Te encuentras en el mundo de los hechiceros de jujutsu y las maldiciones, haciendo tu mejor esfuerzo para mejorar tanto tú misma como tu técnica de onda de choque, todo por tu objetivo de hacer del mundo un lugar mejor.
Esta historia seguirá la tram...
⚠️𝗔𝗱𝘃𝗲𝗿𝘁𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗲𝗻𝗶𝗱𝗼: Gore. Si te sientes incómodo(a) con este tema, no te preocupes, daré un breve resumen al final de este capítulo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Inumaki había alcanzado su límite máximo. Se agarraba las rodillas y su lengua sobresalía de su boca. Con los ojos muy abiertos y las pupilas dilatadas, ya había terminado.
Todavía estabas mareada, pero concentraste tu onda de choque en tu mano de todos modos, cerrándola en un puño. Sin saber que Inumaki había alcanzado su límite.
Saltando mientras seguías corriendo, moviste tu brazo hacia los ojos en forma de rama de Hanami. Justo cuando golpeaste uno de sus ojos, escuchaste algo romperse.
Era el ojo de raíz de la maldición y sentiste que finalmente lograbas algo en esta pelea. Pero también escuchaste algo romperse junto a ti.
Una parte del ojo en forma de rama de Hanami cayó al suelo y miraste hacia atrás mientras caías de nuevo de tu salto. Viste al nue de Megumi siendo atravesado con un brazo de la maldición frente a ti.
La sangre salpicaba por todas partes, en tu cara y uniforme. Miraste con ojos muy abiertos al nue de Megumi. '¿Hanami está moviéndose? Entonces eso significa que-' querías mirar hacia atrás a Inumaki para ver si estaba bien.
Pero antes de que pudieras siquiera girarte, sentiste algo hacer contacto con tu estómago.
Girando la cabeza para mirar tu estómago, ya era demasiado tarde. Sintiendo un dolor punzante en tu estómago, esperabas lo peor.
No te atreviste a mirar, cerraste los ojos instantáneamente y levantaste la cabeza por el inmenso dolor que sentías. Las lágrimas amenazaban con caer de tus ojos, pero hacías todo lo posible para evitarlo.
Mordiendo tu labio inferior para evitar cualquier gemido de dolor. Fruncías el ceño mientras apretabas los dientes también.
Después de un rato de quedarte quieta, sentiste un líquido fluir desde tu estómago hasta tus piernas. Finalmente tuviste el coraje de mirar y viste que toda tu parte inferior del cuerpo estaba cubierta de sangre.
Sin saber si toda la sangre era tuya, ya que el nue de Megumi también te había manchado. Viste un detalle crucial para averiguar de quién era realmente la sangre.
Había algo de color grisáceo sobresaliendo del frente de tu estómago e inspeccionaste, tratando de no vomitar en el acto.
Tenía un tono blanco roto con líneas negras, justo como Hanami. Miraste de dónde venía y viste que la cosa en tu estómago estaba conectada a la propia maldición.
No querías darte cuenta, abriste mucho los ojos y miraste a la maldición frente a ti que había metido su brazo directamente en tu cuerpo.
La sangre cálida del nue aún estaba rodando por tu cara y uniforme. La maldición te miró sorprendida, "¡Oh, aún estás viva?" dijo y penetro aún más en tu estómago.
Podías sentir tus entrañas y hígado moverse ligeramente en tu cuerpo y te sentía repugnante. Ahora había aún más sangre cayendo del agujero en tu estómago.
Sin poder soportarlo más, soltaste un grito ensordecedor por el dolor. Las lágrimas finalmente escapaban de tus ojos.
Los tres que aún estaban de pie frente a Hanami a una gran distancia ahora se dieron cuenta de que algo estaba mal, te enfrentaste a Hanami de tal manera que no pudieran ver lo que estaba pasando. Solo podían ver tu espalda.
Después de soltar tu grito, escuchaste pasos apresurados acercándose a ti desde atrás, pero aún estaban lejos.
Te dejaste caer y agarraste el brazo de Hanami con ambas manos, toda la pérdida de sangre hizo que tu fuerza disminuyera mucho, te sentías más mareada y aturdida también.
Con toda tu fuerza restante, intentaste empujar el brazo de la maldición fuera de tu estómago. Pero Hanami no cedía. Cuando sentiste que el brazo casi salía de tu cuerpo, sentiste algo moverse dentro de ti también.
La maldición estaba agarrando algo dentro de tu cuerpo, lo que significaba que si lograbas sacar su brazo, también se llevaría algo de tu interior. Probablemente un órgano.
Miraste hacia arriba aterrorizada a la maldición mientras sentías que Hanami apretaba uno de tus órganos, pero lograste contener las ganas de vomitar.
Viste a Kamo acercándose a ti desde el lado, analizó inmediatamente la situación y dedujo que te tenían como rehén.
Gritó al ver la escena de tu estómago siendo penetrado. "¡Y/n?!" Megumi e Inumaki también escucharon el grito y quisieron ayudar también.
Kamo les advirtió: "¡No se acerquen más!" Y sin perder un solo segundo, ya había extendido ambos brazos y los había juntado. Apuntó sus brazos a Hanami y dijo: "convergencia."
El mismo método fuerte que antes, una raya de sangre salió disparada de las puntas de sus dedos directamente hacia el brazo inferior de Hanami.
Adivinaste lo que Kamo estaba haciendo y concentraste tu onda de choque en tu mano, esta vez sin cerrar el puño.
Justo cuando la sangre impactó en el brazo de la maldición, tú cortaste el brazo con tu onda de choque. Era tu último disparo antes de llegar a tu límite también.
Sentiste una ráfaga de viento proveniente de donde las dos técnicas habían chocado con el brazo de Hanami, lo viste de cerca y viste que ahora había una gran cicatriz en el brazo de Hanami.
Sin darle tiempo a la maldición a regenerarse, metiste tu mano en la cicatriz y la agarraste fuertemente por el costado. Sin tiempo que perder, arrancaste la parte inferior del brazo de Hanami en dos.
Ahora finalmente libre, la mano de Hanami había dejado de apretar tus órganos con fuerza y sacaste el brazo cuidadosamente pero con facilidad de tu cuerpo.
No querías tener nada que ver con ese brazo y lo lanzaste enojada sobre el tejado hacia Hanami. Entró en contacto con el rostro de Hanami y rápidamente retrocediste hacia donde estaban Megumi e Inumaki.
Mientras te agarrabas el estómago con un brazo para evitar que se derramara más sangre, te acercaste. Al mirar más de cerca, viste a Inumaki furioso de ira.
Estaba apretando los dientes y le caía sangre de la boca por el intento anterior de usar su técnica pero falló.
Pequeñas gotas de sudor rodaban por su rostro y sus pupilas dilatadas estaban enfocadas en Hanami y solo en Hanami.
「 Resumen: fuiste atravesada por un brazo de Hanami y ahora Inumaki está extremadamente enojado con la maldición. 」
