de boca en boca

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El silencio era absoluto en la mansión, aquella mañana mientras todos descansaban, se escuchaba un fuerte golpeteo en la puerta principal, incluso antes de la hora habitual dónde las doncellas, muchamas, cocineras y demás se levantaban para hacer su labores diarias, pero todos se levantaron de un susto ya que nisiquiera había salido el sol, el golpeteo resonaba por todo el salón recorriendo los pasillos y llegando a las habitaciones, hasta el duque despertó por tan fuerte gritos que se asemejaban al de una mujer, desconcertando a todos en la mansión exepto a una pequeña mariposa quien seguía sumida en su sueño, nisiquiera se inmutó por aquellos ruido que podían despertar a cualquiera, pero ella seguía durmiendo.

El duque rápidamente se arregló un poco, y bajo a paso veloz a la puerta principal se le hacía raro que alguien molestará a estas horas de la madrugada, cuánto más se acercaba aquella voz casi femenina se le hacía conocida, al estar frente a la puerta, imploro que no fuera aquel hombre de ojos tan extraño y brillantes.

Al abrir de golpe un hombre rubio callo al piso frío, al ver de quien se trataba suspiro de manera preocupada, no esperaba que su reacción ante aquella carta fuera tan bochornosa.

Aquel hombre de ojos bicolor, seguía llorando, nisiquiera miro a quien le había abierto la puerta simplemente se paró lo más rápido y se dijia a toda prisa a las escaleras.

Gritando una y otra vez "¡¡Mi amor, Shinobu!!" Ante tal reacción el duque rápidamente lo tomo del hombro impidiendo que avance más, con la mirada ordenó a las mucamas algo asustadas que bloquearan el paso hacia el segundo piso, el duque sabía exactamente de que se trataba todo el alboroto causado, claro estaba que el joven Doums no había tomado de la mejor manera aquella carta enviada por el, sobre aquella ruptura de compromiso, claro que s el no le molestaba ya que el consideraba que no era digno de su hija, odiaba los escándalos que tenían a su hijo como protagonista.

Shiro: ¿¿A que se debe tan inesperada visita, joven Douma??

Douma: Duque.... ¿¿Usted sabia de esto no?? ¡¡Usted no puedo aprobar tal aberración!!

Shiro: Primeramente buenos días de igual manera joven Douma, debo decir que aquella carta no le sentó bien.

Douma: Ustedes su padre, usted no puede permitir esto.

Shiro: ¿¿Permitir?? ¿¿Y tú quien eres para cuestionar mis decisiones??

Claramente estaba molesto, no solo por haber montado un show a horas de la madrugada si no por querer subí a la habitación de su hija.

Su cara era fría, sus venas sobresalían de la frente, su molestia era única que daba miedo, meterse con su hija no era lo aconsejable, pero no dejaría que aquel hombre enfermo arruinara la vida de su hija.

Douma: Usted autorizo este compromiso, no puede cancelarlo de la noche a la mañana.

Shiro: Como duque puedo hacer lo que se pegue en gana, usted no puede venir y querer sobrepasar mi autoridad, el que da las órdenes aquí soy yo, estás mi casa, y sigues mis reglas, no tolerale más insulto de tu parte, te pido de la manera más amable que te retires antes de que llame a mis guardias.

Douma: No me iré sin antes hablar con ella, si es cierto quiero que ella misma m lo diga.

Así el tomo asiento en aquel sillón, teníendo así ambos una pelea de miradas, el duque mando a llamar a las donellas y mucamas de su hija ordenando que la despertarán.

El sabía a la perfección lo terco que era aquel hombre, era molesto, pero sabía que el no lo dejaría en paz hasta que su hija lo confronte.

Así mando a traer el té, mientras aquellas jovencitas trataban a regañadientes despertar a la joven, sus doncellas trataban de igual manera despertarla, pero aquella joven simplemente no quería.

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⏰ Última actualización: Jun 10 ⏰

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En Esta Vida Y En Las Demás (Giyushino 🦋🌊)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora