• 𝙏𝙀𝙉𝙏𝘼𝘾𝙄𝙊𝙉 • | Enzo Vogrincic

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Enzo Vogrincic

Ya me veía venir esto de parte de la prensa, lo que va hacer tremendo es cuando Sofía se entere de esto, aunque sean rumores falsos, pero ella cualquier cosa lo malinterpreta y más si le mentí. Y la paz se terminó cuando ella entro a mi camerino a los gritos y sin golpear la puerta.

— ¡Enzo, explícame ya que es esto! — me mostró su celular, una foto mía con Julia en la cafetería, bastante cerca estábamos.

— ¿De que sirve que te explique,Sofia? Si total lo que te diga me vas a salir con que te estoy mintiendo. — no le tome tanta importancia y me recosté en el sillón, apoyándome en mi brazo.

— Salís con ella,no? Claro, por eso no te tomas ni el tiempo de explicarte. — empezó a sacar sus propias conclusiones.

— ¿Ves lo que te digo? Ya estás diciendo pavadas, amor. — me levanté y la abrace mientras ella tenía lágrimas en los ojos. — No te dejaría nunca, y menos por mi asistente. — Me sentí extraño cuando le dije eso. Cómo si no estuviera seguro de mis palabras, como si eso que dijera no lo siento en realidad así. — Te amo, loca. — la tome por los cachetes con ambas manos, y me acerque para dejar un corto beso en sus labios.

Limpie sus lágrimas con la yema de mis dedos y pronto una sonrisa apareció en su cara.

— Bueno, te voy dejando. Tengo que ir a que me maquillen, si? Y vos tendrías que irte, porque en la que te ven acá te sacan.

— Está bien, te amo. — me dió un pico esperando mi respuesta pero lo único que hice fue irme de ahí.

M

e encamine al camerino de Julia, hasta que frene en el pasillo al ver cómo Pardella salía muy sonriente de ahí, ¿Que tanto? ¿Le contó algo o gracioso o porque se ríe con ella?
Quería escuchar de lo que hablaban, imposible al momento que quise pasar desapercibido me choque con un tacho de basura que estaba en un esquina, la puta madre, obviamente el sonido llamo la atención de ambos.

—¡Enzo! Dale, boludo. Anda a qué te maquillen— me grito Agustín. — Gracias,Ju. Nos vemos más tarde.— se giró a ella con una sonrisa y se fue, al pasar a mi lado golpeó mi hombro en forma de saludo.

Me acerque a ella para poder saludarla y tratar de olvidar aquella anterior situación.

—Ay, que cara la tuya eh. — hablo apenas me vío, Juli.

—¿Que tiene? — pregunté “confundido” claramente sabía porque estaba así, no me gustaba que la llamará Ju y que estuvieran a las sonrisas mutuas. Pero quién soy yo para meterme en eso.

— Dale vogrinch, si te re cambio la cara cuando paso Agus al lado tuyo. — palmeo mi rostro despacio, en forma de chiste.

— Nada que ver, ¿Que decís nena? — mentí. — además es Vogrincic mi apellido, no vo- esa cosa que dijiste vos. — pase al camerino sin que ella me diga y me senté frente al espejo, como todas las mañanas. — ¿Desde cuándo vos y Agustín son tan cercanos? — murmuré, mi mandíbula estaba tensa. Trataba de no decir las cosas que pensaba.

— Ah, eso es normal. Tenemos buena relación. — respondió. Saco un peine del cajón y empezó a peinarme.

— ¿Buena relación? Mira vos. — fruncí el entrecejo. — Por eso te dice Ju,no? — junte mis manos y la mire por el espejo su expresión cambio, se rió de lo que habia dicho. — ¿Que te causa nena? — la mire indignado.

Siguio con su risa.

— ¿Enzo estás celoso de Agustín? — preguntó entre risas.

No manzana, para nada estoy celoso.

— ¿Celoso de Agustín? Nada que ver, nomás te pregunto. Porque de la nada que estén a las sonrisitas es raro. — desvíe mi mirada de ella.

— Es normal, nene. ¿Que ahora no puedo? — ya saca todo de contexto, que piba diosss.

— Al contrario, si que podés yo no tengo porque prohibirte nada, pero es por curiosidad nomás.

Tenía razón en lo que dije, pero igual me comían los celos o que sé yo que pasaba dentro mío.

— Bueno, si vos decís.. — solto y siguió con la misma rutina de todas las mañanas.

...

— ¿La vieron a Ju? — pregunto Agustín al resto del cast, involucrandome. Estábamos en el momento del break.

— Julia, se llama Julia. — le recalque — Y no, no la vimos. — agarre una uva que había en un platito posado sobre la mesa.

Pareció ignorar mis palabras, y fue directo a Matías.

— Mati, ¿La viste a tu hermana? — Matías asintió, y le dijo dónde ella se encontraba.

— En su camerino, como siempre. — contesto, y no pude evitar verlo con el ceño fruncido.

Matias me miro como una cara de ‘que’ y yo solo negué.

Me acerque a la mesa, dónde estaba Blas.

— ¿Sabes que es menor no? Además es la hermana de Matías, dónde los pesqué él, uhh mamita. El bardo que se les arma. — jodió.

— ¿De que hablas? — me hice el desentendido.

— Daale, ¿Que te haces? Sabes muy bien de lo que te hablo. — chisto la lengua. — Se re nota que te salta la térmica cuando Agustín está con ella.

— Tiene derecho a hablar con quién quiera, además yo no tengo ni que interferir ahí. — solo eran palabras lo que decía, porque al verla acá adentro y charlando con Agustín lo primero que quería hacer era ir y sacarla de ahí.

Tal vez Blas tenga razón, o no sé. Porque ni siquiera sé porque me extraña tanto que ella hable con él o me moleste y no quería demostrarlo, porque yo no tengo ni que hacer nada ahí en medio. Yo estoy con Sofi..

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Mil disculpas por actualizar un toque tarde pero acá les dejo un nuevo capítulo

No se olviden de votar y comentar que me cago de risa con sus comentarios😂💕

Las tqm✨