Capitulo 11

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Quedarme dormida y que mis sueños me comuniquen las cosas era algo que me pasaba a menudo algunas cosas se cumplían no exactas pero en parte sí, pero ese sueño me hizo sentir rara y como si de verdad lo estuviera viviendo.

El estar en un lugar oscuro pero saber que era mi habitación con el celular en la mano y llorando pero había algo extraño que de verdad lo he pensado desde ese día estaba un primo y Roberto sentados a mi lado, Roberto me miraba furioso como si tuviera un cierto rencor hacia mí y mi primo solamente decía "¿no esperabas otra cosa o sí?", ese sueño me dio una mala espina con las decisiones que estaba tomando, nunca pensé que serian referente a...

Eran las 5:45 am cuando yo estaba arreglándome para ir a la escuela, como siempre estaba en el espejo intentando algo nuevo ya que Pinterest me hizo el gran favor de mostrarme un maquillaje que mi cabeza dijo que era lo mejor para hoy y que era súper fácil de hacer... ilusa yo la verdad porque estaba perdiendo mucho tiempo en un delineado que no me estaba saliendo y sabía que mi papa me iba a estar apresurando y al final solo me pondría rímel en las pestañas y eso sería todo. Me estaba estresando cuando mi alarma sonó ya eran las 6 am, opte por dejar a un lado el maquillaje y baje a la cocina para prepararme el desayuno y mi almuerzo para la escuela, no había notado que mi mama estaba en la sala viendo la tele pero lo que más me sorprendió fue ver que había dormido ahí

—Mamá ¿Todo está bien?

—Tienes que desayunar, se te hará tarde, dime qué no te estabas maquillando

—Bueno si, pero ya quedó tranquila, iré a desayunar y a preparar mi almuerzo

—Si está bien, te ayudaría pero apenas y pude dormir

—No te preocupes mamá yo lo hago, ¿Quieres que te haga algo de desayunar?

—No gracias, desayunaré más tarde

—Está bien má

Sabía que mis padres estaban teniendo problemas, querían ocultarlos para que no me afectara a mi pero su silencio y sus noches en los sofás parecía que se turnaran para ver quien pasaría la noche ahí. Seguí con lo mío termine de desayunar y preparar todo, escuche a mi papa entrar al baño quise darme prisa para poderme terminar de maquillarme o pasaría la peor vergüenza de mi vida, tome la decisión de borrarme las líneas que había marcado y volver a hacerlas para esta vez me saliera bien, afortunadamente paso me salió demasiado bien de un lado rezaba porque me saliera del otro, cuando estaba terminando escuche a mi papa salir del baño, escuchar cómo me decía que tenía diez minutos para salir de mi cuarto si no me dejaría.

Antes de las 6:30 am yo ya estaba lista y con la mochila puesta esperando a mi papa que estaba encerrado en el cuarto mi mama seguía en la sala, se que eran adultos y que sus problemas debían quedarse entre ellos pero se me hacia egoísta que ninguno me digiera lo que ralamente pasaba

— ¿Llevas todo Cala?

—Así es mamá, por cierto llegaré un poco tarde tengo que acompañar a Jacdi a su casa

—Si está bien corazón

—Vale mamá, entonces. —me acerque a ella y le di un beso— te veo más tarde

— ¿Ya le dijiste?—a veces la voz de mi papá me sacaba un susto de repente

—Tu abuelo quiere que lo pases a ver...

—Bueno pasó a verlo ya que la casa de Jacdi queda cerca

— ¿Estás segura?

—Si mamá, te marco cuando esté ahí vale

—Vámonos Cala que se nos hace tarde

—Si claro— le di otro beso a mamá y salí de la casa

Al llegar a la escuela pude ver a Fabiola y Alex platicaban no sé porque sentí cierto temor a acercarme así que primero pase al baño para dejarme de miedos, respire hondo varias para calmar los nervios me vi en el espejo asegurándome que todo iba a estar bien, me lo repetía una y otra vez aun así sentía como mis manos sudaban y como mi respiración se ponía rara

El brillo de tus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora