#18 Pregunta 1.- ¿Me creerías si te digo que es amor?

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Tras tocar el timbre, y al cabo de sólo unos segundos, las rejas serían abiertas, dándole así paso a Yor y su hija, quienes se encaminarían directo hacia la puerta de entrada de la mansión. Luego de tocar un par de veces, esta sería abierta, y una mucama las recibiría con una sonrisa.

>Sean bienvenidas. Adelante, por favor, la familia Desmond les espera.

Yor tuvo que tragar saliva, se sentía hecha un manojo de nervios, pero asintió con la cabeza y se fue abriendo paso por la entrada, tomando de la mano a su hija.

Anya, por su lado, era más optimista, y se distraía mucho viendo las paredes y las decoraciones tan bonitas y finas que había por tardas partes. Estaba fascinada.

Tras unos segundos de estar caminando ya dentro de la casa, y siendo guiadas en todo momento por la mucama, terminaron llegando a una habitación en donde se encontraban una serie de sillones, y donde había también tres mucamas más esperándolos.

Y sentada en uno de los sillones, había una persona más.

>Pueden tomar asiento. – Diría la misma mucama, pero al poco tiempo, diría algo más.

>Mi señora, la familia Forger está aquí. – Diría la mucama del principio, deteniendo su paso e inclinando la cabeza en señal de respeto.

>Uhm... - Fue todo lo que dijo.

Al tomarle la palabra y sentarse, tanto Anya como su madre se sorprendieron al ver de pronto a una mujer tan hermosa y tan bien vestida, con un porte de lo más refinado y que aparentaba tener menos edad de la que realmente tenía.

Aunque de todo esto, siendo la niña que es, lo que más le llamó la atención a Anya, era el sombrero tan bonito que llevaba y que tenía una pluma de ave incrustada.

Finalmente, aquella mujer optó por ponerse de pie, y volteó su cabeza en otra dirección.

> ¡Damian! ¡Nuestra visita está aquí! ¡Ven a saludar!

> ¡Sí, mamá!

Y dicho y hecho, Damian llegó rápidamente a la habitación, entrando en el campo de visión de Anya y Yor.

* ¿Entonces este muchachito es Damian? Luce bastante tierno. * - Pensamientos de Yor.

* No sabía que tuvieras una madre tan bonita. * - Pensamientos de Anya.

>Buenas días, Anya, y, eh... madre de Anya. Gracias por aceptar mi invitación y por honrarnos con su visita. – Avergonzado.

> ¡N-no! ¡Gracias a ti! Mi hija Anya está más que encantada de que la hayas invitado. Yo no estaba enterada de que ustedes se llevaran tan bien.

>Bu-bueno... supongo que sí. – Respondería él, rascándose la mejilla.

>Me alegra mucho saber que mi hijo mantiene buenas relaciones con ustedes. De antemano, les quiero pedir una disculpa. Verán, mi esposo no podrá acompañarnos el día de hoy, le surgió un compromiso muy importante de último minuto. Por esa razón, yo me encargaré de suplirlo este día. Discúlpenme si eso les parece una descortesía.

> ¡N-no! ¡Para nada! ¡No es ninguna descortesía! ¡El trabajo es trabajo! ¡Además! ¡Mi esposo tampoco pudo presentarse este día! ¡Se enfermó a última hora! ¡Pero no quería que nuestra hija quedara mal después de haber aceptado la invitación de su hijo! ¡Es por eso que tuvimos que venir sin él! ¡Discúlpenos a nosotros!

>Oh... entiendo. Bueno, supongo que no hay nada que se pueda hacer entonces, jaja. Estas cosas pasan.

Yor se sintió bastante extrañada al ver cómo es que la mujer se lo había tomado tan bien.

SPY X FAMILY - SIEMPRE SERÁS MI FAMILIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora