Mirandy One Shot - Segunda Edición

Día ordinario (+18)

Todo comenzó con un beso una noche en la parte trasera del Mercedes, Andrea le confesó a Miranda que la deseaba. Estaba dispuesta a aceptar que la despidieran pero ya no podía guardar este secreto, Andy necesitaba sacárselo del pecho.

Dos semanas después, estaban en el piso del departamento de Andy medio vestidas, las piernas de Miranda abiertas y Andrea enterrada entre ellas comiéndose a la reina de la moda como si fuera la última comida de su vida.

Un mes y medio después de follar casi todas las noches después de que Andy entregara el libro y la tintorería, algo en Miranda se rompió. Nunca se había sentido tan viva, tan realizada, tan adicta a la adrenalina y tan aventurera como se siente con Andrea. Todo era tan diferente con ella y esto la emocionaba muchísimo.

Una mañana, la editora llamó a Andy a su oficina: "Prepárate para salir en media hora, vamos a la sesión de fotos al aire libre para el diseño brasileño". La morena asintió y garabateó en su cuaderno, giró sobre sus talones y se fue. Minutos después Miranda salió de su oficina lista para irse con Andrea "Abrigo, bolso" demandó su voz aterciopelada, Emily rápidamente se levantó y trajo sus pertenencias.

En el ascensor ambas mujeres entraron a la caja metálica, Andrea tenía ese privilegio. La puerta se cerró y Miranda dijo "Juguemos ese juego hoy". 

La sonrisa de la morena se amplió, la noche anterior se estaban enviando mensajes de texto y Andy dijo que se preguntaba (o sugirió) cuántas veces podían obligarse a correrse mutuamente durante un día de trabajo.

Era arriesgado por decir lo menos pero a Miranda no le importaba nada, había decidido disfrutar de su sexualidad con Andrea, después de todo nunca nadie la había hecho sentir como Andy y por una vez en su vida no iba a desperdiciarlo.

¡Juego comenzado!

Subieron al auto y se fueron. Roy las dejó en el lugar donde se realizó la sesión de fotos. Las modelos y fotógrafos estaban siguiendo las instrucciones del director de arte para comenzar con la sesión de fotos al aire libre. Normalmente Nigel es quien dirige estas tomas, pero hoy Miranda quería estar presente para comprobar cada detalle, todos estaban acostumbrados a cambios de último momento, incluida la editora que aparecía de la nada.

El rodaje iba bien, sorprendentemente Miranda no estaba tan decepcionada, el nivel de incompetencia se mantuvo al mínimo.

A mitad de la sesión, Miranda decidió atacar primero. Andrea se encontraba en una de las carpas donde las modelos se cambian, peinan y maquillan, Miranda la envió allí para revisar las etiquetas de los vestidos y tomar nota de qué diseñadores habían sido seleccionados para esta sesión.

La carpa estaba casi vacía solo había dos maquilladores allí, pero en cuanto Miranda entró evacuaron de inmediato, la dama dragón tuvo ese efecto.

Andy estaba concentrada revisando los estantes de ropa, revisando cada artículo meticulosamente y tomando notas en su libreta asegurándose de no perder ningún detalle. De repente sintió la presencia de Miranda, su perfume era un claro indicio, la mujer mayor rodeó la cintura de la morena con sus brazos, su cálido cuerpo presionado contra Andrea.

"¿Deberíamos empezar?" Dijo la reina de la moda lanzando su lengua húmeda al oído de Andy. La joven había descubierto no hacía mucho que la lengua de Miranda no sólo servía para ser despiadada y hacer comentarios recalcitrantes.