El futbol era su prioridad hasta que la conoció.
llegó decidido a enfocarse en su carrera pero no contaba con ¿enamorarse? de una chica y peor aún la nieta del presidente del equipo..
💌: Rodrygo Versión
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Rodrygo
Al finalizar el partido salimos directo a el vestuario, no pude meter gol pero si una asistencia para Ney.. me cambié lo mas rápido que pude, los chicos irían a festejar pero yo pasaría primero a invitar a Valen.
— Hijo ¿Que fue lo que pasó? —me pregunta mi madre apenas llegó y la miró con confusión—. Valen salió que acá con los ojos llorosos, ¿Que es lo que hiciste?
Cuando dijo eso me empezé a preocupar y rápidamente la llamó Pero su móvil me daba apagado.
— Disculpen que me meta Pero ella vio esto —dice la pelicastaña mientras me pasa su móvil con la noticia, rápidamente le devuelvo su móvil y puedo oír como mi mamá empieza a regañarme Pero no le di importancia.
Sali corriendo del estadio, conduci hasta el hotel no espere que el ascensor abriera sino que corrí por la escaleras, el cansancio que tenía habia desaparecido.
Cuando llegue abrí la puerta y me encuentro con la de el servicio limpiando la habitación.
— Disculpe joven la señorita ya abandonó la habitación —me dice ella.
— ¿No dijo donde se iba?
— No me lo dijo joven.. Pero escuché que estaba por tomar un vuelo salió hace 15 minutos —le agradezco y salgo nuevamente con prisa, tenía que llegar al aeropuerto lo más rápido posible.
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— ¿Dónde sale el avión con destino a España? ¿En qué puerta? —pregunto apenas llegó.
— en la puerta número 43..
Cuando llegue ví a valen a lo lejos, tenía unos lentes obscuros con la capucha puesta, estaba entrando al pasillo para abordar, intente entrar Pero el guardia no me dejó porque no tenía boleto, le grité Pero fue en vano ella no paró aunque si pareció escucharme.
Corrí nuevamente hacia la chica que me había dicho en qué puerta salía el vuelo.
— ¿A qué hora sale otro vuelo a España? —ella busca en su computadora y la impaciencia comenzaba a apoderarse de mí.
— El siguiente vuelo sale en dos horas —me parecía muy tarde Pero no tenía otra opción el avión de la selección salía mañana y la parada sería Londres, no podía perder más tiempo.
— Deme un boleto —le digo y ella niega.
— Ya no me quedan asientos..
— Señorita le pago lo que sea Pero necesito un asiento —ella parece entenderme y cancela el vuelo de otra persona para el siguiente dándole un asiento de primera clase.
— Aquí tiene —me pasa el boleto y yo le agradezco para luego volver a mi coche y dirigirme a mi hotel a empacar.
