Durante la conmoción, algunos de los meteoros empezaron a adentrarse en la órbita de varios planetas. 4 de esos meteoros entraron en la órbita de un planeta conocido como Tierra. Ahí vivía un joven lagarto, conocido como Cocodrilo. El vivía tranquilamente con su familia, hasta que llegó "el día del accidente".
Cocodrilo: ¡Hasta pronto Madre! ¡Iré a buscar comida antes de que regrese Papá.
Entonces Cocodrilo se dirigió en dirección al norte, donde se hallaba el mejor rió del bosque. Para llegar hacia falta cruzar un buen trecho de la selva y rodear una montaña. Pero esto no suponía ningún problema para Cocodrilo, ya que el conoce ese lugar, como la palma de su mano.
De repente, un extraño haz de luz paso cerca de la cabeza de Cocodrilo.
Cocodrilo: ¿Eh, que ha sido eso? Parecía una estrella fugaz pero, ¿en pleno día?
Cocodrilo entonces se propuso seguir la estela de luz para darse cuenta que lo que sea esa luz, había impacto en la cima de la montaña.Al llegar a la cima, se dio cuenta que no se trataba de una estrella, mas bien era una especie de roca color grisácea con partes puntiagudas metalizadas que sobresalían de la roca.
Cocodrilo: ¿Hm? Pero que cosa mas rara, probablemente sera peligrosa, así que mejor se la llevo a mama.
Justo cuando Cocodrilo extendió su mano, de la roca comenzó a brotar unas extrañas luces de colores blancos y plateados, los cuales destellaron directamente en Cocodrilo.
Cocodrilo: ¡Ah! ¿Pero que ocurre?
De pronto las luces cesaron, y la roca tomo un color apagado, casi como negro.
Cocodrilo: Agh...me siento extraño...como mareado.
En lo que Cocodrilo terminaba de decir aquella frase, cayo de espaldas en el suelo, quedando inconsciente en la cima de aquella montaña.
