Burlesque KIVI (+18)

Folclórica

La pelirroja se movía encima del escenario de manera poderosa y a la vez ligera, pero con la torpeza de alguien sin experiencia. Interpretaba el famoso número "But I Am Good Girl", típico de Burlesque, mientras la pelinegra la observaba con la misma admiración y brillo en los ojos que recordaba haber sentido la primera vez que presenció un espectáculo como aquel.

Cuando estaba por acabar el número y empezó a hacer los gemidos propios del final del número, a la chica de debajo del escenario se le removió algo por dentro, algo parecido a un fuego inapagable. Pero además de ese sentimiento, hubo algo más que le inundó, una envidia extraña que nunca había sentido en el ámbito laboral, ya que siempre se había considerado la mejor en lo que hacía.

Tuvo la impresión que aquella pelirroja había aparecido en su vida para quitarle el protagonismo y eso, a la vez que le asustaba, le provocaba demasiado. Sentía pasión por primera vez en mucho tiempo y fue en ese instante que una llama difícil de describir se le encendió por dentro.

Pov Violeta

Cuando acabé ese número que tantas veces había visto hacer a esa chica con la que ayer me había fumado un cigarro, escuché unos débiles aplausos debajo del escenario, los cuales provenían de la mujer y el hombre que me habían presentado como Noemí y Manu. Estos expresaban una aprobación que me llenaba de satisfacción, ya que de ellos dependía mi trabajo. Pero los aplausos que realmente me hubieran llenado de orgullo habrían sido los de Chiara, quien, bajo mi decepción, no me estaba ni mirando debido a que estaba hablando con una pelirroja de notorios rasgos soviéticos.

Pensé que no le había prestado atención durante todo el espectáculo por lo concentrada que me encontraba afinando cada nota y que, tonta de mí, había asumido que tendría su mirada pegada a mis movimientos. Me di cuenta de que llevaba tanto tiempo admirándola que había asumido ingenuamente que ella iba a sentir lo mismo por mí.

- Muy bien chica. ¿Como decías que te llamabas? - Dijo Noemí felicitándome mientras me sacaba de mis oscuros pensamientos.

- Me llamo Violeta. - Anuncié con seguridad mientras llegaba a la conclusión que era el mejor momento para venderme - Y creo que estoy completamente capacitada para trabajar en vuestro bar de espectáculo. Estoy segura de que con práctica podré llegar a ser una de vuestras mejores bailarinas.

- De eso estoy segura- Rio Noemí con excesiva ironía en la voz. - Tú que opinas, Manu?

Observé como ese extraño señor hacía una extraña mueca y asentía. Interpreté lo que quería decir y supe que estaba dentro. Solté un chillido de la emoción, bajé del escenario y abracé a mis dos nuevos jefes esperando a que la misteriosa chica viniera a felicitarme. Pero bajo mi decepción, cuando pasé mi vista por el local, ella había desaparecido. En cambio, vi las caras de mis nuevas compañeras que me felicitaban con un tono de voz ligeramente venenoso y una mirada de desconfianza. Entendí que el respeto en ese local iba a tener que ganármelo.

Pov Chiara

- ¿Que te ha parecido la chica nueva? - Le pregunté a Ruslana, impaciente por saber su opinión.

Estábamos en el camerino que ambas compartíamos con cinco chicas más, maquillándonos para la función de esa misma noche. Todavía faltaban horas para el espectáculo, pero la preparación era indispensable para garantizar la calidad de este.

- Bueno, Chiara... Me han dicho que tú las has recomendado... - Dijo Ruslana mientras bajaba su brocha de maquillaje y me miraba.

- ¿Sí, y? - Dije yo haciéndome la tonta, sin mirarle a la cara y fingiendo distracción. Lo dije como si no supiera de qué rollo iba a ir la conversación.