Anhelos De Un Corazón Roto

Roto.

Roto.

Así me siento por dentro.

Así siento que está mi alma, mi corazón y mi vida.

Sufro en silencio, acalló todo ese dolor, todo ese sentimiento porque a nadie le gusta escuchar los pesares de otros.

Roto.

Así me siento, porque deambulo en una oscuridad desde que tengo entendimiento.

Pocas veces logro ver destellos de luz que iluminan todo, pero aquella luz es como una luciérnaga.  Frágil, pequeña y con una vida muy corta.

Cada vez que logró alcanzar un poco de esa luz se extingue entre mis manos. Es como si la oscuridad  que llevo conmigo lo superará todo.

Incluso hasta mi.

Me nubla el juicio y mientras miro a la nada me vislumbró en escenas donde a pesar de que son todo lo malo veo algo de tranquilidad, deja de doler por unos instantes. Pero el simple hecho de volverlas realidad duele.

Sigo caminando en medio de la oscuridad mientras bajo mis pies siento como el camino se rompe, se agrieta, se quiebra y va desapareciendo tras de mí.

¿Por que sigo caminando?

¿Por que  simplemente no me lanzo al vacío que me rodea?

No lo se.

O tal vez si, solo que no soy lo suficientemente valiente como para aceptarlo, no tengo el coraje para afrontarlo.

Se me es más fácil seguir caminando a pesar de que duela cada paso.

Seguiré caminando hasta que haye mi coraje, mi valentia y la voluntad que me han robado para seguir mi propio camino.

Seguiré caminando...  No veo nada, pero... Seguiré el camino roto.