I miss you 🌟 - [Hazbin Hotel].

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Los siguientes días se transformaron en semanas. Charlie observaba detenidamente el comportamiento de Razzle, y pese a lo que le mencionó Husk, parecía no depender de Fat Nuggets, ya que en ocasiones Angel se llevaba al cerdito y este no cambiaba mucho su actitud, si se cerraba sin la presencia de Fat Nuggets, pero no a un grado alarmante, era comprensible ya que aún pasaba por un momento difícil.

Charlie notó que Kee Kee se había vuelto cercano a los 2, jugaba con ellos o corría por los pasillos con Razzle cuando el cerdito dormía. Razzle poco a poco volvía a tener su actitud de antes, era un proceso lento pero estaba dando resultados, ahora volaba más seguido, prestaba atención a los llamados de Charlie y comía más de lo normal, aun se ponía debajo de la estatua o la miraba por horas, pero no estaba sumergido en su tristeza como antes.

Al siguiente día ayudó más de lo normal desde la partida de Dazzle, a la princesa le hacía feliz verlo con esa energía, en sus ojos ya no se reflejaba tanta tristeza, era algo bueno. Llevaba cajas de arriba hacia abajo, estaba constantemente detrás de Charlie para atender sus peticiones y ayudar en todo lo que podía, en su rostro ya se reflejaba su sonrisa de siempre y se le miraba más calmado.

Estaban checando el lobby por alguna cosa que faltara o para detectar imperfecciones en las paredes, ya que era costumbre que Cherry Bom las destruyera, cosa que molestaba a Alastor pero se contenía para no matarla enfrente de todos.

- Tú qué ponías Al? - Estaban los 3 supervisando el lobby.

- No veo nada fuera de lo normal, querida. - Dijo anotando en un papel.

Escucharon unos golpes en la entrada principal llamando la atención de los 3 que voltearon a mirar al lugar.

- Deben ser las copas que ordené, ya regreso, vamos Razzle - dijo caminando a la entrada con el cabrito volando detrás de ella dejando a un Alastor que continuó anotando.

Y como lo dijo la princesa, eran las copas que pidió en línea. Husk le había pedido ya que la mayoría se había roto debido a las entradas extravagantes de Cherry, y se estaba quedando sin arsenal de copas de vidrio, además de nuevos vitrales con forma de manzanas.

- Firme aquí. - Dijo el diablillo entregando una hoja.

- Muchas gracias. Razzle ¿Puedes llevar las copas a Husk? Yo llevaré los vitrales a mi oficina. - dijo entregando la hoja nuevamente ya firmada.

El cabrito asintió y tomó la caja para entrar y llevarla al bar. En su trayecto notó que Alastor había terminado de anotar ya que desapareció el papel y caminaba a la puerta no sin antes toparse con Vaggie que apareció de la nada.

La respiración de Razzle dejó de funcionar por unos instantes, y es que en el puño del demonio polilla llevaba una lanza similar a la que habían matado a su hermano, la imagen de Dazzle cayendo con una cortada profunda en su cuello se hizo presente en su mente, el miedo y la tristeza llegó tan rápido que dejó caer la caja escuchándose un estruendo fuerte, llamando la atención de los presentes, Charlie corrió al lugar mirando a su guardaespaldas petrificado y con lágrimas a chorros por sus mejillas.