COMO SIEMPRE RECUERDEN QUE ESTO ES MIYACEST ESTA HISTORIA TIENE SELFSHIP.
FELIZ 14 DE FEBRERO, BYEEE
Con una lista demasiado específica de productos Osamu daba pasos perezosos alrededor de los pasillos del pequeño supermercado buscando la salsa de soya favorita de su madre. Encontró una botella bastante similar a la que había en casa pero la letra en la lista provocaba una razonable duda que le hacia desistir. Por otro lado como si no quisiera ser descubierto observaba discretamente el pasillo de los chocolates, pronto seria san valentín asi que las variedades aumentaron y algunos incluso disminuyeron ligeramente su valor. Pero a pesar de la fama de glotón de Osamu este no los observaba para si mismo, habia alguien especial a quien queria darle chocolates. Tras pensarlo demasiado tomo una caja de bombones aparentemente al azar junto a la salsa de soya que podría ser o no la de la lista y una bandeja de carne de res en oferta. Durante el camino de regreso escondió los chocolates en alguno de sus bolsillos.
— Estoy en casa — Anuncio mientras se sacaba los zapatos, no obtuvo respuesta. Suspiro con cierto alivió, guardo las compras y subió rápidamente a la habitación que compartía con Atsumu. Un dia cualquiera se lo encontraría profundamente dormido pero hoy no, Atsumu fue convocado a un entrenamiento especial para jovenes promesas del voley, regresaría dentro de dos días. Sin él se sentía un poco solo. Se dejo caer sobre la cama de Atsumu, hundió su cara en la almohada preguntándose como era posible que su olor le provocara tanto, ambos deberían de oler bastante similar, el mismo shampoo, el mismo jabón ¿Que lo hacia diferente? Ensimismado en estos pensamientos llego a dar un salto cuando la voz de su madre le hizo reaccionar. Se giro sobre su espalda con los ojos cerrados y saco la caja de chocolates de su bolsillo, la miro y un peso amargo se alojo sobre su pecho. ¿Por qué tenía que tener esta clase de sentimientos por Atsumu? daria cualquier cosa en el mundo para tener solo sentimientos normales hacia su hermano pero aqui otro año mas con unos chocolates escogidos cuidadosamente para él.
La primera vez que le dió chocolates a Tsumu fue por accidente; ambos tenian 13 años y Osamu era mucho mas popular que su gemelo asi que había recibido unos cuantos chocolates y era obvio que este estaba celoso por la atención. Lo que comenzó como unas cuantas burlas rápidamente se convirtió en una discusión feroz.en la que Osamu molestó le lanzo el chocolate que mas cerca tenia a la cabeza de Atsumu pero este lo atrapo eficazmente. — Samu idiota, no pienses que te lo regresare — Lo persiguió tratando de recuperarlo pero no logro atraparlo a tiempo, Atsumu se reía a carcajadas con la comisura de los labios manchadas y el corazón de Osamu latia fuerte mientras este se sentia perdido. Desde entonces cada san valentín ambos gemelos discuten lo suficiente como para terminar peleando; se gritan , se golpean, aveces se lanzan cosas y alli es donde Osamu toma la oportunidad de tomar el chocolate para lanzarlo a la cara del idiota de Tsumu quien sin sospecharlo se lo queda sin importarle que los recibidos de su club de fans no oficial serian ya demasiados.
Tras la cena Osamu habia regresado a su cuarto a estudiar. Realmente lo intento por alrededor de una hora pero no lograba concentrarse en lo mas minimo. Solo un suspiro frustrado mientras se estiraba, observo la cama de Atsumu y solo se recostó en ella. La noche previa al campamento escucho al idiota descuidado masturbarse. Le fue una verdadera tortura sentir el ligero temblor de la litera, oir su respiración agitada y lo mucho que se esforzaba en contener su voz. No poder hacer nada para ayudarlo o aliviar su propio deseo en ese instante lo volvió loco pero ahora se encuentra solo dentro de esa habitación. Cerro los ojos buscando relajarse mientras acaricia su media erección por sobre la ropa, suspira ansiosos recordando cada detalle, imaginando su expresión, tratando de adivinar como se acariciaba. — Tsumu... — Murmuró liberando su miembro de las capas de ropa que le apricionaban, rápidamente comenzó a acariciarse dejando escapar de entre sus labios pequeños suspiros. Inclinó la cabeza hacia un lado hundiendo la nariz entre las sábanas de Atsumu llenando sus pulmones de ese aroma que le hacia enloquecer. Gimió aumentando el ritmo de sus propias caricias, su miembro se agita y gotea ansioso por liberarse. Osamu no puede liberar su mente de los recuerdos de Atsumu saliendo de la ducha o cuando después de un partido las gotas de sudor recorriendo su piel. Jadeando y temblando Osamu llego al climax gimiendo el nombre de su hermano. Aun con la respiración agitada observo la mancha en su mano y los sentimientos de culpa llegaron nuevamente quitando de raiz el anhelo de ser correspondido para reemplazarlo por el deseó de tener tan solo sentimientos normales hacia su gemelo.
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Drables Miyacest
Fiksi PenggemarContenido variado en distintos universos y de pocas palabras Sobre una relación romántica entre Atsumu Miya y Osamu Miya. Favor de mantener discreción. ⚠️ Contenido sexual extre hermanos. ⚠️ Contenido romántico entre hermanos. Esto es una obra de F...