ENTRE AMORES Y CAFÉ

YO NECESITABA UN VOCERO

Cuando tú leíste:

"Hola usted sabe que siempre podrá contar conmigo..."

Esto es algo de lo que yo he sentido y hubiera querido compartir...

Nunca comprendí cuando empezamos a cuidar tanto la forma para comunicarnos. Honestamente no supe en qué momento se te empezó a complicar buscarme, escribirme, preguntar por mí, si en algún tiempo eso era tan sencillo y natural.

Ahogué por tantos años estas líneas porque preferí creer que era mejor así.Finalmente me había empecinado porque mi vida funcionara sin tí, busqué como construirla con los muros más altos que ni yo pudiera trepar para llegar de nuevo a tí y ...¿Sabes? no pude estar más equivocada...¿Mi consuelo?...Tu también te equivocaste, tus predicciones sobre mí fallaron.

Hoy, a más de tres años de ese día me sigo preguntando ¿Qué te motivó a escribirme en aquel tiempo?

Me sé de memoria cada línea de aquel texto que te confieso nunca tuve el valor de borrar, al que he recurrido en mis días más dificiles, en las horas de mayor tentación, al que he querido encontrarle tantos significados, pensar que tiene algún mensaje entre líneas, pero sobre todo al que tantas veces quise reescribirle mi respuesta, decirte todo lo que sentí y pase al leerlo. Me gustaría explicarte que cuando llegó a mis manos,yo tenía mil ojos encima y no tuve ni un momento de privacidad, además moría de miedo.

Sin embargo, ha pasado tanto tiempo, tantas cosas que eso no cambiaría nada en nuestros rumbos. Cuando más decidida he estado a buscarte, el destino, la vida y tú, me recuerdan que lo que yo busco en tí, tu siempre lo has tenido en alguien más y que muy por el contrario de lo que me gustaría que sucediera, al escribirte terminaría confirmando lo que siempre he sabido... nunca nos quisimos igual o peor aún que sea definitivo aquello que tanta tristeza me causa... saberme irrelevante para ti.

En mis momentos más sensatos regreso a ese mensaje y encuentro que aunque yo hubiera dado todo por ver un ¡Quédate conmigo! Huyamos y seamos felices (culpa a Disney y a las novelas de televisa de mi estúpido mundo de caramelo) No existe más mensaje que: cómo mi AMISTAD te deseo lo mejor... y por favor no me malentiendas te quiero mucho y aunque tengo recuerdos tan bellos y divertidos de nuestra amistad, tengo la edad suficiente para admitir que nunca pude verte solo así, intenté por muchos años quedarme en un hemisferio pero no lo logré y esa lucha solo se volvió mi bola de nieve.Lo intenté hasta el momento en que me descubrí esperando que te dieras cuenta de que lo que te podía ofrecer valía la pena y aquel pensamiento me dio tanta rabia, tristeza y vergüenza que no me quedó de otra que reconocer que mientras más transcurría el tiempo menos cerca estaba de esa posibilidad y más lejos estaba de serte útil como amiga y como sabiamente alguien escribió "Decidí alejarme, aceptaste mi ausencia. Eso solo demuestra que tú jamás me amaste..."
Traté de mentalizarme para recordar que no importaba que tan profundo fuera mi amor por ti, nunca sería suficiente para que algo real y público prosperara entre nosotros. Fue así que por primera vez en muchos años dejé los sueños y las ilusiones sobre nosotros hasta el frabulloso día en qué decidiste hacer tu aparición.

Desde entonces han ocurrido otras tantas cosas que me llenan de interrogantes. Ha habido infinidad de vivencias que he querido compartirte, no te imaginas los kilómetros de palabras que he borrado y las innumerables veces que me he quedado fijamente mirando tu conversación, la cantidad de días que la ansiedad se desborda por quererte escribir, más siempre me detiene ver el rumbo que han tomado nuestras vidas y el miedo a que ese texto tenga un efecto mariposa en ellas.

Tengo tres años viviendo eternamente en conflicto con algo que creí haber entendido y aceptado. Muchas veces pienso que lo que me hace construir castillos en el aire son mis ganas de compartir contigo y cuando estoy en paz con esa explicación encuentras la forma de hacerte presente, apareces de alguna manera en mi vida ya sea diciéndome que soy una excelente escritora, por medio de alguien que me pregunta por ti o me cuenta novedades de tu vida sin que yo lo pida.

Y así sigo en el eterno ciclo donde intento buscarte y cuando estoy a nada de hacerlo sucede algo que me hace ver que esa "señal" viene solo de mis ganas de conectar contigo, como aquella llamada jamás devuelta, el mensaje sin responder o el recuerdo de la última vez que casi te pisamos mi cría y yo y tu ni siquiera dijiste hola. En días así creo que la decisión más acertada es aprender a vivir con el recuerdo de lo que yo sentí y la amistad que por mi exceso de imaginación y la falta de un vocero...Perdí.

P.D. Te la lavas