Hace mucho, mucho tiempo, en un bosque muy lejano, vivía una manada de lobos. Pero no eran lobos comunes y corrientes, ya que llevaban siglos transformándose en hombres.
Con el paso del tiempo, se habían adaptado a la vida de los humanos, reuniéndose en clanes y formando pueblos que poseían todas las comodidades de una ciudad humana, donde las grandes familias se unían unas a otras, aumentando su fuerza. Eran bellos y poderosos, conteniendo en su interior tanto la fuerza de su lado animal, como la inteligencia de su lado humano. Su taza de natalidad era alta y pronto se extendieron por todo lugar y era, llegando hasta la época moderna.
Durante la luna llena, la energía de cada lobo aumentaba al doble, ya que no todos tenían el mismo poder: algunos eran más rápidos, otros más fuertes, otros mejores cazadores, otros tenían buena percepción sensorial.
Y solo había algo a lo que los lobos temían: Sus enemigos mortales, los vampiros.
Los vampiros eran casi tan antiguos como los lobos, nacidos según las leyendas de la más
profunda oscuridad. Nadie sabía quien había sido el primer vampiro, pero sus genes pasaron de una generación a otra, durmiendo en algunos humanos para ser despertados al recibir el mordisco de uno de los suyos. El virus contenido aparecía entonces, y perdían sus recuerdos humanos para transformarse en caminantes nocturnos. Podían comer comida normal, pero la sangre les daba fuerza y poderes especiales.La luz también les afectaba, ya que el virus activo causaba fotofobia, y podían sufrir ceguera o graves quemaduras, pero sanaban con rapidez. Se reunían en castas divididas por su ascendencia: los vampiros nacidos de
vampiros eran la élite, viviendo con la opulencia de la nobleza en ricas mansiones, mientras que los humanos convertidos por la activación del virus eran de baja clase, transformándose en sus sirvientes y vasallos.Ambas razas eran más fuertes, más ágiles y vivían mucho más tiempo que los humanos
promedio. Por eso quizás, y por envidia, estos siempre les habían temido y perseguido,
aunque con poco éxito.En el pasado tanto lobos como vampiros se habían odiado a muerte, dándose caza unos a otros sin descanso, hasta que la peligrosa expansión de los humanos en sus territorios, la mejora de sus armas con los avances de la tecnología y el aumento de su maldad, les hizo fijar una tregua. Para ello, los cabezas de ambos grupos fijaron una vez al año una semana en el calendario lunar, durante la cual se llevaba a cabo una gran fiesta, en
la que tanto lobos como vampiros eran bienvenidos en territorio contrario, para durante 7 días disfrutar de la compañía de unos y otros.Y si había suerte, encontrar pareja en el bando enemigo. Esperaban que la unión de ambos grupos creara una raza más fuerte y unida contra la amenaza que representaban los humanos.
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El barman y el pintor/ PavelPooh
Historia Corta¿Será posible una relación romántica entre un lobo y un vampiro? ¿Podrán encontrar el amor uno en el otro? ¿Encontrar lo que cada uno busca? Una historia en donde el solitario lobo Pavel conoce al desamparado Vampiro Pooh, será que Pavel el que solo...