El despertar (GIP)

De rodillas

Pov. Kara:

Estaba sentada frente a ella como en tantas ocasiones, admirando su belleza, disfrutando su melodiosa voz contándome el progreso del último proyecto que lleva a cabo la empresa. El mismo permitiría a todo el planeta tener agua potable a su disposición, algo tan común para nosotros y sumamente escaso en países subdesarrollados, otra muestra de la injusticia que dominaba el mundo

Su sentido de la justicia, humanidad e inteligencia fue lo que me enamoraron a lo largo de los años, pero nunca pude declararme, no cuando día a día le miento, ocultándole mi verdadero ser. Ya no sé porque lo hago, confío en ella más que en nadie, pero lo tengo prohibido, irónico, prohibirle algo al ser más poderoso del mundo, ¿algo más irónico? que lo acate sin rechistar

-Tierra llamando a Kara – enfoque la vista en su bello rostro, me sonreía confusa, contagiándome el gesto instantáneamente – te veías perdida, lamento haberte aburrido con mi charla

-Tu jamás me aburrirías, Lena – asegure – eres la mejor compañía del mundo

-Entonces... ¿en qué pensabas? – como siempre, a cada segundo de mi existencia, en ti

Ojalá fuera tan valiente para decírselo

-En lo hermosa que te ves hoy – amplio los ojos, viéndose sorprendida, cuando me percaté que lo dije y no lo pensé, imité el gesto – yo, yo, quiero decir, es que tú, tú, tú siempre te ves deslumbrante, pero hoy más, con ese porte ejecutivo, quiero decir, yo, tu, es decir...

-Kara – abrió la mano, silenciándome – respira – sonrió – tu tampoco te ves nada mal – guiñó – pero supongo que como siempre pasa, aquí se acaban los cumplidos y debes irte, ¿cierto? – suspiró, entristeciendo el semblante

Si, debo hacerlo, no puedo hacer esto mientras siga mintiéndole

-Solo le mientes porque quieres – esa voz tan parecida a la mía, pero un poco más grave, siempre respondía con sus comentarios inoportunos e innecesarios

Tengo prohibido hacerlo

- ¿Prohibido? ¿al ser más poderoso de este horrible mundo injusto? Podrías ponerlos a todos de rodillas, pero en cambio, te tienen de rodillas a ti, eres patética Kara Danvers, una deshonra para el apellido Zor-El

Cállate

-Sabes que es verdad, por eso quieres silenciarme siempre, si me escucharas podrías estar junto a quien amas, pero eres demasiado cobarde, no la mereces

¡CÁLLATE!

- ¿Kara? – su voz me trajo de regreso - ¿qué sucede? tus ojos se vieron raros por unos momentos y tú te ves molesta, lamento haberte importunado con mi comentario

-No, no es eso, lo siento - suspiré – Lena, yo... debo...

- ¿Irte? – sonrió triste – lo esperaba

-Cobarde

-No esta vez – alzó las cejas – hay algo importante que debo decirte, debes comprender que si no hablé antes fue porque lo tenía terminantemente prohibido, pero ya no me importa, no cuando eso me aleja de ti – estrujé mis manos intentando calmarme – mi mayor secreto

- ¿Finalmente me dirás cómo es posible que te alimentes como animal desahuciado y no engordes un solo gramo? – intentó bromear, pero estaba demasiado nerviosa como para reír, suspiré cerrando los ojos – Kara, me asustas

Es ahora o nunca

-Lena, yo soy...

- ¡No! ¡no puede ingresar! – la voz de Jess corto mis palabras, fruncí las cejas observando la puerta al instante en que Maggie entraba seguida de un pelotón de agentes, me levanté al instante