojos se llenaban mas de lagrimas.

Asuna: Ayúdame a entender...

Rain miro por unos segundos a Asuna pera después regresar a ver a los héroes que estaban detrás de ella, estos parecían no querer pelear al igual que la castaña. Después de haberles dado un vistazo miro de reojo a la persona que estaba postrada en la cama.

De repente el pensamiento y las palabras 'Héroes' resonaron mas que nunca. Los héroes estaban para salvar a quienes no podían, los héroes salvaban a personas sin esperar nada a cambio. Pero ¿Enserio podría confiar en ellos?

No le quedaba de otra, su arma estaba lejos de su alcance y no tenia alguna posibilidad de pelear con aquella persona postrada en cama.

Rain soltó un suspiro, tomando asiento en la cama juntando ambas manos encima de sus piernas para empezar a explicar.

Rain: Mi nombre real es Karatachi Nijika y ella  — Regreso a ver a la chica o mas bien niña que estaba postrada en cama, la cual era una niña peliblanca y de orejas puntiagudas — Es mi hermana Nanairo Arshavin. Ella tiene una enfermedad que deteriora su corazón progresivamente, en pocas palabras no puede hacer muchas actividades sola.

Empezó a explicar, algunos de los héroes empezaron a tomar asiento para poder escuchar la historia con mas detenimiento.

Rain: Antes mis padres nos apoyaban y financiaban todos sus tratamientos, pero de un día para otro, ambos decidieron que las dos éramos una carga y nos dejaron sola. Tuve que dejar la escuela para empezar a trabajar en un maid cafe, todo para poder intentar salvar a Nanairo. Aunque me esforzara, los tratamientos aumentaban cada vez mas y mas. Hasta que no pude financiarlo mas...

Al oír aquella explicación todos los héroes sintieron lastima por la joven la cual desde muy joven se vio obligada a trabajar para poder ayudar a su hermana y que ella viviese, el solo hecho de pensar lo que ella vivió algunos les causo demasiada tristeza.