Capítulo 5: Problemas de comunicación

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Descargo de responsabilidad: Esta es una obra de fanfiction basada en múltiples series de anime/manga existentes. Los personajes y escenarios utilizados en esta historia pertenecen a sus respectivos dueños y creadores, y no se pretende infringir los derechos de autor. Esta historia tiene fines puramente de entretenimiento y no pretende infringir ninguna propiedad intelectual existente. No soy propietario de ninguna de las obras originales que inspiraron este fanfiction y apoyo plenamente a los creadores originales y sus obras.

-Inicio de la historia- 

-POV en tercera persona-

Un cuarteto de individuos, sentados alrededor de un fuego en el Bosque Congelado.

Los cuatro individuos disfrutan de sus brochetas de conejo recién cocidas, a pesar de estar quemados.

Actualmente, la pelirroja del grupo está mirando al recién llegado copo de nieve semidesnudo que actualmente se está poniendo cómodo dentro del grupo, incluso tomando una brocheta para él mismo. 

Sin pedir permiso.

Justo cuando estaba a punto de intentar derribar al hombre al suelo, el rubio del grupo una vez más suplicó misericordia en nombre del copo de nieve aislado debido a la comunicación.

"Eris... ¡Por favor, podemos darle más comida y él podría saber dónde está el Dragón de Nieve! Tal vez sea un nativo del bosque, aislado aquí toda su vida", suplicó Alistair, tratando de encontrar puntos en común en la barrera del idioma de Gojo.

Eris desvió su atención del intruso a Alistair, su mirada envió ondas de calor figurativas en su dirección.

Alistair sintió un escalofrío nervioso, y no era sólo por el frío.

Mientras tanto, Satoru saboreaba su brocheta ligeramente quemada, despreocupado y ajeno a la tensión que se estaba gestando. 

A pesar de la barrera del idioma, Satoru no pudo evitar comentar: "Oye, esta brocheta está quemada", dirigiéndose inexpresivamente a Relna, quien también estaba disfrutando de su brocheta, mientras Eris y Alistair parecían enzarzados en una discusión. 

Su expresión dejó en claro que tenia quejas sobre la brocheta, y Relna respondió encogiéndose de hombros y señalándolo con el dedo, echándole la culpa de que las brochetas salieran quemadas. 

"¿Qué? ¿Yo?" Satoru se señaló a sí mismo con exagerada sorpresa. 

Relna asintió en confirmación y él reaccionó como si le hubieran dado un puñetazo en el estómago. 

"¡Mira, Eris! ¿No te compadeces de él? ¡Escucha ese lenguaje bárbaro! ¡Debe haber tenido hambre!" Alistair le suplicó a la irritada pelirroja. 

Eris vaciló por un momento, un leve rastro de lástima cruzó su rostro. Ella suspiró, cediendo,    "... Bien, pregúntale si sabe algo. No seré yo quien se comunique con..." Lanzó otra mirada exasperada a Satoru. 

Satoru, que ya había terminado con su brocheta, se giró para mirar a Eris al sentir su mirada. Una vez más, él malinterpretó su intención y, bajando sus gafas le dio un giño pícaro antes de volver a colocarlas rápidamente.

"Esa cosa... si me guiña un ojo una vez más, lo estoy castrando." Completó su frase anterior con disgusto y con un tono amenazador. 

Alistair tragó saliva, sabiendo que cuando se trataba de Eris, sus amenazas no debían tomarse a la ligera.

Definitivamente cumplirá esa promesa. 

"C-Cierto... hablaré con él", respondió Alistair con una gota de sudor nerviosa.

Mushoku Tensei - El HonradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora