⊰03⊱

139 10 2
                                    

𝐂𝐞𝐝𝐫𝐢𝐜 𝐃𝐢𝐠𝐠𝐨𝐫𝐲

Miraba la mesa de Gryffindor, Harry no estaba ahí y tampoco había aparecido en el desayuno.

Me hacía sentir preocupación, aunque tenía a mis amigos, ellos jamás me hacían preocuparme. "Ellos son adultos, no necesitan de tu ayuda": era lo que siempre se me venía a la mente para no tener ninguna preocupación, pero esta vez era distinto, no me preocupaba por nadie más que por el niño de oro. Mis manos se habían vuelto temblorosas, ¿hace cuanto ya no temblaban? Tal vez habían dejado de temblar en segundo año cuando por fin pude ver a mi madre descansar aunque doliera. Pero ahora alguien más había despertado esa parte que no me gusta de mí.

Siempre me ha desesperado la manera en que me puedo volver un mar de nervios en tan solo unos minutos, aunque había logrado controlar eso durante estos últimos cinco años, ahora ese chico llegaba y me había volver a ser mi yo de antes.

Necesitaba un café. Oh sí que lo necesitaba.

Pronto nos iríamos de vacaciones. Navidad ya estaba demasiado cerca. Potter se iría pronto con sus padres y yo con el mío.
Pansy me había dicho que dejará de tener miedo y que me lanzará.

—Sí no lo haces, alguien más lo hará.

—Como te encanta molestarme con eso. Ya te dije que aún no es momento, solo llevamos dos meses hablando, ni siquiera sé si le gustó.

—Pues si no te lanzas, nunca sabrás.

—Prefiero ir de poco a poco a perder de una su amistad por un amor no correspondido.

Aunque ya había pasado unos días sobre el tema, aún me seguía insistiendo sobre lo mismo; aunque paró cuando los chicos le dijeron que dejara de molestar con el tema y me dejara esto a mí, que no era un tema en el que debía entrometerse.

Les agradecí cuando me enteré, hubiera amado a ver visto eso. Adoro a Pansy, pero cuando alguien no sigue sus pasos, suele ser un tanto molesta con el tema y no te suelta hasta que se haga lo que ella quiere

—No necesito seguir tomando esto —me pare y salí. No podía esperar a Harry porque tenía que hacer mi tarea y no podía darme el lujo de dejarla a un lado ya que era una investigación.

Entre a la biblioteca y pase por cada estantería hasta encontrar todos los libros que fueran necesarios sobre mi tarea Cuchicheos se escuchaban del otro lado de estas. Estaba hasta la parte de atrás, eran dos chicas, no lograba descifrar lo que decían.

Me acerque pero no para escuchar, sino porque necesitaba tomar un libro que estaba por ese pasillo. Visualice una cabeza pelirroja y una castaña.
Eran Granger y la Weasley. Parecía una conversación muy comprometedora, la pelirroja se escuchaba molesta y parecía que estaban peleando

—Parece que te gusta Ron —comentó Weasley con un tono molesto.

Miré por uno de los espacio que me dejaban dos libros y vi como Granger negaba con la cabeza.

—No entiendo porque mencionas eso si hace un momento estábamos bien. Te he dicho bastantes veces como para que entiendas que no me gusta Ronald, es tonto que sigas con el mismo tema, parece que buscas una estúpida excusa para terminar conmigo

¿Terminar?

Esa palabra se quedó en mi mente por unos segundos, no sabía que salían ambas juntas, ni siquiera se me había venido a la mente, siempre había parecido que Granger gustaba pero Ron, por mi mente nunca había pasado esta parejita.

Un silencio incómodo —para mí— se hizo presente. La pelirroja se miraba irritada, mientras que Granger parecía que todo aquel buen humor que tenía desapareció de un segundo a otro.

ʟᴇóɴ ʏ sᴇʀᴘɪᴇɴᴛᴇ | ᴴᵉᵈʳⁱᶜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora