"Sola" (CAP 79- TEMP2)

24 5 0
                                    

-¿Mi-shelle?- pregunté de manera casi imperceptible, apenas estaba despertando.

-sí, hermana- dejó de hablar con el médico al instante. Este último se retiró sin más de la habitación.

-Mishelle, regresaste- intenté apoyar mi espalda en la almohada para abrazarla, pero me detuvo.

-no hagas esfuerzo, yo... solo necesitaba saber si te encontrabas con buena salud- habló seria

-yo... bueno, tuve un accidente en el lugar que trabajo, pero ¿todo está bien no?- apenas fui consciente del accidente, ver a mi hermana solo me hizo pensar en que ya no estaría sola nunca más. Intenté abrazarla, pero no me correspondió el abrazo, parecía molesta.

-los bebés y tú están en buenas condiciones- se sentó a mi lado en la camilla- hay muchas cosas que no me has dicho, ¿por qué Joel no está aqui?¿por qué estás trabajando?¿te falta dinero?¿por qué no me contaste que eran dos bebés?¿por qué me ocultas tantas cosas?

Sentía su mirada tan dura sobre mí, tal vez la Mishelle de antes me hubiese abrazado después de no vernos por casi 5 meses, pero no, la tenía haciéndome muchas preguntas, a penas había despertado y tenía muchas nauseas. Sentía mi mundo abajo, y cada vez que mencionaba una pregunta mi corazón dolía, solo quería un abrazo.
Hace apenas 1 mes había ido al ginecólogo debido a molestias que tenía en el vientre. Ahí fue cuando descubrí que tenía un embarazo doble, quien me mostraba el monitor había dicho que en mi vientre se encontraban dos bebés, ambas niñas, luego de eso no escuché nada más.
Salí del consultorio y allí no había nadie esperándome, lloré todo el camino de regreso a casa. Era demasiado para mí. Incluso JuanPa sabía que algo andaba mal conmigo, cada que iba a buscar a Lucía para que vayan a cenar, se quedaba haciéndome preguntas sobre el bebé, si todo marchaba bien. Al parecer Lucía creía que el bebé estaba mal, pero no tenía el valor de preguntarme, así que le pedía de favor a JuanPa para que me preguntase sobre el estado de mi bebé o sobre mi salud. Yo solo mentía- son las hormonas-repetía sin mayor emoción.

-Busqué un trabajo porque me sentía sola en casa- ni siquiera podía mirarla a los ojos, me rompería en llanto.

-¿por eso pones en riesgo tu embarazo?- hizo que levantara mi mirada tomándome de la mandíbula

-dejé de estar en riesgo de embarazo cuando pasé los cuatro primeros meses, yo creí que...-

-siempre me causas dolores de cabeza-me interrumpió-¿y qué hay de Joel?- al ver que no respondía prosiguió- me encontré con Patricia, ella sigue afuera.

-¿ella sigue aquí?-pensé con una calidés en mi pecho

-no hablé con ella, pero creo que es necesario que lo haga ahora-

-no-dije de manera tajante-no lo hagas... Joel... él...

-maldición ______, cuando dejarás de titubear, no quiero que me mientas-se puso de pie molesta

-no me hagas hablar por favor, él no tiene la culpa de que no esté aquí-

-_______, no tengo mucho tiempo para escucharte. Me preocupas mucho, pero al menos sé que tú y los bebés están bien-

Pov Mishelle

-¿me dejarás tan pronto?- supe por su tono de voz que empezó a desesperarse.

-_______, lo sé todo. Sé sobre Christopher, Camila, Gabriel, Joel, tú y los bebés. Por eso viajé aquí- solté y ella simplemente se quedó quieta mirándome con los ojos lloros- ayer Zabdiel me lo contó. Después de 4 meses que me lo ocultara-mencioné frustrada.

Esta semana, el lugar del concierto del grupo coincidía en el país en donde yo me encontraba, y pude reunirme con Zab, luego de 4 meses sin vernos. Y me contó absolutamente todo, peleé con él por no habérmelo dicho antes-le hice una promesa a ambos, no podía, pero... la consciencia me estaba matando-mencionó. Lloré, y lloré mucho.
No estaba lista para haber recibido toda esa información, el plan definitivamente había tardado demasiado, los enemigos ya habían puesto sus ojos en ella y la estaban destruyendo por completo. ¿Lo peor de todo? Todo había pasado frente a mis ojos.
Me dolía tener que pensar en cómo era su vida ahora, cuando en realidad soy yo quien debería estar en su lugar, a quienes buscaban era a mí, pero ella recibía todo. Era hora de empezar a protegerla por sobre mí y arriesgarme a perder todo, pero para eso tenía que mentirle una vez más, ser fuerte ante ella y alejarme nuevamente para ejecutar el plan.

EN ÉSTA NO ||SEGUNDA TEMPORADA|| © | ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora