卐 𝖤𝗅 𝖺𝗌𝖼𝖾𝗇𝗌𝗈 𝖽𝖾 𝗅𝖺𝗌 𝖳𝗈𝗋𝗍𝗎𝗀𝖺𝗌 𝖭𝗂𝗇𝗃𝖺𝗌 卐

∆Raphael/Rafa∆

[@ghostytoad]

Había pasado una semana entera desde que Rafa había dormido y el murmullo bajo e ininteligible que retumbaba en su pecho hacía obvio que realmente le vendría bien el descanso, su cuerpo, mente y espíritu anhelaban una noche de sueño tranquilo y Rafa estaba decidido a irse a la cama a pesar de los dolores que atravesaban su cuerpo y amenazaban con derribarlo, apenas había pasado la puerta de su habitación cuando se desplomó hacia delante con un ruido sordo y un gemido retardado, su rostro chocó contra el frío y duro suelo.

'Bueno, esto no es mejor', pensó para sí mismo y luchó por retorcerse y arrastrar su cuerpo contra el suelo, el arrastre de sus púas dejaba rayones y grietas en el concreto inmóvil, se preocuparía por el desgaste de la mañana, por ahora, su cama era demasiado acogedora para que su cuerpo sobrecargado de trabajo la ignorara y, por Dios, iba a dormir un poco esta noche, la semana anterior no había sido más que patrullas consecutivas, cuyo ritmo brutal comenzó a afectar considerablemente la forma masiva del titán, los moretones, rasguños que había pasado desapercibidos en su cuerpo hicieron que su búsqueda de una buena noche de sueño fuera aún más apremiante, estaba a sólo unos centímetros de los pies de su cama cuando su caminata fue interrumpida por el ruido de pasos suaves a su lado.

"Mikey, no te llevaré de regreso a tu habitación". dijo inexpresivamente, aplanando su torso levantado de nuevo en el suelo con la esperanza de disuadir a su juguetón hermano pequeño de saltar sobre su espalda y exigir que lo llevaran a caballito, cuando los pasos se detuvieron justo al lado de su rostro, Rafa giró la cabeza y miró hacia arriba con los ojos entrecerrados, en lugar de piernas verde oliva a su lado, se encontró con lo que reconoció como la forma de su pareja arrodillada junto a su cara, con una caja envuelta tendida hacia él, Rafa parpadeó lentamente hacia T/n y levantó un brazo tentativo para aceptar el regalo.

"¡Nena, oye!" su voz era más profunda y mucho más lenta de lo que quería que fuera, "¿Qué pasa con el-"

Tan pronto como el paquete salió de sus manos, T/n le sonrió sin decir palabra a la tortuga mutante y comenzó a salir por la puerta a toda prisa.

"Uh... ¡G-Gracias! ¡También te amo!" los había llamado, la última parte sonó incierta considerando que se habían ido a toda prisa sin siquiera un saludo. ¿Lo odiaron de repente? ¿Estaban enojados con él? ¿Querían dejarle un regalo antes? ¿Pensaban que no era atractivo tirado así en el suelo? Vale, tal vez lo último fue un poco exagerado, pero nada estaba prohibido en la mente pensativa de Rafa, pero habían dejado un regalo, ¿seguramente todavía les debía gustar al menos?

La tortuga había echado un vistazo a la caja que estaba en su gran palma, sentándose para examinar el trabajo de su compañero, riéndose para sí mismo, admiró con qué delicadeza se había doblado el papel de regalo rojo, con los bordes limpios y sin arrugas, el lazo de encaje dorado que tan bellamente se sentaba en la parte superior sólo podría haber venido de su mano cuidadosa y precisa; Si alguna vez hubo alguien con una habilidad especial para envolver regalos, ese fue su amado T/n.

En un movimiento irreflexivo, desenvolvió la caja de tamaño mediano que se escondía debajo, su atención fue captada por la pequeña nota adhesiva pegada al costado de la caja, que decía:

¡Feliz Navidad, mi Ángel Rojo!
¡Sé que has estado trabajando muy duro y quería mostrarte cuánto te aprecio y todo lo que haces! ¡Cuéntame si te gustan tus nuevos regalos!
Con amor, T/n
PD. Lo llamé Rafa Jr.

"Rafa Jr, ¿eh?" había tarareado mientras una sonrisa descarada y enamorada se extendía por el rostro del chico y un sonrojo oscuro coloreaba sus mejillas verdes, ¿Qué hizo para merecer a alguien tan maravilloso y considerado? ¿Cómo podría esperar alguna vez pagarles por un gesto tan amable? Sus ojos soñadores leyeron la nota de amor una y otra vez, absorbiendo cada pequeña y dulce palabra, todo lo que podía hacer era agitar las manos y reírse como una niña pequeña, fanfarroneando silenciosamente en el suelo de su habitación sin querer llamar la atención de sus hermanos sobre su pequeña y tonta exhibición, si supieran que su hermano mayor era un desastre de amor y con qué facilidad T/n podía ponerlo nervioso, las burlas serían despiadadas.

Con amor, cavó con entusiasmo, tirando y tirando del objeto rebelde empaquetado firmemente en la pequeña caja, después de algunos tirones suaves e ineficaces, dio un fuerte tirón y obligó al suave regalo a liberarse de su apretado recinto, lo que provocó que tropezara sobre su espalda en el proceso, el regalo de peluche se descomprimió en el aire con un POOF audible y, en un rebote, aterrizó encima del desprevenido ninja.

"¡¿Q-Qué--?!" Le tomó un minuto enfocar sus ojos en la gran tortuga de peluche verde que continuaba esponjándose hasta alcanzar su máxima capacidad para abrazarla.

"¿Rafa Jr...?" Él se rió y se sentó una vez más con el peluche de gran tamaño dejando escapar un chirrido mientras apoyaba los codos sobre su caparazón de lana.

"¡No puedes sorprender a la gente así!" Rafa arrulló con su voz de bebé, "Debe haber sido un viaje difícil estar metido en esa pequeña caja, pobrecito, no te preocupes, pequeño, papá Rafa te tiene ahora ~"

Apretando fuerte el peluche en sus grandes brazos, Rafa se dejó caer al suelo, acurrucándose en el acogedor calor del animal de peluche y poco a poco comenzó a quedarse dormido, al quedarse profundamente dormido en cuestión de segundos, no se había dado cuenta de las galletas y la caja aún más pequeña que aún estaba en la caja de regalo, de lejos, el peluche era más que suficiente para él ahora