Toge Inumaki ᴊᴜᴊᴜᴛꜱᴜ ᴋᴀɪꜱᴇɴ ©

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Volaste en el aire durante sólidos 10 minutos. Tu sensei era rápido y no te diste cuenta, había atravesado el cielo sin ningún problema. Gojo aterrizó sobre ambos pies en el vasto suelo.

Habló, mirándote mientras aún estabas en sus brazos, "¿puedes ponerte de pie?" preguntó con preocupación en su voz. Asentiste con la cabeza y te dejó en el suelo para que te sostuvieras por ti misma.

No tenías ganas de hablar en absoluto. A nadie en realidad. Los dos ahora estaban de pie en la entrada de la técnica de jujutsu. La sangre en tu ropa se había secado para entonces, creando manchas rojas. Todavía había algunas gotas de sangre goteando lentamente desde tu barbilla y cabello.

Este fue el resultado de tus sentimientos que te superaron, era demasiado para ti en ese momento. Te sentiste tan enferma por lo que hiciste hace menos de 20 minutos.

Los dos no caminaron, miraste hacia el cielo y Gojo esperó a que caminaras.

El cielo era de un rosa claro con débiles destellos de azul y blanco mezclados. Ya era alrededor de las 5 p. m. Las muchas nubes pasaban rápido. Viste más adelante algunas nubes gris oscuro.

'Va a llover más tarde entonces.' razonaste contigo misma. Tenías los ojos entrecerrados, estabas cansada de todo a tu alrededor. Solo querías dormir.

Cerrando los ojos, respiraste profundamente y te quedaste así por un tiempo. Luego abriste lentamente los ojos y miraste directamente hacia la entrada de Jujutsu Tech.

Gojo observaba cada movimiento tuyo desde tu lado. Tus piernas comenzaron a moverse por sí solas a un ritmo regular. Tu sensei te seguía rápidamente sin decir nada.

Al pasar la entrada, no viste a nadie en particular. Lo cual era genial, no querías hablar con nadie. No querías contarles cómo acababas de asesinar a alguien hace menos de 20 minutos.

Alegrándote de que fuera cerca de la hora de la cena, asumiste que todos estaban en la sala común o algo así. No estarían afuera ahora, y tus pensamientos eran correctos.

Pasaste los campos de entrenamiento, Gojo siguiéndote en silencio mientras regresabas a la escuela. Había algunos equipos de entrenamiento de Maki todavía tirados allí, asumiste que tomó un breve descanso.

Después de pasar completamente los campos, finalmente te encontraste con la única puerta por la que saliste furtivamente la noche anterior.

Sin dudarlo, extendiste el brazo para agarrar la puerta, abriéndola en un movimiento rápido que hizo que Gojo se estremeciera ligeramente, solo querías ir a la cama y tener un descanso normal lo antes posible. Entraste sin mirar atrás.

Pasaste la sala común, tenías que ser silencioso o te oirían y potencialmente querrían verte también. Afortunadamente, la puerta estaba cerrada, así que pudiste pasar sin problemas.

Gojo habló desde atrás, "Y/N, te contaré todo mañana, descansa primero." dijo, pero ya estabas caminando, camino a las escaleras que te llevarían a tu dormitorio.

Todo iba normal, hasta que escuchaste la puerta del baño común abrirse, que estaba ubicado frente a las escaleras.

Te detuviste en seco y esperaste a ver quién salía de ella. Al ver la silueta de tu compañero masculino, te acercaste rápidamente a él, parecía que no te veía aún mientras cerraba la puerta con la espalda hacia ti.

Se dio la vuelta y sus ojos se abrieron mucho ante lo que vio. Yuuji quería gritar, preguntarte numerosas cosas, quería decirte lo contento que estaba de que estuvieras de vuelta. Pero luego, el rostro del chico de pelo rosa cambió en un instante.

Yuuji notó tu ropa manchada de sangre seca y vio algunas pequeñas rayas de sangre seca bajando por tu rostro. Su sonrisa vaciló y quiso hablar.