Capítulo 1

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Narrador omnisciente

A veces, las mejores historias de amor no empiezan de la mejor manera. Si alguien te dice que el amor no duele ni lastima, probablemente está míntiendo..

El bonito Omega Kim Taehyung se encontraba en su cuarto. Estaba sentado en su cama y frente suyo tenía un atril, pues uno de sus pasatiempos favoritos era pintar.
Pintaba, con sus propios dedos, un bello paisaje que sólo podía  existir en su imaginación.

Tenía en cuenta que lo más seguro sea que el cuadro no quedara como él quisiera, pero al menos se sentía feliz cuando lo hacía. No portaba el don de la vista pero eso no sería un impedimento para él.

Minutos después fue interrumpido.

-¿Para qué te compré cientos de pinceles si al final usas tus dedos?-preguntó el Alfa acercándose a él y luego tomando asiento s su lado. TaeHyung no pudo evitar sonreír, conocía esa masculina voz.

Su padre, Kim NamJoon, siempre le llamaba la atención por lo mismo.

-Mmm bueno. En mí defensa diré que es más cómodo para mí, papi- respondió llevando su mano a su mejilla para correr su propio mechón de pelo, pero sin querer manchando todo a su paso  con pintura color negro.

El Alfa emitió una suave sonrisa al verlo tan tierno, pero luego su sonrisa se borró al recordar la razón por la que  fue al cuarto de su hijo menor.

-Debo decirte algo, Tae- habló y tragó grueso. Sabía que debía haberlo informado hace días, pero lo dejó para último momento sintiendo que él mismo no estaba listo.

TaeHyung frunció el ceño, pudo notar el cambio de ánimo del contrario- ¿Qué pasa, papi?-preguntó intentando tocar su hombro pero fallando, su padre tomó su mano y la besó con cariño.

-No te preocupes, no es nada malo sólo que ya tenemos Alfa para tí- murmuró aguantando las lágrimas. Kim Namjoon podría ser un fuerte Alfa y líder nato, pero era muy sentimental respecto a su hijo menor Omega.

Era su debilidad.

La sonrisa de TaeHyung iluminó todo el lugar y tranquilizó, al menos un poco, a Nam.

Se levantó rápido casi tirando el atril de pintura -¡Eso es muy bueno padre!-exclamó dando unos pequeños saltos en el lugar.

El sueño del Omega siempre fue formar una familia. Tener un Alfa que lo ame y lo proteja y a quién devolverle todo el cariño. Unos cachorros a quien cuidar y amar.

Él realmente amaba a los niños y deseaba al menos tener tres o cuatro. Otra vez su ceguera no sería impedimento, su instinto maternal Omega y su lobo podían con eso.

-Deberás viajar está misma noche -Informó Nam tratando de sonreír, sentía un nudo en la garganta que dolía - Ya está todo listo-

-Pero..¿Viajaré sólo?- preguntó el menor.

-¿No quieres saber primero quién será tu Alfa?- Cuestionó Nam curzando los brazos en su fornido pecho.

Tae cayó en la cuenta que no había preguntado eso, pues confiaba que su padre le encontraría el mejor Alfa. Uno amable, cariñoso y fiel. Además pronto lo conocerá, pero bueno no estaba de más preguntar.

Tal vez mientras más sepa con anterioridad, mejor sea para la primera impresión de ambos.

-¿Quién será mi Alfa?- ahora le mataba la duda.

El mayor dió un largo suspiro y luego rascó su nuca -Se llama Jeon JungKook, es el hijo mayor del clan Jeon -

Jeon Jungkook, no le daba para nada buena espina. Pero el arreglo de matrimonio entre clanes estaba pactado y este justamente era necesario. NamJoon sabía que como líder de una manada debía sacrificar algunas cosas, pero nunca se imaginó que sería algo tan preciado.

ÁMAME CON LOS OJOS CERRADOS [KOOKV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora