Prólogo

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Quizá todo esto se pudo evitar.

 Tal vez no debí dejarme llevar por sus hermosos e inusuales ojos, pero no pude evitarlo, todo en ella fue misterioso al principio, diré que eso fue lo que llamó mi atención, pero sé que no.

Sé que lo que realmente llamó mi atención fue la forma en que jugó conmigo, con mi mente; la forma en que me miraba.

Sus hermosos ojos reflejaban el infierno que estábamos destinados a vivir.

Sé que es noche fue la mejor, para ambos, todo fue gracias a esa noche de fiesta.  
Pero, aún así no estaba preparado para lo que estaba ocurriendo, y se lo hice saber de la peor manera posible.


°•°•

¡Solo quiero que salgas de mi vida!

—¡Finalmente estamos de acuerdo en algo, yo también quiero largarme de ella!  —y eso era verdad, jamás estábamos de acuerdo en algo.

—¿Y qué te detiene para hacerlo de una buena vez?

—El bendito hijo que estoy esperando de ti. —y ahí, la realidad me golpeó fuertemente, por enésima vez en el día— ¿Quieres que siga? —dijo notablemente afectada al ver mi silencio—. No eres único que quiere alejarse, pero los dos sabemos las consecuencias de eso.

Otro golpe a mi realidad. No estaba con cualquier chica, estaba con la hija de uno de los socios mayores de Nickelodeon.

Otro de mis enormes errores.

—Creo que debimos pensar mejor en lo que nos esperaba. —susurró antes de girar e irse a la habitación.

Sal De Mi VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora