Matías Recalt no era un alfa típico.
Lo sabía desde que se presentó como uno. Todo el mundo, todo su círculo había supuesto que sería un omega debido a su aroma levemente afrutado, sus rasgos faciales redondeados y su constitución menuda.
No es como si a Matías le hubieran importado alguna vez los estúpidos roles de género impuestos socialmente.
El libreto en sus manos demostraba que no podía ser el único en pensar igual, a juzgar por el importante papel que tenía delante. El día siguiente era la audición decisiva, en la que habían convocado a todos los actores finalistas en presencia física del director Bayona.
Los nervios lo recorrieron ante la presión, pero rápidamente se calmó.
Ese papel iba a ser suyo.
(Y quizá algo más también).
***
Enzo Vogrincic tampoco era un omega típico. Su estatura, su complexión física y sus rasgos varoniles gritaban alfa a todas luces, pero cuando se presentó como omega con 15 años fue el único en no estar sorprendido. Siempre había sentido dentro suyo que no encajaba en las características emocionales típicamente asociadas a los alfas, no había un ápice de agresividad, competencia o ganas de batirse con otros tipos dentro de él.
Él siempre había sentido que había una sensibilidad especial en su interior, un anhelo de ternura, algo que le gritaba omega. Su familia no se lo tomó tan bien, pero bueno, como fuera.
Si el libreto en sus manos de un papel protagonista en una producción de renombre significaba algo, era precisamente que no necesitaba la aprobación de nadie para llegar lejos en la vida.
Se acabó de arreglar el cabello y decidido salió camino a su audición.
***
Matías casi saltó cuando le anunciaron que lo había logrado.
–¡Necesito hacer a Roberto Canessa! –exclamó– ¡Lo quiero!
Decidió quedarse un rato más para ver si podía conocer al futuro cast. Algunos actores salían cabizbajos por no haber sido elegidos, otros salían dando botes de alegría.
De repente le llamó la atención un aroma suave, giró la cabeza y ahí estaba él. Un hombre alto, hermoso, con un porte impresionante. Un omega que olía levemente -el uso de supresores siempre hacía que oliesen más suave- a alegría, emoción y anhelo.
Un omega que lloraba de alegría.
Matías se adelantó hacia él de forma inconsciente, completamente embobado con su belleza. Nunca había visto un omega igual, aunque después de todo tampoco es que hubieran muchos alfas con su complexión tampoco.
–Me llamo Matías –dijo cuando llegó hasta él. El omega se secó las lágrimas que aún quedaban en su rostro y le dirigió una tímida sonrisa– Voy a interpretar a Roberto Canessa. ¿Cómo te llamas?
–Soy Enzo Vogrincic –El omega olía tan feliz y emocionado– Voy a interpretar a Numa Turcatti.
Enzo Vogrincic. Matías se aseguró de grabar a fuego en su mente ese nombre y silenciosamente empezó a contar los días que quedaban para que quedaban para comenzar el rodaje.
Los días que faltaban para volver a ver al que un día sería su omega.
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Primera toma de contacto. Esta mañana me levanté, leí los comentarios en The scent pidiendo más omega Enzo y la trama de este fic se perfiló tan claramente en mi cabeza que tuve que escribirlo.
Estoy planeando que tenga 5 capítulos, pero podrían ser más.
Nos leemos :)
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Atípico [Matienzo]
RomanceEn la que el atípico alfa Matías conoce a un también atípico omega durante el casting de una prestigiosa producción y se enamora perdidamente de él. MATIENZO Alfa Matías Recalt x Omega Enzo Vogrincic