𝙏𝙧𝙞𝙜𝙜𝙚𝙧.. | [𝘏𝘠𝘜𝘕𝘐𝘕]

𝙏𝙤𝙙𝙖𝙮 𝙝𝙚'𝙡𝙡 𝙗𝙚 𝙢𝙮 𝙙𝙞𝙣𝙣𝙚𝙧.

⚠️ Smut, dirty talk, rough sex, degradation, over stimulation.

La necesidad de ambos ya no tenía tiempo de espera, estaba bastante claro ahora.

En el segundo uno de haber llegado al elegante departamento de Hyunjin, ambos no evitaron lanzarse a besarse con tanta necesidad, con tanta hambre. El mayor mantenía el cuerpo de Yang empotrado contra la pared quedando totalmente acorralado, una de sus manos tomando el cuello del menor con posesividad mientras la otra apretaba su trasero con morbo, sintiéndose espléndido pues los jadeos ahogados de Jeongin resonaban contra su boca.
Mientras tanto, las manos del castaño se mantenían acariciando con ansiedad el pecho de Hwang, pues el toque de este le hacía querer derretirse del placer ahí mismo. Intentó empujar el fuerte cuerpo del mayor para separarlo levemente de su boca, pero la fuerte mordida en su belfo inferior por parte de este le hizo detenerse.

—Eres..., exquisito.—Habló el pelo negro sobre su boca, refiriéndose al sabor de la poca sangre que había derramado sobre el fogoso beso.

—Idiota...

Hwang separó su boca de la contraria, sonriendo con sugerencia.—Te sugiero que me tengas respeto por el resto de la noche y seas obediente, hermoso.

La curiosidad nació en el pensamiento del castaño, en sus ojos apareciendo un extraño brillo que llamó la atención del contrario.

—Qué tanto te estás conteniendo?—Insinuó, sus manos ocupándose de retirar su saco cuidadosamente, posteriormente dirigiéndose a los botones de su camisa.—No creas que acepté venir contigo para que solamente me trates como si estuviese hecho de porcelana.

Continuó desabrochando los botones de la prenda, notando poco a poco el marcado y atractivo abdomen del mayor, su mirada levantándose hasta encontrarse con la del mayor, quien mantenía su mirada clavada en él.
El semblante confiado de Jeongin cambió drásticamente a uno de sorpresa cuando el mayor detuvo su acción de forma brusca, la fuerte mano tomando su pequeña muñeca, para acto seguido tirar de esta para arrastrándolo hasta la habitación, llegando a la grande cama, donde le tumbó encima tan rudamente que le hizo rebotar varias veces, sacándole un jadeo de sorpresa. El rostro serio de Hwang le indicaba que sus palabras habían hecho un gran efecto que le provocó actuar de aquella manera, lo cual para su sorpresa no le disgustó, siendo completamente lo contrario.

—Ponte de espaldas y desnúdate.

¿Había escuchado bien?

—¿Por qué de...?

—¿Acaso te ordené que hablaras? Solo obedece con la boca cerrada.

Bien...

El cuerpo del castaño tembló, había imaginado que haría esa clase de cosas, había supuesto que sabria manejarlo, más sin embargo la fuerte mirada además de el semblante firme y mandatario que tenía Hyunjin le hacía la tarea difícil. Se puso de rodillas sobre el colchón y sus manos temblorosas se dirigieron a su playera, la cual fué la primera prenda que decidió retirar, posteriormente haciendo lo mismo con su calzado, después sus pantalones para finalmente, terminar con su ropa interior; por otro lado la penetrante y hambrienta mirada de Hyunjin no pasaba desapercibida de su vista, lo cual le ponía de aún más nervios, además de timido, pues jamás en su poco tiempo de noviazgo se le había mostrado sin usar absolutamente nada, ni mucho menos siendo un chico tan sumiso.
Mantuvo la mirada en el rostro del peli negro, quien con una seña indicó lo último que tenía que hacer, darle la espalda. Obediente siguió la petición de Hwang, girando su cuerpo en dirección a la cabecera de la cama, donde desde sus espaldas escuchó un lascivo suspiro.