LA HISTORIA DE COSIUM (TRADUCIDO AL ESPAÑOL)

LA LEYENDA DE KAROK

Capitulo 4: el dolor de la verdad

El fuerte olor a pergamino y tinta seca pareció llenar las fosas nasales de Mortesen y congelarse allí, amenazando con asfixiarlo. Miró a su padre y el duque de Windsor, sin comprender.

"Yo... Yo... ¿Quieres que... Pelee?"

"Mortesen, tienes dieciséis años" dijo el rey, apoyando en la larga mesa de su estudio privado. "Luche mi primera batalla junto a mi padre cuando tenía un año menos que tu"

"Pero... Esto es contra nuestro propio pueblo, no contra ningún otro país" protesto. Su silla se había caído cuando saltó en estado de shock un momento antes y no se molestó en enderezarla. "¡Se supone que debemos protegerlos!"

El duque sonrió con algo muy parecido a la simpatía. Le había transmitido la forma corta y recortada de sus púas a su hija Sherry, pero su pelaje era de color verde pálido en lugar de amarillo.

"Sé cómo te sientes. Joven primo, pero tarde o temprano tendrás que empuñar la espada contra personas vivas. Es mucho mejor aprender esto a tu edad que más tarde, cuando estés demasiado arraigado en tus costumbres pacíficas. Debes comprender que a veces tu propia gente puede ser tu enemigo tan fácilmente como un ejército extranjero"

"Por favor... No creo que pueda hacerlo. Si mato a alguien, dejaré viudas y huérfanos al mismo tiempo. ¡No puedo soportar esa idea, padre!"

"Mortesen" la voz del rey ahora era roca solida. " Quiero que entiendas una cosa. Provocar la muerte es algo horrible, pero a veces es inevitable. Sé que preferirias que los soldados se encargaran de esto y que tú mismo no tienes nada que ver con ello, pero si no estás dispuesto a hacer estas cosas, entonces moralmente no puedes enviar a otros a hacerlas en tu lugar"

El príncipe estaba haciendo todo lo posible para contener los ruidos que intentaban salir de su garganta. Imágenes vividas de clavar su espada en el pecho desarmado de algún campesino desesperado e inexperto que solo luchaba por su hogar y su familia pasaron por su mente y se negaron a irse.

"¿No hay otra manera de evitar que Sandstone Valley se rebele abiertamente?" Le rogó. "¿Negociaciones de algún tipo?"

La semana anterior, el duque de Windsor había expresado cierta preocupación por una de las ciudades más pequeñas de su zona porque no había tenido noticias de su barón en más de dos meses, envió a un sirviente de confianza a observar el pueblo durante un día sin que nadie se diera cuenta. Cuando regresó con un informe, el duque lo llevó inmediatamente al castillo para informar al rey Negolas.

Mortesen había estado junto a su padre mientras el sirviente describía haber visto la ciudad de Sandstone Valley preparándose para un asaltó, construyendo empalizadas con púas para los muros exteriores y forjando armas. En ese momento, utilizó su forma de decir la verdad e indicó que no había nada falso en el informe.

"Primo" dijo el duque Windsor en voz baja. "No queria mencionar esto antes porque no creía que usted lo aprobaría, pero como su hijo parece tan decidido a otras opciones, no puedo guardarme la posibilidad para mí"

"Muy bien, ya basta" instó Negolas.

"Sé que la gran mayoría de estas aldeas rebeldes están llenas de gente que luchará salvajemente si ven que tus hombres se acercan a ellos, pero no son soldados. Si se les presenta una bandera de paz, es posible que escuchen, aunque es poco probable, pero una prueba mucho más grande de que usted desea un acuerdo pacífico sería traer a su esposa y a sus hijos pequeños. Para ellos sería el tipo de acto sentimental que causaría una impresión mucho mayor"

"No me gusta llevar a mi familia a una posible batalla" respondió el rey, pero también había algo pensativo en su voz.

Mortesen puso sus manos sobre la mesa, su actitud ahora ansiosa y esperanzada. "Padre, ¿No sería éste el resultado más deseable? ¿Para evitar muertes innecesarias en ambos lados? Incluso si hicieras una demostración de fuerza, mientras la reina, Rakar y yo estamos allí, es posible que al menos estén dispuestos a escuchar primero"