Veneno [Danilo Sanchez/Matias Recalt]

12: Dependiente del sabor

Estaba fumando afuera del hospital. Danilo había llegado a casa con un dolor en el brazo que describió como horrible y con Cochi lo trajimos para que lo vean.
Hace dos semanas Rulo estaba incontrolable por mi, no me hablaba ni me miraba. Mi única conexión con él era a través de Danilo pero el iba y volvía entre su casa y la mía. Tenía su vida, entrenaba, iba al colegio y todavía tenía que hacer de mensajero en la casa. A parte de eso tampoco podía llevarse a Rulo a Liniers todos los días.

Cuando Danilo no estaba Rulo salía y no volvía hasta tarde, no sabía dónde se iba pero cuando llegaba siempre lo esperaba llorando, aunque no se diera cuenta y solo se metiera en su cuarto dando un portazo.

No volví al colegio, todos se habían enterado lo de la mujer pero no nos culparon a nosotros, culparon a Chacho y Kiru por perseguirnos y "asustarnos". Ellos se fueron del barrio y las cosas se calmaron un poco.

Con el paso de los días me había dado cuenta de que sin Rulo, la mitad de la cabeza ya no me funcionaba y pasaba mis días triste, sabiendo que ahora me odiaba. La China a veces aprovechaba mis momentos tristes para ofrecerme merca y la aceptaba, terminaba acostada con ella en el mismo sillón de siempre, hablando sobre Jorge o nuestra vida.

Danilo se enojaba cuando no volvía a casa por eso, pero cuando volvía yo solo dormía si me daba unos cuantos besos antes de acostarme. Si no estaba, solo dormía pensando en algunos besos de otros días.

Ya me sentía dependiente del sabor de sus labios.

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-Mira que vas a pasar 45 días con un yeso en el brazo, te la regalo, Dani. -dije caminando a su lado. Cochi nos había dejado cerca de casa y estábamos caminando para llegar.

-Al meno' ya no me duele tanto.

Llegamos a casa y entramos, sentí olor a porro y supe que pasaba, pero esta vez no iba a decir nada.
Rulo salió de su cuarto con un porro en la mano y saludó a Danilo, a mi no.

-Como estás? Te cortaron las alas?

Danilo rió y negó pero yo no pude, solo me fui a mi cuarto para buscar unas cosas e ir a casa de Cochi. Si seguía en casa me sentía mal y excluida, los intentos de Dani por integrarme a alguna conversación nunca servían y seguro él le iba a decir algo a Rulo sobre el porro que estaba fumando. En casa ahora él parecía hermano de Ramiro.

Llegué a casa de Cochi pero Anabella y la China no estaban, solo Cochi y Jorge, sentado uno enfrente del otro tomando unas birras.
Me senté al lado de Jorge y empezamos a hablar los tres.

-Me hace mierda lo que hace Ramiro. -dije y agarré la botella de birra para tomar.

-No pienses en eso, enana. -me habló Cochi mientras se levantaba y se iba dentro de la casa.

-No te entiendo porque las peleas con Hernán eran diferentes pero espero que en algún momento vea que haces todo por él, hasta darle espacio que te duele darle.

Le sonreí y puso sus manos en mis mejillas, acercándose para besarme.

-Vos sabes que te quiero, no? -me preguntó.

-Si, yo también te quiero.

-Como nos queremos mucho sabes que tiene que pasar? -lo miré con confusión. -tenemos que quedar solo nosotros. -me susurró, no entendía que quería decir. -me estoy cansando de que me traten como el segundo, Anita.

Seguía sin entender pero cuando iba a preguntar llegó Cochi y Jorge solo me acercó de nuevo a él para besarme y subirme arriba suyo.

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