El color de sus ojos son tan hipnotizante pero tan peligrosa como un Avada Kedavra
Un legado
varios muertos
una sola victoria
No hay lugar para el amor cuando se obtiene el máximo poder absoluto
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Electra
Los días pasaban rápidamente desde que había llegado a Hogwarts con mis hermanos. Ellos no tardaron en hacerse notar por sus travesuras, sus bromas, y sus conquistas amorosas. A pesar de su fama de problemáticos, también eran unos estudiantes brillantes, que obtenían excelentes calificaciones en todas las materias.
Yo, por mi parte, también destacaba por mi inteligencia y mi habilidad mágica. Me resultaba muy fácil comprender y dominar las asignaturas y los hechizos, y pronto me convertí en la mejor de la clase. Era la favorita de varios profesores, que alababan mi desempeño y mi potencial. Sin embargo, también sabía que había otros ojos que me observaban con recelo y curiosidad. Dumbledore, el director de la escuela, me vigilaba de cerca, y no era para menos. Él conocía el pasado y la fama de mi familia, y seguramente se preguntaba qué planes tenía yo en mente.
Pero Dumbledore no era el único que me vigilaba. También lo hacía un grupo de estudiantes de mi propia casa, Slytherin. Ellos eran los hijos de los seguidores más fieles y poderosos de Voldemort, el señor oscuro. El líder de este grupo era Tom Riddle, era el mejor alumno de Slytherin, y el más respetado y temido. Era el heredero de Voldemort, y el que más se parecía a él. Junto a él estaban su hermano menor, Mattheo Riddle, que era igual de inteligente que Tom, pero más rebelde y problemático. También estaban Theodore Nott, Blaise Zabini, Lorenzo Berkshire, Regulus Black, Draco Malfoy, y Pansy Parkinson. Todos ellos eran unos magos talentosos y arrogantes, que creían en la superioridad de la sangre pura, y que despreciaban a los demás.
Desde que llegué a Hogwarts, tuve algunos enfrentamientos con Tom en algunas clases, donde competíamos por demostrar quién era el mejor. Él no soportaba que alguien le hiciera sombra, y menos una chica como yo, que tenía un origen y un destino tan misterioso y peligroso como el suyo. Yo tampoco me dejaba intimidar por él, y le devolvía sus miradas y sus comentarios con la misma frialdad y desafío.
En cuanto a los demás, algunos me mostraban interés o admiración, y otros me temian o me evitaban para evitar cualquier altercado. De vez en cuando, Lorenzo me decía algún piropo cuando me cruzaba con él por los pasillos o en las clases, pero yo sabía que era así con la mayoría de las chicas, y que solo buscaba divertirse. Así que no le prestaba atención, y lo rechazaba con indiferencia, como hacía con la mayoría de los chicos que intentaban acercarse a mí.
Con mattheo era distinto , también recibía una que otra mirada en cuando nos veíamos en clases o pasillos , era sumamente extraño por qué me miraba de diferente formas. no cruzamos palabras alguna pero en cuanto estaba con tom y sus amigos parecía ignorarme
Con Theodore y Regulus compartía algunas clases, pero no hablaba mucho con ellos. se mantenían al margen de los demás pero al igual que su grupo hacían de las suyas demostrando otra faceta de ellos.
