Capítulo 2: Charlotte Bersh

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10 Años Después.

Charlotte Bersh. (Charlie) :

—Charlotte levántate vas a llegar tarde a tu competencia.

—Ya voy tía. Déjame dormir otro rato.

—Apresúrate jovencita si no quieres que te vaya a levantar por las malas —dice mi tía Mimí.

—Ya me levanté.

—Buenos días, Yeyé  —digo agarrando la fotografía de mi hermano mellizo, buenos días, Hermanas, buenos días, padres —digo y me levanto.

Me doy un baño me pongo ropa cómoda y bajo a desayunar llego a la cocina me siento en el Mesón del desayunador.

Mi tía Mimí me sirve la comida y me la pone en el mesón del desayunador.

—Gracias tía Mimí —le digo en tono infantil.

—Ten no comas mucho, cómo vas a hacer para estar en dos competencias en un mismo día —me pregunta mi tía Mimí.

—Ya verás tía, hoy tengo la final del Campeonato de boxeo. Pero es en la noche y en el día tengo la final del partido de básquetbol y me comprometí con el entrenador y le dije que iba a estar ahí, ya verás no te preocupes —le digo guiñando le un ojo.

—Hay Charlotte tú tienes que tener un respiro —dice mi tía Mimí.

—Tía tengo que aprovechar mis habilidades especiales —le digo metiéndome un bocado a la boca.

—Tú por ser hombre lobo y Bruja no quiere decir que tienes que aprovecharte de tus poderes y habilidades —me regaña mi tía Mimí.

—Un hombre lobo incompleto que no ha podido transformarse en su forma lobo y una bruja que no ha despertado sus poderes —digo con la cabeza cabizbaja.

—No digas eso hija ya verás que un día de la nada te transformarás y tus poderes de brujas se despertarán —dice mi tía tratando de animarme.

—Bueno el uniforme te lo dejo en tu maletín con todo listo para que te vayas a las competencias y Recuerda que tienes que moderar tu fuerza recuerda llevar tu amuleto Y no se te olvide ponerte los lentes de contacto, parece que hay que volver a pintar tu cabello el color se está desvaneciendo —me dice mi tía Mimí.

—Me podrías ayudar a volverlo a pintar el cabello con tu magia —le pregunto a mi tía Mimí.

—Sí no hay problema yo lo hago –mi tía susurra unas palabras —ya esta —dice.

—Si gracias tía Mimí —le digo.

—Bueno yo voy a ir a hacer unos mandados, voy a llegar a tu competencia del básquetbol. No comas mucha hija —dice tía.

—Me puedes hacer unas tranzas en el cabello también —le digo.

—Sí cuántas quieres. —hazme dos trenzas.

—Qué largo tienes el cabello hija, bueno ya están me voy vete en tu automóvil no te vayas a ir en tu motocicleta.

—Sí tía Mimí Gracias.

—Adiós hija buena suerte —dice ella despidiéndose.

—¡Ay! Dios que hambre tengo.

—Tenemos cariño —dice mi loba Nina quien es mi alma de lobo quien vive dentro de mí.

—De nuevo diciéndole mentiras a la tía Mimí —dice Nina.

—No sé de qué hablas, Cállate.

—Sabes que nadie puede enterar sé dé qué ya puedo transformarme.

La Mestiza  y el Rey Alfa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora