El brillo de tus ojos

Capítulo 8

—Cala deja de ser necia y hazlo de una maldita vez por todas.
—¡Es que no sé!—le grite a Fabiola
—¡Solo mándalo por el amor de dios!
—¿Qué tal si no es mutuo?
—¡Pues averigua Cala!

Me encontraba en la casa de Fabiola me había invitado a comer, después de un rato hablé con ella con respecto a lo que sentía por Alex y ella insistía demasiado en qué le mandara un mensaje confesando todo hacia el. Los nervios me estaban carcomido me encontraba más confundida que de costumbre que tal si no era mutuo además solo teníamos dos meses de habernos conocido.

—Cala mándalo
—Fabi no creo que sea lo correcto tal vez el no sienta lo mismo.
—¿Qué te dijo Gael?
—Que dejara de ser tan miedosa y cobarde con mis sentimientos
—Ahi está, hazlo no pierdes nada.
—No lo sé Fabi, ¿que tal si el ya está con alguien?, será mejor dejarlo así no me pasará nada

¿Siempre serás así?, ¿Siempre dejaras que el miedo te gobierne?

Todos me decían que me armara de valor y que hablara con el pero yo ya había hecho eso y salió muy mal, no me sentía lista para intentarlo de nuevo terminaron con toda iniciativa que yo tuve alguna vez en buscar a alguien y querer estar con el.

—Cala hazlo
—Dejamos de hablar hace mucho
—Pero dijiste que ayer que hablaste con el sentiste algo
—Pues si pero...—tenia mi cabeza entre mis manos— tengo miedo, miedo de que pase lo mismo con Ro y que yo terminé echa un lío
—Tienes que entender que no todos son iguales
—Tu ex era "diferente" termino siendo del montón
—Pero estamos hablando de un chico que no ha tenido novia ni siquiera sabe que es poner el cuerno
—Tu ex era igual
—¡Cala!—me miró furiosa
—Ya, ya perdón—levante mis manos para pedir paz— Me refiero a que soy yo la que no está segura.
—Cala cuando me hablaste de Alex tus ojos dieron un brillo diferente, tu cara cambio por completo si sientes algo por el habla con el quizás sientan lo mismo
—Lo haré entonces...
—¡Si por fin!

Después de mandar el mensaje me fui a casa, me encontraba demasiado nerviosa quería hacerlo en persona pero no quería pasar una gran pena así que tome la decisión de que fuera por mensaje y así solo el y yo supiéramos lo que hablamos bueno y un poco Fabiola. Cuando llegue a casa no tome el celular para nada estaba que moría de los nervios y con bastante miedo así que me concentre en hacer otras cosas distraer mi mente y así no pensar tanto en lo que acababa de hacer.
Después de un rato tome el celular y me di cuenta que el aún no lo veía supuse que estaba ocupado o en el gym como era su costumbre así que me encontraba un poco más tranquila entre a Tik Tok y perdí mi tiempo ahí.

—Cala a comer
—Ya voy mamá.—le sonreí y me levanté de la cama dejando mi celular
—Bueno pues cor...

Mi tono de notificación era algo llamativo así que en el justo momento en que iba a dar un paso hacia la puerta este decidió que era buen momento para sonar lo más alto que pudo, yo me puse roja y nerviosa a la vez sabía que era mensaje de Alex algo me decía que era el, mi mamá se me quedó viendo preguntándose porque había cambiado mi comportamiento tan de repente.

—¿No vas a contestar?
—¿Qué?,—me puse más nerviosa—Eh no ma
—Segura que tal si Sandra o Fabiola necesitan ayuda
—Bueno pues que esperen yo ya tengo mucha hambre
—Nunca dejas de responder mensajes y menos cuando cenas o comes
—Si y es un mal hábito que quiero dejar mamá
—¿Qué sucede?, habla ya Cala
—Nada mamá, vamos a cenar que mi papá nos está esperando
—Eres pésima mintiendo
—Mamá ya vamos a cenar anda
—No confío en ti
—No es nada mamá, vamos a cenar ¿si?
—Bien Cala, vayamos a cenar entonces.—sabia que no podía ocultarle nada a mi mamá ella ya sabía sobre Alex pero no todo.

Bajamos a cenar y acostumbramos a cenar un poco temprano ya que mi papá podía quedarse dormido en cualquier momento y no despertar hasta la una o dos de la madrugada, platique un poco con mis padres acerca de la escuela y el curso que tomaba para la universidad eso me ayudó mucho a olvidar el tema del mensaje por un momento hasta que mamá lo saco como un tema interesante en la mesa yo solo respondí que eran mensajes del grupo de la escuela y que mi tono de notificación era algo escandaloso claro que mi mamá no quedó convencida pero por lo menos no pidió más explicaciones.
Después de cenar fui directo a mi habitación, tome mi celular agarre valor y entre a WhatsApp, abrí el chat y leí el mensaje.
No era lo que yo esperaba, en el fondo sabía que no pasaría nada aún así lo intente apenas eran dos meses de conocernos y no hablábamos seguido decir los consejos de mis amigas a veces no era la mejor opción pero como dijo Fabiola por lo menos no me quedaré con los sentimientos de nuevo.
El dejar el celular de un lado y comenzar a llorar de nuevo sin razón alguna era tan frustrante el querer olvidar todos esos momentos y emociones que tenía encima lo único que se me ocurrió fue rascarme la muñeca con desesperación hasta que sentí que algo corría por mi brazo...