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— ¿Por qué mierda tardará tanto? — preguntaron uno de los secuestradores
Ya había pasado más o menos como una hora
No paraban de mandarle mensajes al chico qué se supone q debería de estar vigilando la entrada para saber sí Sanzu ya había llegado o no.
Pero este simplemente no respondía
— Me estoy enojando — dice uno de ellos
— Pongan entonces una película o yo q sé
— ¡Tú cállate maldita perra! — te respondió otro
— Uy q genio...
El líder por así decirlo, envío a uno de sus secuaz a la entrada a ver qué era lo que estaba sucediendo, pero a mitad de camino se encontró al chico más drogado que antes, con unos ojos de loco y desesperación.
Vio como en la mano sostenía un palo con astillas y clavos en el que sobresalían y como este estaba manchado con sangre.
— mierda... — susurro
Por instinto se dio la media vuelta y corrió hacia el lugar donde estaban sus demás compañero, Sanzu al verlo empezó a correr igual detrás de él y antes de que el secuaz pudiera gritar o abrir la puerta hacia la habitación donde estaba la chica.
El lo golpeó con el palo en las piernas y luego le golpeó en la garganta para que no pudiera gritar ni decir nada.
— Dónde está ella, donde está ella, dónde está ella — no dejaba de murmurar
Sanzu siguió golpeando repetidas veces en el cuello del chico, este obviamente no podía hablar ni gritar ni nada, el dolor era inmenso y seguramente iba a morir por pérdida de sangre.
— ¡Cierra la puta boca! — gritó peli rosa
Gracias al consumó excesivo de drogas ya empezaba a alucinar, por ello no dejaba de golpear al chico en la garganta
Su grito fue demasiado fuerte q los demás lograron escucharlo
— ¿¡Quien carajos gritó!? — pregunto el líder abriendo la puerta bruscamente
Al ver a Sanzu destrozar la garganta de su amigo se quedó en shock, el de cabellos rosados volteó a verlo, cobro la postura y caminó hacía él
Adentro de la habitación estaba el líder y dos secuaces más y obviamente la chica que estaba atada de muñecas y tobillos acostada en el suelo con la ropa desgarrada .
— Sanzu...
— ¡Amigo Sanzu, me alegra verte, estábamos cuidando a tú novia por tí! — exclamó el líder
Sanzu no escuchaba nada, sólo podía ver a su chica toda lastimada.
“La flor más bella de esté jardín ha sido ensuciada”
Sanzu sin escuchar más a los secuestradores empezó a golpear a todos ellos con el palo, la sangre brincaba por todos lados Sanzu tenía las manos lastimadas, el rostro lleno de sangre que le salpicaba.
Y ella, sólo veía al chico convertido en un completo desconocido.
Era una escena horrible, todos estaban lastimados, pedazos de piel se desprendían de la ropa de los chicos
Y Sanzu estaba perdiendo el control de sí mismo.
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