CAP 7

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En la mansión Kim había un gran alboroto debido a las preparaciones para la fiesta de esa noche. La personas que eran en su mayoría meseros estaban arreglando varias mesas.

—¿Aquí señor Kim?—un hombre que estaba encima de una escalera de madera intentaba acomodar unas telas en forma de moño.

—Si, justo allí—Yeonsu, estaba muy centrado en que todo este perfecto para la fiesta de su marido.

Mientras tanto en la cocina. Dan ayudaba con los aperitivos y postres a los cocineros, Chanwoo  hacia de catador. Yoongu y Dong-Gyum estaban con la nana ayudando al personal a acomodar los cubiertos en las mesas.

—A esto le falta azúcar—musitó con una cara de no estar convencido al probar un poco de la crema con la que se iba a decorar el pastel.

—¿Ahora, que tal?—preguntó ya agregando azúcar.

El pelirubio volvió a probar la crema. Esta vez en su rostro había una sonrisa.

—Ahora esta deliciosa—exclamó—Oh Dan, tu eres muy bueno en todo lo relacionado con la cocina.

—No es para tanto Chanwoo. Pasame el colorante amarillo—le pidió, al cabo de unos segundos lo obtuvo.

—Bueno yo voy a también ayudar a cocinar. De paso pruebo algunos postres—hablo con una sorisa traviesa mientras camino hasta una de las estufas de esa gran cocina.

Dan se propuso a decorar el pastel con mucho cuidado y dedicación. Era un pastel de cuatro pisos. Chanwoo estaba terminando de preparar unos chips de calabacin para luego ponerlos al horno.

Ya había llegado la noche. El gran salón ya estaba repleto de varias personas.
Dan justo sus amigos estaban en una mesa sentados hablando. Los cuatro vestían trajes ajustados a sus cuerpos, los colores resultaban la belleza que poseían. Esto atraía la atención de varios en allí.

Jaekyung junto a sus padres llegaron a la fiesta. Siendo recibidos por Yeonsu y Seon-doju quienes agradecieron por su presencia en la fiesta.

Seon-doju y Kaeyung se apartaron de sus esposos y fueron a juntarse con los demás invitados.

—Gracias por asistir a esta fiesta.

—No hay de que Yeonsu—hablo Soo-jin—Aunque nuestros hijos no se hayan podido casar aún podemos mantener nuestra amistad.

—Si, lose ¿y dime como lo tomó tu hijo al respecto?—preguntó con curiosidad.

—Bien, supongo—respondió con algo de duda—Ya sabes que Jaekyung es igualito a su padre.

Jaekyung se había alejado de los mayores pero fue interceptado por varios Omegas. Quienes intentaban tener su atención seduciendolo con sus feromonas. Hasta que apareció alguien jaloneadolo.

—¿Qué haces aquí, Myung-Dae?—cuestiono al ya estar algo alejado.

—Bueno, Dan me invito para ayudarme a acercarme a Chanwoo.

—¿Uh?—lo miro confundido.

—Luego te explicó—se arreglo un poco la corbata—¿Cómo me veo?

—Como un idiota.

El pelicastaño rodó los ojos y busco con la mirada a Chanwoo, hasta que lo vio en una mesa junto a los demás chicos. Comenzó a caminar hacia allí, Jaekyung también había visto a Dan y también se acercó.

—Hola—saludó con una sonrisa y una reverencia Myung-Dae.

Los Omegas que estaban platicando pararon al escuchar el saludo del Alfa.

Cambiar mi historia [JINX]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora