Aquella noche Jimin se quedó en la habitación que solía ser la mía en mis años de adolescencia. Luego de la invitación de mis padres, el Omega rubio había llamado al hombre extraño que le acompañaba.
Había salido de la casa y escuchaba los susurros y un nombre llamativo.
Jimin le llamaba Seokjin y por el tono de voz cariñoso, supuse, era el hombre que Jihyun y yo conocimos.
Al inicio de todo, Seokjin no había sido un hombre agradable para socializar, pero la preocupación y cuidado que tenía por Jimin era digna de admirar. El omega fue fue todo para él. Al igual que lo es todo para mí.
Supongo que de alguna manera, Jimin también piensa así sobre el alfa. Sé que lo amó y no es algo que juzgo en realidad; Seokjin siempre fue un apoyo para Jimin, pero sinceramente, en aquel momento quise darle un golpe en el rostro porque no tenía ninguna información para comprobar lo que pasaba. Nunca fui un hombre de mucha violencia, pero si en aquel momento lo hubiera tenido frente a frente, probablemente le golpearía lo más fuerte que pudiera.
En mi cabeza, lo único en lo que podía pensar, era en Seokjin siendo la pareja de Jimin y un hombre violento con él, era probable que no sean destinados y por ello había abortado y el alfa no era capaz de poner la cara y cuidar de el rubio lo suficiente.
Era joven y después de todo lo que había pasado mi padre omega, me alteraba aún más. Mi padre, el Omega más fuerte que había conocido en mi vida, había pasado por lo mismo que Jimin, bien, no exactamente todo, pero estoy seguro de haberme entendido.
Temía por el bienestar de Jimin y aunque no fuera más que el novio de su hermano, podría protegerlo del hombre con el que estaba saliendo.
Por el momento, debía permanecer callado, porque aunque tuviera preocupación, quizás lo que sospechaba no era acertado y podría esperar a tener más confianza con él y me lo confesara.
No tenía moretones en el cuerpo y cuando le conocí tampoco los tenía. Tampoco podía dejar que la cólera y mi imaginación se apoderaran de mí.
Después de haber hablado con Seokjin, Jimin entró a casa y me dio una corta sonrisa, antes de preguntar. "¿La invitación aún está en pie?" Estoy seguro que había sido un inicio de conversación cortés y desinteresado, pero mis mejillas se habían sonrojado.
Atribuí la reacción a un dolor de cabeza, que yo sabía, era inexistente. Devolví la sonrisa y cruzamos miradas, sus ojos azules me analizaron por unos segundos y yo, como el hombre torpe que era (y sigo siendo), esperé a que terminara. Porque Jimin siempre había logrado ese efecto en mí.
Aquella noche se quedó en el cuarto que solía usar en mi adolescencia y yo me quedé una habitación para invitados.
No dormí en absoluto, pensando en tres cosas.
La primera, era que Jimin tendría el apoyo necesario, o al menos de parte mía y mi familia.
La segunda es que no había hablado con Jihyun.
Y la tercera, que Park Jimin, el hermano de mi pareja y probablemente un omega emparejado, estaba usando mi pijama mucho más grande que su cuerpo.
Bueno.
Pensándolo bien, la segunda fue un simple destello de luz que apareció en mi cabeza.
A partir de ese día y hasta el día de hoy, Jimin permaneció en mis pensamientos sin pagar renta.
ESTÁS LEYENDO
EXILE. ⸺ kookmin minific omegaverse
Romance¿Quién no iba a enamorarse de Park Jimin?, con sus labios que dictaban la perdición, sus ojos que te miran con adoración. Por supuesto que Jungkook caería, siempre lo haría. Lástima que no era suficiente. (O nunca lo había sido). Porque Jungkook sal...