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Un Jaguar F-Type rojo se detuvo enfrente de la casa de los Toretto, de la puerta del piloto salió una chica de cabellos castaños, al ver el hogar ella sonrió, estar allí le traía hermosos recuerdos

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Un Jaguar F-Type rojo se detuvo enfrente de la casa de los Toretto, de la puerta del piloto salió una chica de cabellos castaños, al ver el hogar ella sonrió, estar allí le traía hermosos recuerdos.

Caminó hasta la entrada y tocó el timbre en espera de que alguien abriera, era muy temprano todavía, estaba segura de que la única despierta quizás sería su hermana, y no falló, pues fue esta la que le abrió.

—¿Ali? Te desapareces mucho, hermana — la mayor abrazó a la menor y la hizo pasar.

—El trabajo es duro, en menos de dos semanas he viajado como a cinco países, mi jefe no conoce la palabra "descanso" — informó ella causando una sonrisa divertida en la contraria.

—Mejor para ti, ese trabajo te viene bien, es peligroso, pero sé que lo amas — la más joven asintió — considero que debes decirle a Dom, no se me ocurre que decirle cuando pregunta por ti porque no le contestas a sus llamadas.

Ambas iban platicando mientras iban a dirección de la cocina, sabían que al ser muy temprano los hombres aún dormían, pero pronto serían despertados para poder hacer sus cosas, en especial para llevar al pequeño Jack al preescolar.

—De hecho, planeo hacerlo hoy, digamos que Han se enteró y también me lo aconsejó, aparte de que hay unos asuntos que también tengo que informarle — miró nerviosa sus manos.

—Si quieres lo despierto ahorita — la menor negó.

—Quiero que descanse, me mandó el mensaje muy tarde, supongo que le costó dormir tras lo de Letty — Mia asintió de acuerdo, su hermano amaba tanto a la mujer que le dolía no tenerla, pero era tan bueno que comprendía la situación — Vamos, hagamos un desayuno especial, después de mucho tiempo, los Toretto desayunaremos juntos — miró la estufa con determinación.

—Solo corta los ingredientes, y mira como lo hago, hermanita, para ver si aprendes — se burló, Alisson la miró con reproche.

—Vivo sola, obviamente se cocinar, solo quemé la comida como dos veces — se defendió.

—Al mes — se rió la mayor sacando lo que iba a necesitar para el desayuno.

La menor de las Toretto no se defendió, no tenía como, siempre le había costado la cocina, pero se obligó a aprender un poco cuando decidió tener su independencia, y gracias a ello era la burla de sus hermanos, pues estos preferían cocinar a arriesgar el estado de la cocina.

Entre ambas cocinaron juntas como en los viejos tiempos, al estar sumidas en su trabajo y en las risas que había debido a los recuerdos de su infancia no se dieron cuenta que el esposo de la mayor, y el hermano de ambas las observaban con una sonrisa divertida.

Para ambos era como viajar al pasado, Brian recordaba que cuando recién conocía a las chicas veía cuan unidas eran, no se separaban por nada, solo cuando tenía sus citas con Mia, o cuando hacía sus carreras la menor, pero siempre vio la complicidad que se tenían, la una era la confidente de la otra.

𝐃𝐄𝐒𝐈𝐑𝐄 » [𝐃𝐞𝐜𝐤𝐚𝐫𝐝 𝐒𝐡𝐚𝐰] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora