One-Short (YugoxOropo)

Hambre

Blanco.

Un blanco tan puro y tan brillante que duelen los ojos.

Duerme, duerme, duerme.

Duerme para que no duela mas, cierra los ojos y sueña en aquellos buenos momentos.

Abraza tu tristeza, dale un consuelo a tu pesar.

—Niño, ¿Sigues lamentándote?

—Cierra la boca, viejo.

—Aun tienes energía para contestar, eso es bueno.

Oropo se acurruca mas en si mismo, rodando los ojos irritado.

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Una vez mas se encontraba en aquel lugar blanquecino, tan vacío y tan solo como puede llegar a ser.

Yugo le prometió no abandonarlo, pero era cuestión de tiempo que descubriera la verdad, que supiera sobre mi cubrimiento hacia las malas decisiones de Qilby. Lo entiende y lo perdona, a pesar que fue el quien se equivoco en aquel entonces; tonto, tonto.

—¡Oye niño! ¿Sigues revolcándote en tu miseria?—la voz burlona del científico se presenta, sentándose no muy lejos de si.

Gruñe molesto, mirándolo ligeramente—Cierra la boca, viejo. ¡Y mantente lejos de mi parte!—exige, dándole la espalda.

Qilby era mucho mas agradable hace unos milenios atras, cuando aun no estaba tan loco.

—Niño, deberías estar agradecido de que hable contigo, te volverás loco dentro de un tiempo—dice lo obvio, rascándose una oreja—Yugo es bastante decidido cuando hace algo y mas cuando se trata de proteger a los inocentes habitantes del mundo.

—El me prometió nunca dejarme...—murmura triste, sin importarle realmente la actitud y palabras del hombre.

—Si, si. Y yo creí que el me entendería, pero solo es un mocoso terco—se queja, dejándose caer de espalda, para descansar la pesadez que siente su cuerpo ante el drenaje de energía que provocaba el selacubo.

Oropo mismo siente la pesadez, el cansancio y el hambre; tiene tanta, tanta hambre.

Yugo

Yugo

!YUGO¡

Sacude la cabeza esperando despejar los pensamientos intrusivos—Qilby, temo hacerle daño si salgo de aquí.

—¿Salir? No seas iluso, la única forma posible es si el quiere liberarnos, además, ¿Que quieres decir con hacerle daño? ¿Sientes tanto odio por encerrarte aquí conmigo?

Lo mira una vez mas, aun preocupado—Llegado el caso Yugo necesite de nuestra ayuda o solo la tuya, y venga a buscar a algunos de los dos; Me lance para lastimarlo...Y no lo odio, solo, me duele.

El mayor se levanta con dificultad, acercándose al menor y agachándose para estar un poco mas cerca, con una expresión seria.

—Dime, hijo, ¿Desde cuando has sentido eso?

El menor duda unos segundos, mientras se sienta para no quedar tan vulnerable.

—Desde hace unas semanas, casi un mes, si mal no recuerdo—confiesa.

Qilby lo observa en silencio, recordando como fue el proceso de su creación y la razón de su similitud con Yugo; recordando también, el haber usado Stasis para copiar la estabilidad de las dos energías.

Claramente es una copia, y si aun pudiera usar su Wakfu, seria capaz de ver como el Stasis devoraba toda la energía del pequeño cuerpo de su creación.

—Bueno, no puedo dar una razón especifica por mi limitada falta de Wakfu y materiales-suspira desanimado, levantándose y yéndose a algún lugar de aquella prisión—No olvides buscarme cuando aparezca Yugo.

Oropo resopla molesto por la perdida de tiempo.

Tiene demasiado tiempo.