La música estaba a todo volumen en el pequeño salón de Ruslana mientras Violeta observaba como Chiara bailaba desde lo lejos. Las copas no le habían subido lo suficiente y la verdad que en el punto en el que estaban, no sabía si era lo correcto acercarse y bailar con ella. Pegó el último trago a la copa y pensó: "Fuck it", la tengo loca, no me va a apartar.
Pov Violeta
Me acerqué a ella por detrás y empecé a seguir su movimiento de cadera mientras ella se reía por la situación. Al principio, no me atreví a tocarla con las manos, pero cuando noté como ella pasaba sus manos por mis muslos para que me acercase más a ella, no lo dudé y la cogí de la cadera, ella todavía dándome la espalda. En ese momento, con todo el alcohol inundando mis sentidos, nada importaba, así que empecé a desplazar mis manos hacia su abdomen desnudo (llevaba un top que no la tapaba especialmente) y noté su piel bajo mis dedos, igual de suave que la recordaba. Al notarlo, ella subió su cabeza y la llevó hacia mi hombro de manera que podía sentir su respiración fría en mi cuello debido a lo sudada que estaba. Suspiré y sentí toda mi piel de gallina, a lo que no podía ver su cara, pero suponía que estaba sonriendo.
Ella pegó su culo todavía más hacía mi cadera y yo, sabiendo que lo hacía para tentarme, corté el contacto de la misma manera en que lo había empezado. De esa manera, toda la tensión que habíamos creado no destruyó, sino que se convirtió en un desafío en que la ganadora iba a ser la más cabrona de las dos.
- Vamos a animar esto. ¿Quién juega a verdad o reto? - Gritó Denna en un intento de animar la fiesta. Al menos para algunas ya estaba más que animada.
Todos nos pusimos de acuerdo y juntamente con unos amigos que habíamos invitado (entre ellos Martin y Paul, los chicos que parecían los camellos de Chiara y de muchas otras bailarinas), empezamos el juego.
Entre algunos retos, algunos se tuvieron que besar, algunos otros tuvieron que desnudarse y otros hacer el pino mientras se bebían un chupito.
- Chiara. - Llamó Ruslana - Reto o verdad?
- Verdad. - Suponía que no se fiaba ni un pelo de ella
- ¿Te atrae alguien de este círculo? - Dijo desafiándola con la mirada.
- Más de una. - Le respondió la pelinegra devolviéndole la mirada mientras el círculo se reía. "Más de una?" No sabía a qué jugaba, pero la verdad la confesión no me había gustado.
- Violeta. - Era el turno de Chiara. - ¿Verdad o reto?
-Reto. - Contesté de forma desafiante.
- Te reto a besar a quien te guste más de este círculo. - Me clavó la mirada y se mordió el labio - Puedes beber si te niegas.
Podría haber bebido, habría sido lo más fácil, en cambio, debido a todo el alcohol y el poquito rencor que me quedaba hacía Chiara, supe perfectamente qué hacer. Me acerqué hacía Ruslana, busqué la confirmación en sus ojos y cuando vi el brillo divertido que tenía en ellos me lancé y la besé. Ella sentada acariciando mi cuello y yo apoyada en su pierna, sentí como nuestros labios chispeaban uno debajo del otro. Unos segundos después me separé de ella y nos sonreímos divertidas, sabíamos que nos atraíamos mutuamente, pero como el corazón de ambas iba hacia otro lado, éramos solo amigas. Amigas que se atraen, pero nunca llegaran a nada.
Cuando volví a mi sitio, Chiara me miraba con una media sonrisa. Pero lo que más me llamó la atención de su expresión no fue eso, sino la mirada cargada de deseo que me dirigía. Me perturbó ligeramente, ya que, si había besado a Ruslana había sido para ponerla celosa, no para calentarla más de lo que estaba.
Estuvimos un rato más jugando hasta que nos cansamos y volvimos a la música, ahora mucho más animados que antes. Prácticamente se olían las hormonas flotando en el ambiente debido a lo caliente que estaba la casa.
- Vio, te vienes a la habitación? - Me preguntó Chiara y supuse que se refería a la de Ruslana. - Vamos a fumar un rato. - Volví a suponer que con fumar no se refería a tabaco. No me molestaba que se drogara, pero tampoco era mi rollo. Al mismo tiempo, la imagen de ella envuelta en ese humo hacía que me imaginase algo bastante sensual.
- Claro. - Me dio la mano y ya la empecé a desear mientras me arrastraba por ese pequeño pasillo y entrábamos en la habitación.
Dentro de la habitación había una bailarina tirada en el suelo, muy arrimada a un chico, y Ruslana, la cual ya tenía un porro encendido entre sus dedos.
- Hombre! ¡La parejita! - Dijo Ruslana al vernos entrar haciendo referencia a nuestras manos agarradas. La pareja nos vio y se rio. Mientras, la chica le quitaba el porro a Ruslana y le ofrecía a su chico directamente de su mano. La verdad que la imagen de ellos dos de esa manera, más toda la ambientación de ese lugar, hacía del lugar un escenario muy erótico. Y no nos olvidemos de mis dos chicas, Ruslana y Chiara, a las cuales no podía ver con mejores ojos en ese momento.
- Carla, no seas egoísta que tenemos invitadas. - La bailarina pasó el cigarro a Chiara, quien se tumbó en el sofá. Después de dar una lenta calada que prácticamente presencié en cámara lenta, sacó el humo golpeándome directamente en la cara. Me senté al lado de ella y me acurruqué en su pecho mientras notaba su brazo abrazarme por detrás.
Di una calada al cigarro y de repente noté todos mis sentidos saturados, miré a Chiara y pensé que no podía estar más guapa en ese momento, con toda la luz roja del lugar saturándole la piel. Pero había un problema, ella no me estaba mirando a mí, estaba mirando a Ruslana quien de repente empezó a aproximarse a nosotras con una mirada feroz. Yo estaba en otro mundo, ya que dudaba que lo que acabase de fumar fuera solo hierba, así que simplemente me limité a observar como de repente, Ruslana cogía a Chiara por el cuello y empezaba a besarla salvajemente.
Me aparté del pecho de Chiara decidida a abandonar la situación, pero Chiara, al notarlo, se apartó de los labios de la pelirroja y me puso una mano en el muslo, impidiéndome que me fuera. El corazón se me puso a mil por hora porque lo sensible que estaba en ese momento a cualquier contacto no era normal. Era como si cualquier caricia me provocase un placer sobrenatural sobre cada poro de mi piel. Así que no me fui, sino que me lancé encima de ella para besarla de forma húmeda, deseándola mucho más que cualquier vez que la pudiera haber deseado. Y cuando me acordé de la presencia de Ruslana, me aparté de Chiara para invitar a la otra cogiéndola de la cintura y aproximándola a mis labios. La besé mientras notaba estímulos por todas partes; por una parte, estaba Ruslana, quien no pude evitar pensar lo diferente que era su forma de besar, tal vez más salvaje pero menos pasional, y por otra estaba la mirada de Chiara, la cual sentía penetrante encima de nosotras.
La pareja ya se había ido y yo, con Ruslana en mi cuello y Chiara ya casi habiéndome sacado el vestido, empezaba a no poder diferenciar el tacto de cada chica encima de mí. Parecía que las tres nos habíamos fusionado en una y así fue como esa noche, que parecía ya haberse acabado se acabó alargando de la manera más intensa posible.
Holaaa🤗le he puesto art deco al capitulo en honor al tik tok de violeta aprovechando que estoy poniendo nombres de canciones de lana del rayy
aviso que en el proximo capitulo se viene fantasia y que faltan ya pocos caps para acabar el fic. espero que lo disfrueis guapas!!!!!!
by the way no quiero que os penseis que este ultimo lio es porque si, prometo que tendra una explicacion.
thankssss for alll💕💕
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Burlesque KIVI (+18)
Fiksi PenggemarDonde Chiara es una bailarina de burdel super sexy de la que Violeta se enamora solo viéndola en el escenario. Inspirada en la película de Burlesque de Cher y Christina Aguilera que ambas adoran.