𝘊𝘢𝘯 𝘪 𝘧𝘢𝘭𝘭 𝘪𝘯 𝘭𝘰𝘷𝘦 𝘸𝘪𝘵𝘩 𝘺𝘰𝘶 || 𝘨𝘰𝘺𝘶𝘶

¡Especial de San Valentín!

AA no pensé decir esto tan pronto pero

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⚠  Advertencia este especial contiene escenas +18  ⚠

Él de cabello blanco había reservado una habitación con luces color rojo que lograban generar pasión en el ambiente, el cuarto era elegante, con una cama lo suficientemente grande para dos personas, y lo más importante, dentro de uno de los cajones, habían  juguetes sexuales comprados por el mismísimo alfa, Gojo Satoru. El chico de cabello blanco haría sentir al pequeño omega pelirosa todos los placeres mal vistos por la gente. Un olor a ámbar muy fuerte inundaba la gran habitación, Yuuji es un omega no acostumbrado a las fermonas de un alfa dominante como lo es Satoru, lo que provocaba que el pelirosa estuviera muy afectado por el aro, las piernas del menor temblaban y un líquido viscoso  baja lentamente sobre los muslos de Itadori. El de ojos azules se acerco a la oreja de el pelirosa para susurrarle algo que debía tomar en cuenta Yuuji.

Antes de morir, quiero follarte, cariño.-Susurro el de cabello blanco, provocando un sonrojo por parte del menor.

Satoru no podía evitar relamerse la comisura de sus labios , pensando en el placer extremo que le haría sentir al pequeño Yuuji. Gojo no era capaz de aguantar un momento más, agarro de la mano al pelirosa y lo empujo hacia la cama, dejando a Itadori en una posición en la que le permitía al de ojos azules ver con total claridad la exquisita figura del menor, que con total rapidez había colocado sus manos sobre su cara, tapando su rostro sonrojado, cosa que no le gusto para nada al alfa caprichoso que era Gojo.

Eso no esta permitido Yuuji -Dijo con voz ronca.

S-Satoru-san, esto es muy vergonzoso.-Admitió el pelirosa. 

Gojo simplemente ignoro el comentario del Itadori y siguió con su obra, se acerco hacia el menor, una vez cerca él de cabello blanco bajo lentamente los pantalones de Yuuji dejando a la vista su grande trasero que hacia que él ojiazul se pusiera tan duro que empezara a doler, una vez tan cerca de el trasero del menor, empezó a lamer el lubricante natural que se regaba desde la parte baja del pelirosa, era tan dulce como decían los la mayoría de alfas.

A-ah S-Satoru -san ahí n-no - Dio un gemido placentero.

Los gemidos del pelirosa eran tan melodiosos como se lo había imaginado tantas veces Satoru, haciendo que el pequeño miembro del menor expulsara su semilla, dejando a un peliblanco un  poco satisfecho , el miembro de Gojo miembro no podía seguir así estaba tan duro que lo más posible es que fuera estallar, bajo sus pantalones dejando ver su gran miembro descubierto.

 Luego de asegurarse de haber lamido por completo ese líquido dulce, levanto con delicadeza el cuerpo tembloroso de Yuuji provocando que el miembro de Gojo chocara suavemente en la mejilla del menor, el pelirosa capto de inmediato las intenciones del peliblanco, colocando de rápidamente  la polla de Satoru en su boca, los movimientos inexpertos del pequeño Yuuji hacían enloquecer a aquel alfa peliblanco, Itadori lamía la punta como si fuera una paleta, y con la mano libre masturbaba el miembro de Gojo en las partes que su pequeña boca no lograba alcanzar. Satoru sentía como en su polla recorrían pequeña descargas eléctricas, e inconscientemente tiraba de la cabellera del menor, provocando que su gran miembro llegara hasta lo más profundo de su garganta, liberando todo el líquido viscoso que había estado guardando  desde hacer un tiempo.

Yuuji, esto puede dolerte hasta siento punto, se fuerte ¿si? -Dijo Satoru tratando de regular su respiración.

Satoru coloco en posición e perrito al omega pelirosa, dejando un mejor plano de su esplendida figura y su gran trasero. Agarro un condón que yacía en la encimera de el pequeño cajón que estaba a un costado de ellos, coloco el condón sobre su palpitante miembro, él peliblanco agarro las caderas del menor, introduciendo de una estocada su miembro, al pequeño Yuuji no le parecía tan doloroso, pues el líquido dulce que había quitado Gojo de su parte baja, había vuelto, lo que hacia que no doliera tanto, más bien lo disfrutaba, las embestidas de el ojiazul no paraban, con el paso de el tiempo eran más rápidas y fuertes, Satoru alzo su mano para golpear el lindo trasero del pelirosa.

¡Ah! Sa-Satoru más despacio - Gimoteo el menor

N-no puedo hacer eso Yuuji ¡ugh! tenemos una larga tira de condones- Dijo con la voz ronca por el placer señalando la encimera del cajón.

Satoru sintió la misma corriente de antes, se iba a correr, agarro las caderas de Itadori empujándolas hasta que su miembro entrara  por completo, logrando venirse. Saco su miembro de la cadera de el pelirosa,, y se dirigió hacia el cajón final, donde se encontraban una gran variedad de juguetes sexuales.

Tenemos toda la noche para jugar  Yuuji~