𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘-6

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Giovanna despertó de su siesta de la tarde a las 5 de la mañana. Últimamente se había hecho un hábito que en lo que llegará de clases se recostara en la cama y durmiera toda la tarde, a veces despertaba a las 7 a veces a las 10 y otras veces despertaba cuando la alarma del celular sonaba avisándole que habían clases.

En Italia nunca había dormido en las tardes, aún que claro, llegaba a su casa que si a las 12 am y era por pura suerte.

Esta era en una de esas veces en las que se despertaba a orinar, por lo que se fue rápidamente al baño, quedó cegada por unos instantes debido a la luz repentina del bombillo.

Cuando terminó sus necesidades fue hacia el espejo sobre el lavabo apreciando que cargaba con su pijama en vez de con la ropa que cargaba esta tarde, supuso fue Jena, ya había pasado otras veces en las que despertaba con la ropa de dormir. Al rato salió del baño y se acostumbró con facilidad a la oscuridad. Recostó de nueva cuenta su cuerpo en el suave colchón y sostuvo su teléfono, encendiendolo, cegandose nuevamente. Se sorprendió por la hora quizás debería dejar de dormir en las tardes.

No faltaba mucho para que su alarma sonara, por lo que decidió quedarse despierta. Desbloqueó el celular, entrando a la aplicación de mensajes

Lo primero en la pantalla era el chat de su madre con una tonelada de mensajes sin siquiera marcarle el visto. Llevaba un par de días ignorando los mensajes de su progenitora, en algún momento se excusaba diciéndole que los estudios y el clan de caza la mantenían muy ocupada, su mamá parecía olvidarlo y cambiaba la conversación, pero volvía a ignorarla de nuevo.

No era que no quisiera hablar con su madre, pero a veces era un poco intensa. Cuando todavía le contestaba de inmediato siempre la atosigaba con preguntas, pero no de las que cualquier madre haría con su hija en otro país sino que estas iban más referidas al clan.

Preguntas como: ¿Ya te uniste al clan?, ¿Te están entrenando?, ¿Estas dejando de ser una inútil?, ¿Marcaste dominio?, ¿Peleaste con una bestia?.

¿Como le decía que si marcó territorio golpeando a una bestia en la escuela?.

A una bestia rubia y oxigenada.

Rodó los ojos, apreciando como en el chat de su hermano aparecía el "Escribiendo..."

Volvió a observar la hora, según calculaba, en Italia eran como las 11 de la mañana.

Hizo una mueca y salió de la aplicación, no tenía muchas ganas de chatear con nadie. Giovanna dejó el celular en la mesita de noche y se colocó boca abajo en la cama, quizás podía dormir otra vez, y con suerte no despertar jamás.

Se rió por su pensamiento intrusivo, negando con la cabeza.

...

El celular de Giovanna comenzó a sonar repentinamente causando un gran susto en Jena que a penas estaba despertando.

No le iba a prestar atención al aparato, esperó hasta que dejara de sonar para volver a recostar su cabeza en la almohada, si era importante volvería a llamar.

Así fue, el teléfono sonó y sonó, causando que en su rostro sus cejas se fruncieran. Se sentó otra vez en la cama y tomó el aparato en manos con algo de duda, observando el nombre de Nini♡ en la brillante pantalla.

—¿Porque le sube tanto el brillo?, ¿esta ciega?. -Murmuró la pregunta para si misma, mirando hacia la puerta del baño, podía escuchar el ruido del agua, suponía ya estaba bañandose. Soltando un bostezo, contestó la llamada, colocando el celular en su oreja. —¿Hola?.

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⏰ Última actualización: May 18 ⏰

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Ella Huele A MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora